El diario venezolano El Nacional dejó hoy de lado la salud del presidente Hugo Chávez y puso sobre la mesa un tema de igual preocupación: la salud de PDVESA, cuyas exportaciones representan el 90 por ciento de los ingresos de Venezuela.
“En ambos casos se trata de un secreto bien guardado y se sabe que la enfermedad es grave, pero el pronóstico se mantiene en reserva”, afirmó El Nacional en un comentario editorial.
Desde hace varios años la salud económica de PDVESA se ha visto afectada por los planes sociales auspiciados por el gobierno de Chávez y los desembolsos a sus aliados de la región, que ha depositado sobre los hombros de la petrolera estatal la responsabilidad de financiarlos.
“En relación con el mandatario se alegan razones de respeto a la privacidad para no dar noticias. Con respecto a Pdvsa esa excusa no es válida, porque se trata de la primera industria nacional y de una empresa pública. Datos tan elementales como los niveles de producción permanecen en el misterio, porque aun cuando se suministran cifras, estas no concuerdan con las de observadores independientes, por ejemplo la OPEP”, indica el editorial.
Un reporte de PDVSA, publicado en 2008, informó que sus cuentas sin pagar ascendieron un 39% durante los primeros nueve meses del 2007, llegando a los $7,860 millones de dólares en septiembre de ese mismo año.
Desde entonces las cosas han empeorado. A mediados del año pasado la prensa venezolana informaba que PDVSA no había difundido cifras actualizadas sobre sus deudas a proveedores, “que al cierre de junio del 2011 sumaron $9,290 millones de dólares, un récord máximo para un semestre”.
El Nacional afirma que “la situación de la petrolera estatal provoca angustia” cuando se analizan las cifras oficiales. Destaca el rotativo que de los 3,13 millones de barriles diarios que PDVESA declara producir, no recibe pago por 1,35 millones (43% del total). El diario atribuye esa situación a que el casi medio millón de barriles diarios que se exportan a China ya fueron pagados con prestamos del país asiático “que el gobierno de Chávez destina a su arbitrio, y sin rendir cuenta a nadie”.
“PDVSA tampoco cobra el petróleo que envía a Cuba, el cual se cancela con médicos, entrenadores deportivos y otros burócratas antillanos, cuyas actividades permanecen en la penumbra”, subraya el editorial que recuerda cómo las exportaciones del petróleo venezolano a países del Caribe y América Central se financian “a larguísimo plazo y con muy bajos intereses”.
“A lo que hay que añadir lo que regala por razones políticas a gente tan disímil como Daniel Ortega y el hijo de los Kennedy, en Estados Unidos, y el inmenso subsidio que otorga para el consumo interno de casi medio millón de barriles diarios Con estos pocos datos no es de extrañar que se hayan prácticamente abandonado las inversiones y el mantenimiento de la empresa”, asegura el editorial.
Expertos financieros de la industria petrolera han señalado en fechas recientes que los impagos de PDVESA a sus acreedores han desalentado las inversiones y mantenimiento en sus instalaciones, y en especial en la Franja del Orinoco, donde el gobierno de Chávez cifró sus esperanzas de aumentar la producción de crudo.
El pasado mes de febrero los directivos de PDVESA anunciaron que este año elevarían a 3.5 millones de barriles diarios su extracción petrolera que en la actualidad apenas alcanza los tres millones. Chávez proclamó esa meta como el mayor incremento anual logrado durante sus 13 años de gobierno. El editorial de El Nacional, describe una realidad diferente.
“Lo que preocupa es que Pdvsa, sólo para sobrevivir en tan precarias condiciones, se endeuda cada vez, con lo que compromete seriamente su salud financiera e incluso la soberanía nacional sobre la industria petrolera”, afirmó el editorial y concluyó diciendo que la enfermedad que padece PDVSA “ parece haber hecho metástasis en todos sus resquicios”.
“En ambos casos se trata de un secreto bien guardado y se sabe que la enfermedad es grave, pero el pronóstico se mantiene en reserva”, afirmó El Nacional en un comentario editorial.
Desde hace varios años la salud económica de PDVESA se ha visto afectada por los planes sociales auspiciados por el gobierno de Chávez y los desembolsos a sus aliados de la región, que ha depositado sobre los hombros de la petrolera estatal la responsabilidad de financiarlos.
“En relación con el mandatario se alegan razones de respeto a la privacidad para no dar noticias. Con respecto a Pdvsa esa excusa no es válida, porque se trata de la primera industria nacional y de una empresa pública. Datos tan elementales como los niveles de producción permanecen en el misterio, porque aun cuando se suministran cifras, estas no concuerdan con las de observadores independientes, por ejemplo la OPEP”, indica el editorial.
Un reporte de PDVSA, publicado en 2008, informó que sus cuentas sin pagar ascendieron un 39% durante los primeros nueve meses del 2007, llegando a los $7,860 millones de dólares en septiembre de ese mismo año.
Desde entonces las cosas han empeorado. A mediados del año pasado la prensa venezolana informaba que PDVSA no había difundido cifras actualizadas sobre sus deudas a proveedores, “que al cierre de junio del 2011 sumaron $9,290 millones de dólares, un récord máximo para un semestre”.
El Nacional afirma que “la situación de la petrolera estatal provoca angustia” cuando se analizan las cifras oficiales. Destaca el rotativo que de los 3,13 millones de barriles diarios que PDVESA declara producir, no recibe pago por 1,35 millones (43% del total). El diario atribuye esa situación a que el casi medio millón de barriles diarios que se exportan a China ya fueron pagados con prestamos del país asiático “que el gobierno de Chávez destina a su arbitrio, y sin rendir cuenta a nadie”.
“PDVSA tampoco cobra el petróleo que envía a Cuba, el cual se cancela con médicos, entrenadores deportivos y otros burócratas antillanos, cuyas actividades permanecen en la penumbra”, subraya el editorial que recuerda cómo las exportaciones del petróleo venezolano a países del Caribe y América Central se financian “a larguísimo plazo y con muy bajos intereses”.
“A lo que hay que añadir lo que regala por razones políticas a gente tan disímil como Daniel Ortega y el hijo de los Kennedy, en Estados Unidos, y el inmenso subsidio que otorga para el consumo interno de casi medio millón de barriles diarios Con estos pocos datos no es de extrañar que se hayan prácticamente abandonado las inversiones y el mantenimiento de la empresa”, asegura el editorial.
Expertos financieros de la industria petrolera han señalado en fechas recientes que los impagos de PDVESA a sus acreedores han desalentado las inversiones y mantenimiento en sus instalaciones, y en especial en la Franja del Orinoco, donde el gobierno de Chávez cifró sus esperanzas de aumentar la producción de crudo.
El pasado mes de febrero los directivos de PDVESA anunciaron que este año elevarían a 3.5 millones de barriles diarios su extracción petrolera que en la actualidad apenas alcanza los tres millones. Chávez proclamó esa meta como el mayor incremento anual logrado durante sus 13 años de gobierno. El editorial de El Nacional, describe una realidad diferente.
“Lo que preocupa es que Pdvsa, sólo para sobrevivir en tan precarias condiciones, se endeuda cada vez, con lo que compromete seriamente su salud financiera e incluso la soberanía nacional sobre la industria petrolera”, afirmó el editorial y concluyó diciendo que la enfermedad que padece PDVSA “ parece haber hecho metástasis en todos sus resquicios”.