“No he tenido conocimiento de eso que dice el periódico Granma (de que mejoran las instalaciones escolares para el próximo curso) y bueno, hasta ahora no he visto de que estén arreglando ninguna escuela. En este caso mi niño comienza el pre-escolar, va para la Escuela Primaria Pepito Tey en el Reparto Virginia, en Villa Clara, y el grande que tiene 12 años va para la secundaria Gerardo Abreu y hasta el momento no tenemos conocimiento y tampoco he visto de que estén arreglando este centro escolar”, señaló la opositora Idania Yánez Contreras.
Yánez Contreras señaló a martinoticias.com que le preocupa mucho su hijo mayor “que va para el primer año de secundaria, porque a estos niños “les ofertan una merienda escolar que prácticamente lo que desnutre a los niños; es un vaso de yogurt de soya (que en muchos casos llega en malas condiciones) que los niños no se lo toman. Además, un pan con algún perro caliente, una lasquita de mortadela, sin nada más”.
Agregó que algunos padres han manifestado su descontento, porque esta merienda escolar es el único alimento que reciben los niños entre las 7 de la mañana y las 4 de la tarde
Yánez Contreras dijo que “hasta ahora no he visto que estén ampliando las aulas ni arreglando las puertas”.
Manifestó que “la higiene es bastante pésima” y que las condiciones de los baños son deprimentes tanto para los niños de primaria como para los de secundaria. Recordó que cuando su hijo estudiaba en la Escuela Primaria Pepito Tey, las autoridades no tenían dinero para pagarle a un auxiliar de limpieza “y le pedían apoyo a los padres para que fueran a limpiar las aulas, porque la higiene era pésima”.
Jorge Luis Leyva Velasco, quien reside en Velasco, municipio Gibara, en la provincia de Holguín, dijo que “aquí los comedores están en mal estado” y que él no ha visto “que hayan arreglado nada ni pintura tampoco”. Al igual que Yánez Contreras lamentó que el Gobierno haya reemplazado los almuerzos por una merienda escolar.
“Los muchachos están más de 8 horas en la escuela y pasan hambre, porque lo que les dan es un yogurt y un pan grande y muchas veces está el yogurt en mal estado (…) y aquí hay una situación con los niños terrible, no tienen zapatos para ir a la escuela, no los ayudan en nada”, indicó.
Daylín, su esposa, agregó que “hasta el momento no hemos visto ningún arreglo; las mesas están en mal estado y las sillas rotas. Agregó que a veces las autoridades escolares se las entregan a los alumnos para que sus padres las arreglen.
Yánez Contreras señaló a martinoticias.com que le preocupa mucho su hijo mayor “que va para el primer año de secundaria, porque a estos niños “les ofertan una merienda escolar que prácticamente lo que desnutre a los niños; es un vaso de yogurt de soya (que en muchos casos llega en malas condiciones) que los niños no se lo toman. Además, un pan con algún perro caliente, una lasquita de mortadela, sin nada más”.
Agregó que algunos padres han manifestado su descontento, porque esta merienda escolar es el único alimento que reciben los niños entre las 7 de la mañana y las 4 de la tarde
Yánez Contreras dijo que “hasta ahora no he visto que estén ampliando las aulas ni arreglando las puertas”.
Manifestó que “la higiene es bastante pésima” y que las condiciones de los baños son deprimentes tanto para los niños de primaria como para los de secundaria. Recordó que cuando su hijo estudiaba en la Escuela Primaria Pepito Tey, las autoridades no tenían dinero para pagarle a un auxiliar de limpieza “y le pedían apoyo a los padres para que fueran a limpiar las aulas, porque la higiene era pésima”.
Jorge Luis Leyva Velasco, quien reside en Velasco, municipio Gibara, en la provincia de Holguín, dijo que “aquí los comedores están en mal estado” y que él no ha visto “que hayan arreglado nada ni pintura tampoco”. Al igual que Yánez Contreras lamentó que el Gobierno haya reemplazado los almuerzos por una merienda escolar.
“Los muchachos están más de 8 horas en la escuela y pasan hambre, porque lo que les dan es un yogurt y un pan grande y muchas veces está el yogurt en mal estado (…) y aquí hay una situación con los niños terrible, no tienen zapatos para ir a la escuela, no los ayudan en nada”, indicó.
Daylín, su esposa, agregó que “hasta el momento no hemos visto ningún arreglo; las mesas están en mal estado y las sillas rotas. Agregó que a veces las autoridades escolares se las entregan a los alumnos para que sus padres las arreglen.