Periodistas italianos entraron a Cuba como turistas para investigar crimen

Los tres periodistas italianos arrestados en Cuba habrían violado su estatus migratorio en la isla, al ingresar con visado de turistas y dedicarse a hacer una investigación periodística sobre el presunto asesinato por dos cubanos de una pareja de ancianos en su país.

Fuentes diplomáticas italianas en La Habana han confirmado lo anterior. El embajador interino de Italia, Pietro De Martin, dijo al diario Messagero Veneto, --cuyo reportero Domenico Pecile es uno de los detenidos-- que el juez cubano que atendió el caso se encuentra evaluando su severidad y plausibilidad. De Martin comentó que la transgresión es considerada grave, pero generalmente termina con la expulsión de Cuba de los implicados.

Mientras tanto, la agencia AFP afirma, citando una fuente de la cancillería en Roma, que los comunicadores ya fueron liberados, y añade que la embajada italiana en La Habana ya se puso en contacto con sus familiares para darles la noticia. Pero la misma fuente precisó que dependerá de las autoridades cubanas autorizar a los cuatro periodistas a permanecer en el país, o enviarlos de vuelta a Italia.

En la capital cubana, una fuente de la Embajada de Italia consultada por la agencia Efe remarcó que los periodistas se encuentran "en condición de libertad pero a disposición de las autoridades". La embajada no había podido hablar con los detenidos, quienes
fueron citados para comparecer este sábado ante un tribunal de La Habana.

La noche del viernes, cuando se proponían regresar a La Habana desde la llamada "Villa de los tinajones", fueron detenidos además de Pecile, la periodista del grupo Mediaset Ilaria Cavo, y el camarógrafo que la acompañaba, Fabio Tricarico; mientras que el fotógrafo del diario Corriere della Sera, Stéfano Cavicchi, fue puesto en libertad tras diez horas de interrogatorio en la sede del Ministerio del Interior en Camagüey, retenido por "irregularidades en su visado".

Cavicchi contó el viernes al telediario Tgcom24 que seis hombres irrumpieron en el apartamento en Camagüey, de Reiver Laborde Rico --uno de los dos acusados por el crimen en Lignano-- donde se encontraban realizando las entrevistas, y retiraron y requisaron las tarjetas de la videocámara de Tricarico y la cámara fotográfica de Cavicchi .

En un contacto telefónico con Mesaggero Veneto, el fotorreportero de Corriere della Sera explicó que a él se le permitió irse a un hotel en espera del juicio, pero sus tres colegas fueron conducidos a una "casa particular", o apartamento de propiedad privada. Los cuatro pasaportes les fueron confiscados, y también, sus teléfonos móviles. Cavicchi se queja además de que han destruido evidencias del crimen que tenía en su cámara.

Los periodistas habían viajado a Cuba para entrevistar a Reiver, de 24 años, hermano de la cubana Lisandra Laborde Rico, la asesina confesa de un matrimonio italiano el pasado 19 de agosto en Lignano Sabbiadoro, en el norte de Italia. Reiver también está acusado por la Justicia italiana de haber participado en el asesinato.

Rosetta Sostero y Paolo Burgato fueron hallados degollados el pasado 19 de agosto en su domicilio, y según los investigadores, conocían a los asaltantes.

Lisandra, residente en Italia desde hace más de diez años y vecina de la pareja de ancianos, confesó ser la autora del asesinato tras ser arrestada por la policía de Carabineros el 16 de septiembre. Desde entonces, las autoridades italianas buscaban a su hermano, de quien luego se supo que había regresado a Cuba.

El arresto de la joven fue posible gracias a los análisis de ADN de muestras halladas en el lugar de los hechos, que revelaron, además, que los autores del crimen fueron un hombre y una mujer.

Los investigadores creen que el motivo del crimen fue un intento de robo que fracasó y que acabó en el doble asesinato.

Claudio Brachino, director del programa dominical Videonews para el cual trabajaba Cavo, aseguró que "Ilaria no hizo nada ilegal, sólo realizó entrevistas completamente legítimas".


El Centro de Prensa Internacional del MINREX y el Departamento de Inmigración de Cuba exigen a los periodistas extranjeros tramitar visas y credenciales de prensa. El recurso de entrar a la isla como turistas suele suele ser utilizado por informadores foráneos cuando desean reportar un asunto que molesta al gobierno cubano.

Mientras tanto, Reiver Laborde ha rechazado todas las acusaciones relacionadas con su complicidad en el homicidio de Sostero y Burgatto. Sus declaraciones fueron recogidas por Pecile, el enviado del Mesaggero Veneto, que lo entrevistó en Camagüey.

"Estoy tranquilo, yo no he hecho nada", dijo Reiver. "Yo partí de Lignano el 19 de agosto. Me detuve en Salerno y luego seguí viaje a Cuba ¿Fugitivo yo? ¿Cómo es eso? Tuve que volver para estar con mi esposa porque estaba por nacer nuestra segunda hija: nació el 24 de agosto. La noche del asesinato yo estaba en mi casa, tranquilo, esperando para partir".

Sobre la inocencia de Lisandra, que en su confesión lo implica en el homicidio, no tiene dudas: "Si mi hermana ha dicho eso, lo ha dicho porque la obligaron. Lo que sucedió en esa casa es obra de personas temerarias. Ella no sería capaz de hacer algo así. La amenazaron".

"Si mi madre viniera, repetiría lo mismo que le estoy diciendo. Yo no tengo nada que ver con el crimen. No estoy fugitivo en Cuba, estoy aquí porque estaba por nacer mi segunda hija . Se lo dije a todo el mundo, incluso a la dueña de mi sala de juegos"

"No era mi intención en absoluto que las cosas acabaran así", dijo Lisandra durante el interrogatorio, según informes de su abogado, Charles Serbelloni.

Los hermanos vivían en Italia desde 2009 y trabajaban en la heladería “El rey del helado”, propiedad de su madre, Emilia Sandra Rico, y su esposo, un italiano con quien tiene dos hijos. El establecimiento está justo frente al negocio de las víctimas.

Según los investigadores, hay indicios de que los dos ancianos fueron torturados en el garaje-lavadero de la vivienda antes de ser asesinados.

La policía italiana cree que el crimen fue resultado de un intento de robo que fracasó (los asesinos no pudieron encontrar 90 mil euros que el matrimonio guardaba en la casa) y que acabó en el doble asesinato, luego que uno de los cónyuges reconociera a los asaltantes.

La justicia italiana inició contactos con las autoridades cubanas para pedir la extradición de Reiver, un proceso que pudiera ser complejo pues ambos países no cuentan con un tratado sobre dicho procedimiento.