Los esfuerzos del gobierno de Raúl Castro para reducir las nóminas estatales e impulsar el empleo en el sector privado rindieron frutos desiguales en 2012, al cuadruplicar el incremento de la esfera privada el monto de los recortes en el sector público.
La agencia Reuters informa que el ministro de Economía de la isla, Adel Izquierdo, reportó a la Asamblea Nacional de Cuba en su segunda sesión del año que el empleo en el sector "no estatal" aumentó 23 por ciento, mientras que las plantillas estatales se redujeron en 5,7 por ciento.
El informe precisó que en 2012 se recortaron 228.000 plazas estatales, comparadas con 137.000 el año anterior. El gobierno aspira a reducir sus nóminas en un 20 por ciento, o casi un millón de empleos, para 2016.
Mientras tanto, el número de trabajadores del sector privado se elevó a cerca de 1 millón 100 mil personas, el doble que hace dos años. En este sector, que el gobierno llama "no estatal", la mayoría son agricultores (610.000), y el resto lo componen los propietarios y empleados de pequeños negocios por cuenta propia, y trabajadores individuales autónomos como carpinteros, costureras, fotógrafos y taxistas.
La semana pasada el diario oficialista Juventud Rebelde informó que hasta el pasado 30 de noviembre había 398.447 cubanos ejercíendo el trabajo por cuenta propia, de los cuales sólo el 17 por ciento (unos 68.000) procedía del sector estatal, mientras que 68 por ciento declaró no tener vínculo laboral anterior y 15 por ciento eran jubilados.
A partir del 2013 integrarán también el sector “no estatal” los integrantes de cooperativas privadas no agrícolas, comenzando por unas 200 en actividades que van desde la gastronomía hasta la cría de camarones o la producción de materiales de construcción. Sus miembros arrendarán locales del Estado y comprarán a éste suministros.
Por otra parte, Izquierdo reveló en su informe que el desempleo en Cuba alcanzó en 2012 un nivel récord de 3,8 por ciento, o poco más de 250.000 personas, de una fuerza laboral que se calcula en 6,8 millones.
La cifra es mayor que la más reciente calculada por la Comisión Económica para América Latina, CEPAL.
En su “Balance preliminar de las economías de América Latina y el Caribe 2012” la entidad regional situaba el desempleo en la isla entre 3,2 y 3,4 por ciento “en un contexto de ralentización del proceso de relocalización de los trabajadores excedentarios del sector estatal, y de aumento del trabajo por cuenta propia”
Según Reuters, el ministro de Economía admitió en su informe a la Asamblea Nacional que el 3,8 por ciento de desempleo reportado no incluye a un millón de cubanos que "no buscan activamente empleo".
CIFRAS INQUIETANTES
Si bien la cifra de desempleo reconocida es más realista que en el pasado, cuando se reportaba poco más de un 1 por ciento, los dos grupos --250.000 desempleados y un millón de desinteresados en trabajar-- arrojan una inquietante sumatoria de cubanos en edad de trabajar pero laboralmente inactivos.
El economista cubano radicado en Valencia Elías Amor Bravo señaló a martinoticias otro problema laboral truculento de la economía cubana: el subempleo. Se manifiesta cuando, como sucede en Cuba, las empresas y otras entidades económicas tienen más empleados en sus plantillas que los necesarios para producir de forma eficiente.
"Al no existir relación entre productividad y salario, como en las economías de mercado, cualquiera que acepte el salario que se ofrece --12 euros o 18 dólares al mes-- puede trabajar, o creer que lo hace. En una economía de mercado estas personas estarían en el desempleo registrado, pues las empresas tendrían que ajustar sus plantillas para obtener productividad y ser rentables", señaló.
El profesor Amor Bravo ofrece un caso práctico ilustrativo: los hoteles gestionados en Cuba por cadenas españolas prescindieron de más de la mitad de los empleados cuando se hicieron cargo de la gestión.
Añade el economista que si el subempleo se calculara para el conjunto de la economía cubana, se podría estimar una tasa de desempleo de cerca del 30% de la población activa en edad de trabajar.
Aún así, la cifra no incluiría a los cubanos que no buscan activamente empleo, entre los cuales se cuentan numerosos jóvenes que sólo "trabajan" esporádicamente en la economía informal; amas de casa; e incluso jubilados en plenitud de facultades mentales y físicas.
La agencia Reuters informa que el ministro de Economía de la isla, Adel Izquierdo, reportó a la Asamblea Nacional de Cuba en su segunda sesión del año que el empleo en el sector "no estatal" aumentó 23 por ciento, mientras que las plantillas estatales se redujeron en 5,7 por ciento.
El informe precisó que en 2012 se recortaron 228.000 plazas estatales, comparadas con 137.000 el año anterior. El gobierno aspira a reducir sus nóminas en un 20 por ciento, o casi un millón de empleos, para 2016.
Mientras tanto, el número de trabajadores del sector privado se elevó a cerca de 1 millón 100 mil personas, el doble que hace dos años. En este sector, que el gobierno llama "no estatal", la mayoría son agricultores (610.000), y el resto lo componen los propietarios y empleados de pequeños negocios por cuenta propia, y trabajadores individuales autónomos como carpinteros, costureras, fotógrafos y taxistas.
La semana pasada el diario oficialista Juventud Rebelde informó que hasta el pasado 30 de noviembre había 398.447 cubanos ejercíendo el trabajo por cuenta propia, de los cuales sólo el 17 por ciento (unos 68.000) procedía del sector estatal, mientras que 68 por ciento declaró no tener vínculo laboral anterior y 15 por ciento eran jubilados.
A partir del 2013 integrarán también el sector “no estatal” los integrantes de cooperativas privadas no agrícolas, comenzando por unas 200 en actividades que van desde la gastronomía hasta la cría de camarones o la producción de materiales de construcción. Sus miembros arrendarán locales del Estado y comprarán a éste suministros.
Por otra parte, Izquierdo reveló en su informe que el desempleo en Cuba alcanzó en 2012 un nivel récord de 3,8 por ciento, o poco más de 250.000 personas, de una fuerza laboral que se calcula en 6,8 millones.
La cifra es mayor que la más reciente calculada por la Comisión Económica para América Latina, CEPAL.
En su “Balance preliminar de las economías de América Latina y el Caribe 2012” la entidad regional situaba el desempleo en la isla entre 3,2 y 3,4 por ciento “en un contexto de ralentización del proceso de relocalización de los trabajadores excedentarios del sector estatal, y de aumento del trabajo por cuenta propia”
Según Reuters, el ministro de Economía admitió en su informe a la Asamblea Nacional que el 3,8 por ciento de desempleo reportado no incluye a un millón de cubanos que "no buscan activamente empleo".
CIFRAS INQUIETANTES
Si bien la cifra de desempleo reconocida es más realista que en el pasado, cuando se reportaba poco más de un 1 por ciento, los dos grupos --250.000 desempleados y un millón de desinteresados en trabajar-- arrojan una inquietante sumatoria de cubanos en edad de trabajar pero laboralmente inactivos.
El economista cubano radicado en Valencia Elías Amor Bravo señaló a martinoticias otro problema laboral truculento de la economía cubana: el subempleo. Se manifiesta cuando, como sucede en Cuba, las empresas y otras entidades económicas tienen más empleados en sus plantillas que los necesarios para producir de forma eficiente.
"Al no existir relación entre productividad y salario, como en las economías de mercado, cualquiera que acepte el salario que se ofrece --12 euros o 18 dólares al mes-- puede trabajar, o creer que lo hace. En una economía de mercado estas personas estarían en el desempleo registrado, pues las empresas tendrían que ajustar sus plantillas para obtener productividad y ser rentables", señaló.
El profesor Amor Bravo ofrece un caso práctico ilustrativo: los hoteles gestionados en Cuba por cadenas españolas prescindieron de más de la mitad de los empleados cuando se hicieron cargo de la gestión.
Añade el economista que si el subempleo se calculara para el conjunto de la economía cubana, se podría estimar una tasa de desempleo de cerca del 30% de la población activa en edad de trabajar.
Aún así, la cifra no incluiría a los cubanos que no buscan activamente empleo, entre los cuales se cuentan numerosos jóvenes que sólo "trabajan" esporádicamente en la economía informal; amas de casa; e incluso jubilados en plenitud de facultades mentales y físicas.