Tuve la gran suerte de cubrir personalmente en el juego de los Marlins de Miami vs. Filis de Filadelfia el jueves por la tarde.
Los Marlins ganaron el partido con una carrera en la última del noveno episodio para dejar en el campo a los visitantes 4:3 ante más de 26 mil aficionados en una tarde mágica que parecía más bien un día feriado que un simple jueves común y corriente.
Hubo un increíble ambiente de fiesta. Este servidor que ha estado en por lo menos 30 juegos de los Marlins, en 2 estadios distintos, nunca había visto algo semejante.
¿Qué fue lo que hicieron los Marlins para que este día fuera tan especial y no un partido como tantos con solamente 12 mil fanáticos?
Muy fácil, llenaron el estadio con 20 mil niños de escuela primaria que celebraban a grito pelado cada imparable de los Marlins como si fuera el séptimo juego de la Serie Mundial. Esto para los niños escolares fue una genuina experiencia cultural.
La ficha técnica del partido:
MARLINS 4:3 FILADELFIA
El ganador fue el relevista taponero: Cishek (4-1) lo perdió Dierkman (2-2) jonrones: Miami Ozuna (8). Filadelfia Byrd (6)
El techo permaneció cerrado durante todo el partido y no necesariamente por el calor sino más bien por el sol.
La temperatura adentro del estadio: 72 grados, afuera, 79.
Los 20 mil estudiantes estaban sentados por secciones. Cada colegio en un sector distinto. Cada escuela con una camiseta de color brillante para no confundirse con las demás.
De vez en cuando en la gigantesca pizarra ponían el nombre de los colegios y los muchachos gritaban más que nunca. A veces era para ponerse tapones en los oídos.
Al finalizar el partido, (como a las 3:15 pm) los niños abandonaron el estadio por secciones en correcta fila y con un orden como si fueran cadetes o militares. Cada escuela con su autobús amarillo.
Fue una tarde mágica en Miami. Para rematar, los Marlins ganaron el partido en forma dramática.
¿Cuándo será la próxima vez que el estadio de los Marlins viva una tarde así?
Espero que me toque trabajar ese juego.
Los Marlins ganaron el partido con una carrera en la última del noveno episodio para dejar en el campo a los visitantes 4:3 ante más de 26 mil aficionados en una tarde mágica que parecía más bien un día feriado que un simple jueves común y corriente.
Hubo un increíble ambiente de fiesta. Este servidor que ha estado en por lo menos 30 juegos de los Marlins, en 2 estadios distintos, nunca había visto algo semejante.
¿Qué fue lo que hicieron los Marlins para que este día fuera tan especial y no un partido como tantos con solamente 12 mil fanáticos?
Muy fácil, llenaron el estadio con 20 mil niños de escuela primaria que celebraban a grito pelado cada imparable de los Marlins como si fuera el séptimo juego de la Serie Mundial. Esto para los niños escolares fue una genuina experiencia cultural.
La ficha técnica del partido:
MARLINS 4:3 FILADELFIA
El ganador fue el relevista taponero: Cishek (4-1) lo perdió Dierkman (2-2) jonrones: Miami Ozuna (8). Filadelfia Byrd (6)
El techo permaneció cerrado durante todo el partido y no necesariamente por el calor sino más bien por el sol.
La temperatura adentro del estadio: 72 grados, afuera, 79.
Los 20 mil estudiantes estaban sentados por secciones. Cada colegio en un sector distinto. Cada escuela con una camiseta de color brillante para no confundirse con las demás.
De vez en cuando en la gigantesca pizarra ponían el nombre de los colegios y los muchachos gritaban más que nunca. A veces era para ponerse tapones en los oídos.
Al finalizar el partido, (como a las 3:15 pm) los niños abandonaron el estadio por secciones en correcta fila y con un orden como si fueran cadetes o militares. Cada escuela con su autobús amarillo.
Fue una tarde mágica en Miami. Para rematar, los Marlins ganaron el partido en forma dramática.
¿Cuándo será la próxima vez que el estadio de los Marlins viva una tarde así?
Espero que me toque trabajar ese juego.