El presidente estadounidense Joe Biden ordenó este martes que su equipo de Seguridad Nacional identifique para finales de febrero a los funcionarios en mayor riesgo de sufrir el llamado "Síndrome de La Habana".
En un memorando a seis miembros de su gabinete, Biden nombró al Director Principal de Programas de Inteligencia para el personal del Consejo de Seguridad Nacional al cargo de Coordinador Interinstitucional de Incidentes de Salud Anómalos.
La función la desempeñará Maher Bitar, que ejerce como director sénior de programas de inteligencia en el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
También les pidió a los directores de las 6 agencias que tomen medidas rápidas para designar a un alto funcionario adecuado que se desempeñe como líder de coordinación en sus respectivas agencias, añadiendo que dicho funcionario trabajará en estrecha colaboración con el Coordinador Interinstitucional.
El presidente Biden ordenó, además, que a más tardar el 25 de febrero de 2022 se emita una guía actualizada para los elementos de la fuerza laboral que están en riesgo de exposición a los incidentes de salud anómalos, y que dicha guía debe desarrollarse y publicarse en estrecha coordinación con el Coordinador Interinstitucional.
Añadió que la rápida implementación de las disposiciones servirá como una demostración importante del compromiso continuo de la administración con la fuerza laboral, y para mejorar la respuesta del gobierno de los Estados Unidos a los incidentes de salud anómalos.
Las agencias que deben identificar a esos funcionarios vulnerables son los Departamentos de Estado, Defensa, Justicia y Seguridad Nacional; además de la Agencia Central de Inteligencia y la Oficina de la Directora Nacional de Inteligencia
Más de 200 diplomáticos y funcionarios estadounidenses destinados a diferentes países han padecido síntomas del "Síndrome de la Habana", llamado así por ser en esa ciudad donde se detectaron por primera vez los extraños problemas de salud en 2016.
Los afectados por esos incidentes -registrados en países como Cuba, China, Austria y Colombia, además de en Washington- padecieron mareos, dolores de cabeza y falta de capacidad de concentración, que enalgunos casos extremos les han forzado a retirarse.
Hace dos semanas, varios medios estadounidenses informaron que la CIA ha descartado que esos problemas sean el resultado de una campaña dirigida por un país enemigo de Estados Unidos.
El origen y el responsable de estos misteriosos "ataques" aún se desconocen, según dijo recientemente el Secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken.
(Con información de la agencia EFE)