La presidenta de Perú, Dina Boluarte, amplió el estado de emergencia que suspende algunos derechos fundamentales de los ciudadanos ante la propagación de las protestas contra su gobierno, en las que ya han muerto casi 50 personas.
Las movilizaciones comenzaron en diciembre, apenas asumió el poder, tras la destitución de su antecesor, Pedro Castillo, por haber intentado cerrar el Congreso de forma ilegal.
El gobierno de Boluarte decretó estado de emergencia desde este domingo, 15 de enero, y durante 30 días, en tres departamentos, tres provincias y un distrito del país andino.
La presidenta peruana enfatizó en un mensaje televisado el viernes que "no renunciará al cargo" pese a la creciente presión política, las decenas de muertos en las protestas, cientos de heridos, mayoritariamente civiles, y cientos de detenidos.
Las protestas -que exigen un adelanto de elecciones generales, la renuncia de Boluarte y el cierre del Congreso- tomaron un nuevo impulso la semana pasada después de una tregua parcial de los manifestantes por las fiestas de fin de año.
(Con información de AFP y EFE)
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