En medio de las crecientes preocupaciones por las deportaciones y los cambios en las políticas migratorias en Estados Unidos, la organización Solidaridad Sin Fronteras (SSF) ha lanzado una iniciativa para ayudar a los profesionales de la salud que se encuentran en situación migratoria incierta.
Así lo anunció su presidente, el doctor Julio César Alfonso, quien ha encabezado gestiones en Washington para buscar una solución legislativa que permita a estos trabajadores estabilizar su estatus en el país.
Un llamado a la acción en Washington
El doctor Alfonso explicó que recientemente sostuvo reuniones con la congresista María Elvira Salazar y otros legisladores latinos en el Congreso de EEUU con el objetivo de impulsar medidas que beneficien a médicos, enfermeros y personal sanitario, no solo cubanos, sino también venezolanos, nicaragüenses y haitianos que buscan regularizar su situación migratoria.
“Debido a las nuevas regulaciones migratorias, muchas personas se encuentran en un limbo legal. Queremos ayudar a quienes tienen un estatus indefinido, incluyendo a los cubanos con la I-220A y aquellos con orden de deportación”, afirmó Alfonso.
La organización también trabaja en estrategias para beneficiar a profesionales bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS) y otros programas de amparo migratorio.
Reactivar el programa de Parole para médicos cubanos
Una de las principales demandas de SSF es la reactivación del programa Cuban Medical Professional Parole (CMPP), que estuvo vigente desde 2006 hasta 2017, cuando fue eliminado por la administración de Barack Obama. Este programa permitía a médicos cubanos que escapaban de las misiones del régimen solicitar un permiso especial para establecerse legalmente en Estados Unidos.
“Estos profesionales huyen de un sistema de esclavitud moderna. Son víctimas de persecución y de un modelo que los explota, reteniendo la mayor parte de sus salarios y limitando su libertad de movimiento. Muchos de ellos tienen una preparación altamente calificada y podrían ser de gran beneficio para el sistema de salud estadounidense, que enfrenta una escasez crítica de personal”, explicó Alfonso.
Según el presidente de SSF, reactivar este mecanismo permitiría una migración organizada y legal, alineada con las políticas de seguridad nacional de EEUU, que buscan evitar la entrada de elementos criminales.
“Si un inmigrante adquiere un título universitario, debería tener la oportunidad de regularizarse, como ha planteado el expresidente Donald Trump en el pasado”, añadió.
Creación de un registro para profesionales de la salud
Como parte de esta iniciativa, SSF está creando una base de datos con los nombres y credenciales de los profesionales de la salud que buscan regularizar su estatus. Esta información será enviada al Departamento de Seguridad Nacional y a legisladores en el Congreso para demostrar la importancia de permitir que estos trabajadores permanezcan en el país.
Alfonso también hizo un llamado a los afectados para que se registren en esta lista, que está siendo verificada minuciosamente. “Queremos demostrar que estos profesionales son personas sin antecedentes criminales, con formación profesional válida y con un genuino interés en contribuir a la sociedad estadounidense”, señaló.
Mensaje de tranquilidad y apoyo legal
Ante el temor creciente de muchos médicos y enfermeros por las recientes políticas migratorias, el doctor Alfonso envió un mensaje de calma.
“Estados Unidos es un país de leyes. Si bien algunas medidas han sido intempestivas, a largo plazo se busca estructurar la migración de manera ordenada. Existen estatus de protección y mecanismos que pueden beneficiar a quienes cumplen con los requisitos”, enfatizó.
Para reforzar esta iniciativa, SSF ha sumado el apoyo de abogados especializados en inmigración.
“Es fundamental que quienes se encuentren en situación irregular busquen información y asesoría legal antes de tomar decisiones precipitadas. Estamos aquí para apoyarlos”, concluyó el doctor Alfonso.
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