El presidente de China, Xi Jinping, prometió el jueves $250.000 millones en inversiones en América Latina en los próximos 10 años, como parte de una campaña para aumentar la influencia de Pekín en una región dominada por largo tiempo por Estados Unidos.
Líderes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) –un bloque de 33 países en la región que excluye a Estados Unidos y Canadá– se reunieron en Pekín el jueves por primera vez para un foro de dos días.
Xi dijo en un discurso que el comercio bilateral entre China y América Latina está previsto que aumente a $500.000 millones en la próxima década.
"Yo creo que esta reunión logrará resultados fructíferos, dar al mundo una señal positiva sobre la profundización de la cooperación entre China y América Latina y tener un importante y extenso impacto en promover la cooperación sur-sur y la prosperidad en el mundo", dijo Xi.
El régimen de China y América Latina tienen cooperación en las áreas de energía, construcción de infraestructura, agricultura, manufacturas e innovación tecnológica, dijo Xi.
China está interesada en la región por sus recursos y mercados, dijo Deng Yuwen, un analista político en Pekín.
"Obviamente, China tiene la intención de competir con Estados Unidos por una mayor esfera de influencia en la región", dijo Deng. "Pero si esta estrategia debilitará la influencia de Estados Unidos ahora es difícil de juzgar", agregó.
Matt Ferchen, residente del Centro Carnegie-Tsinghua para Política Global, dijo que la acción de China no alarmaría a Washington, pues la mejora de los vínculos entre Estados Unidos y el régimen comunista de Cuba reforzará la influencia estadounidense.
"La realidad de vínculos económico-sociales, vínculos persona a persona, entre cualquier país en la región y Estados Unidos, es mucho más profunda que cualquier cosa que existe con China", sostuvo Ferchen.
"El acuerdo con Cuba cambia todo en términos de cómo Estados Unidos puede establecer una agenda positiva en la región", agregó.
China, la segunda mayor economía mundial, está comprando petróleo de Venezuela, cobre de Perú y Chile, y soja de Argentina y Brasil. A cambio, China ha inyectado miles de millones de dólares en inversiones en la región.
El presidente venezolano Nicolás Maduro dijo el miércoles que aseguró más de $20.000 millones en inversiones de China, mientras que Ecuador informó que obtuvo un total de $7.530 millones en líneas de crédito y préstamos de China.