A las 11:00 a.m. de este lunes 18 de noviembre el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, se dirigió al auditorio reunido en la Organización de Estados Americanos (OEA) en un discurso sobre la política de EEUU para el Hemisferio Occidental.
Al pronunciar su primer discurso dedicado específicamente a América Latina desde que ocupó el cargo en febrero, Kerry hizo hincapié en la necesidad de que el hemisferio se aboque a resolver los peligros que implica el calentamiento global. Además dijo que si bien son positivos los cambios ocurridos en Cuba al reducir restricciones para que los cubanos viajen y trabajen por su cuenta, "La Habana necesita hacer aún más".
Kerry mencionó la debilidad de las instituciones democráticas en Venezuela durante su alocución pronunciada en la sede de la OEA, pero la misión venezolana ante el organismo multilateral no asistió al evento. "Durante nuestra historia, varios presidentes han reforzado" la Doctrina Monroe, dijo Kerry, en alusión al postulado del presidente James Monroe que rigió la política exterior estadounidense hacia el hemisferio, según el cual Washington necesitaba actuar de manera unilateral en el hemisferio.
"Hoy hemos seleccionado una opción diferente. La era de la Doctrina Monroe se terminó", agregó. "La relación que vemos y la que nos esforzamos en mejorar no es una declaración estadounidense, sino se trata de todos los países viéndose como iguales, compartiendo responsabilidades y cooperando en seguridad".
El anuncio de Kerry coincide en líneas generales con el presentado por el presidente Barack Obama en la Conferencia de las Américas en Trinidad y Tobago en 2009, donde planteó la necesidad de cooperar de igual a igual.
Halagó a Colombia y Guatemala por sus logros en el combate al crimen organizado y dedicó un párrafo al tema que ha acaparado la atención en la palestra continental durante los últimos meses: las protestas presentadas por algunos gobernantes latinoamericanos debido al espionaje de las agencias estadounidenses. "Nuestros valores democráticos comunes nos han permitido enfrentar retos como las preocupaciones comprensibles sobre las filtraciones sobre espionaje, preocupaciones que nos llevan a pensar cómo avanzaremos y construiremos bases más fuertes para el futuro", indicó.
Kerry también se refirió a la importancia que para la región tendrá la celebración en Honduras de elecciones seguras y transparentes el próximo fin de semana.
Kerry comenzó agradeciendo a José Miguel Insulza, Secretario General de la OEA, por la acogida en la sede, así como a Diálogo Interamericano por la invitación. El secretario de Estado hizo referencia al Árbol de la Paz, sembrado en los jardines del edificio y que da crédito a las intenciones de la organización por estabilizar la paz en la región. El árbol fue sembrado por el presidente estadounidense William Howard Taft en 1910.
Al referirse a Cuba, dijo que se buscan soluciones creativas al intercambiar con la isla, como sucedió hace una semana (refiriéndose al encuentro del presidente Barack Obama con Berta Soler y Guillermo Fariñas). Los viajes de cientos de ciudadanos norteamericanos a Cuba, es un ejemplo de cómo se puede intercambiar de otra manera. "Nuestros ciudadanos son nuestros mejores embajadores", afirmó el Secretario de Estado.
En cuanto a los "cambios" que están ocurriendo en la isla, como son los permisos gubernamentales para que más ciudadanos cubanos viajen fuera del país, Kerry apuntó que es preciso "no cegarse" con tales modificaciones para seguir vigilando las conductas de los gobiernos autoritarios.
Los cubanos no pueden expresar libremente su voz, dijo en su discurso, y agregó que espera que llegue pronto el día en que puedan hacerlo, como lo hacen el conjunto de los ciudadanos en la región. "Los derechos de los cubanos están contemplados en la Carta Interamericana de Derechos Humanos y hay que hacerlos valer", y esos valores son desafiados todos los días.
Kerry señaló que desde su llegada a la Casa Blanca, el presidente Obama ha buscado "un nuevo comienzo" en las relaciones con Cuba, y reconoció que "nuestros gobiernos encuentran algo de cooperación en temas de interés común".
Pero apuntó que si no hay más cambios en Cuba, "es evidente que el siglo XXI continuará, lamentablemente, dejando a los cubanos rezagados".
"Esperamos por el día -y esperamos que llegue pronto- en que el Gobierno de Cuba adopte una agenda amplia de reformas políticas, que permita a su pueblo determinar libremente su futuro", expresó.
El jefe de la diplomacia estadounidense recordó que a pesar de las medidas restrictivas, "centenares de miles de estadounidenses" visitan anualmente la capital cubana y "centenares de millones de dólares en comercio y transferencias" fluyen de Estados Unidos a Cuba.
"Estamos comprometidos con ese intercambio humano", sostuvo. "La libertad de expresión y la democracia no son una meta, son una travesía interminable", concluyó el alto diplomático, en relación a Cuba.
Kerry sobre América Latina
Estados Unidos decidió dejar atrás la Doctrina Monroe para dar paso a una era en que todos los países del hemisferio cooperan como iguales para mejorar la calidad de vida de sus habitantes, dijo el lunes el secretario de Estado, John Kerry.Al pronunciar su primer discurso dedicado específicamente a América Latina desde que ocupó el cargo en febrero, Kerry hizo hincapié en la necesidad de que el hemisferio se aboque a resolver los peligros que implica el calentamiento global. Además dijo que si bien son positivos los cambios ocurridos en Cuba al reducir restricciones para que los cubanos viajen y trabajen por su cuenta, "La Habana necesita hacer aún más".
Kerry mencionó la debilidad de las instituciones democráticas en Venezuela durante su alocución pronunciada en la sede de la OEA, pero la misión venezolana ante el organismo multilateral no asistió al evento. "Durante nuestra historia, varios presidentes han reforzado" la Doctrina Monroe, dijo Kerry, en alusión al postulado del presidente James Monroe que rigió la política exterior estadounidense hacia el hemisferio, según el cual Washington necesitaba actuar de manera unilateral en el hemisferio.
"Hoy hemos seleccionado una opción diferente. La era de la Doctrina Monroe se terminó", agregó. "La relación que vemos y la que nos esforzamos en mejorar no es una declaración estadounidense, sino se trata de todos los países viéndose como iguales, compartiendo responsabilidades y cooperando en seguridad".
El anuncio de Kerry coincide en líneas generales con el presentado por el presidente Barack Obama en la Conferencia de las Américas en Trinidad y Tobago en 2009, donde planteó la necesidad de cooperar de igual a igual.
Halagó a Colombia y Guatemala por sus logros en el combate al crimen organizado y dedicó un párrafo al tema que ha acaparado la atención en la palestra continental durante los últimos meses: las protestas presentadas por algunos gobernantes latinoamericanos debido al espionaje de las agencias estadounidenses. "Nuestros valores democráticos comunes nos han permitido enfrentar retos como las preocupaciones comprensibles sobre las filtraciones sobre espionaje, preocupaciones que nos llevan a pensar cómo avanzaremos y construiremos bases más fuertes para el futuro", indicó.
Kerry también se refirió a la importancia que para la región tendrá la celebración en Honduras de elecciones seguras y transparentes el próximo fin de semana.
Al referirse a Cuba, dijo que se buscan soluciones creativas al intercambiar con la isla, como sucedió hace una semana (refiriéndose al encuentro del presidente Barack Obama con Berta Soler y Guillermo Fariñas). Los viajes de cientos de ciudadanos norteamericanos a Cuba, es un ejemplo de cómo se puede intercambiar de otra manera. "Nuestros ciudadanos son nuestros mejores embajadores", afirmó el Secretario de Estado.
En cuanto a los "cambios" que están ocurriendo en la isla, como son los permisos gubernamentales para que más ciudadanos cubanos viajen fuera del país, Kerry apuntó que es preciso "no cegarse" con tales modificaciones para seguir vigilando las conductas de los gobiernos autoritarios.
Los cubanos no pueden expresar libremente su voz, dijo en su discurso, y agregó que espera que llegue pronto el día en que puedan hacerlo, como lo hacen el conjunto de los ciudadanos en la región. "Los derechos de los cubanos están contemplados en la Carta Interamericana de Derechos Humanos y hay que hacerlos valer", y esos valores son desafiados todos los días.
Kerry señaló que desde su llegada a la Casa Blanca, el presidente Obama ha buscado "un nuevo comienzo" en las relaciones con Cuba, y reconoció que "nuestros gobiernos encuentran algo de cooperación en temas de interés común".
Pero apuntó que si no hay más cambios en Cuba, "es evidente que el siglo XXI continuará, lamentablemente, dejando a los cubanos rezagados".
"Esperamos por el día -y esperamos que llegue pronto- en que el Gobierno de Cuba adopte una agenda amplia de reformas políticas, que permita a su pueblo determinar libremente su futuro", expresó.
El jefe de la diplomacia estadounidense recordó que a pesar de las medidas restrictivas, "centenares de miles de estadounidenses" visitan anualmente la capital cubana y "centenares de millones de dólares en comercio y transferencias" fluyen de Estados Unidos a Cuba.
"Estamos comprometidos con ese intercambio humano", sostuvo. "La libertad de expresión y la democracia no son una meta, son una travesía interminable", concluyó el alto diplomático, en relación a Cuba.