El Banco Nacional de Comercio Exterior de México (Bancomext) señaló el martes que cuando ese país condonó en noviembre a La Habana un 70 % de su deuda: unos 500 millones de dólares, no estaba regalando ni un solo peso a Cuba.
Según Notimex, Enrique de la Madrid Cordero, director general de Bancomext, aseveró que "lo que sí es que borramos la capitalización por intereses moratorios".
Agregó que "sí dimos una quita de intereses que se fueron generando por atrasos pero de dinero que nunca dimos. Eso es lo que borramos y eso es lo que es una quita de 70 por ciento, pero nosotros vamos a terminar al cabo de 15 años teniendo un retorno de nuestro capital de entre 1.0 y 2.0 por ciento en dólares".
El secretario de Hacienda de México, Luis Videgaray, había declarado sobre el particular que "queremos tener una relación cercana, no solo de amistad entre nuestros pueblos, sino económica (…) y esta situación era un obstáculo para que fluyeran bien las cosas".
La condonación de la deuda supuso un mensaje claro de la voluntad del nuevo gobierno mexicano de dar carpetazo a las desavenencias que hubo entre ambos países desde finales de los noventa, según elpais.com.
En entrevista con el diario español, el miembro del Centro de Investigación y Docencia Económica de México, Rafael Rojas, manifestó que el Gobierno mexicano ha visto en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en La Habana, una oportunidad apropiada para acercarse al gobernante Raúl Castro bajo pretexto de la causa común de un ‘latinoamericanismo’ emergente.
El País recuerda que México es el tercer socio comercial de Cuba en Latinoamérica y el Caribe, pero su mejor relación económica es con Estados Unidos. Por eso, Ricardo Pascoe, quien fuera nombrado embajador de México en la isla en 2000 por el entonces presidente Vicente Fox (dejó el cargo en 2002 cuando un ómnibus con cubanos que buscaban asilo político chocó contra la Embajada de México, en La Habana), declaró que el presidente mexicano Enrique Peña Nieto se encuentra en una encrucijada.
"Cuando un presidente mexicano va a Cuba hay indudablemente una exigencia de Washington de que en su discurso debe hacer un planteamiento sobre derechos humanos y reunirse con los disidentes", indicó.
Según el periódico, "Pascoe presume que tal vez la condonación de parte de la deuda haya predispuesto a Cuba a asumir sin acritud un posible discurso prodemocrático o una foto con los opositores".
La Cancillería de México anunció este martes que Peña Nieto se entrevistará con Raúl Castro durante la cumbre de la CELAC, entre el 28 y el 30 de enero, con el propósito de “relanzar” sus relaciones bilaterales.
Según Notimex, Enrique de la Madrid Cordero, director general de Bancomext, aseveró que "lo que sí es que borramos la capitalización por intereses moratorios".
Agregó que "sí dimos una quita de intereses que se fueron generando por atrasos pero de dinero que nunca dimos. Eso es lo que borramos y eso es lo que es una quita de 70 por ciento, pero nosotros vamos a terminar al cabo de 15 años teniendo un retorno de nuestro capital de entre 1.0 y 2.0 por ciento en dólares".
El secretario de Hacienda de México, Luis Videgaray, había declarado sobre el particular que "queremos tener una relación cercana, no solo de amistad entre nuestros pueblos, sino económica (…) y esta situación era un obstáculo para que fluyeran bien las cosas".
La condonación de la deuda supuso un mensaje claro de la voluntad del nuevo gobierno mexicano de dar carpetazo a las desavenencias que hubo entre ambos países desde finales de los noventa, según elpais.com.
En entrevista con el diario español, el miembro del Centro de Investigación y Docencia Económica de México, Rafael Rojas, manifestó que el Gobierno mexicano ha visto en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en La Habana, una oportunidad apropiada para acercarse al gobernante Raúl Castro bajo pretexto de la causa común de un ‘latinoamericanismo’ emergente.
El País recuerda que México es el tercer socio comercial de Cuba en Latinoamérica y el Caribe, pero su mejor relación económica es con Estados Unidos. Por eso, Ricardo Pascoe, quien fuera nombrado embajador de México en la isla en 2000 por el entonces presidente Vicente Fox (dejó el cargo en 2002 cuando un ómnibus con cubanos que buscaban asilo político chocó contra la Embajada de México, en La Habana), declaró que el presidente mexicano Enrique Peña Nieto se encuentra en una encrucijada.
"Cuando un presidente mexicano va a Cuba hay indudablemente una exigencia de Washington de que en su discurso debe hacer un planteamiento sobre derechos humanos y reunirse con los disidentes", indicó.
Según el periódico, "Pascoe presume que tal vez la condonación de parte de la deuda haya predispuesto a Cuba a asumir sin acritud un posible discurso prodemocrático o una foto con los opositores".
La Cancillería de México anunció este martes que Peña Nieto se entrevistará con Raúl Castro durante la cumbre de la CELAC, entre el 28 y el 30 de enero, con el propósito de “relanzar” sus relaciones bilaterales.