En el estadio de la Universidad de Miami (BankUnited) se ofició este domingo la misa solemne por el día de la Virgen de la Caridad, Patrona de Cuba, a la que asistieron más de 7 mil personas, según los organizadores. Radio Martí, desde antes de las 7 de la noche trasmitió en vivo la misa.
Presidió la homilía el Arzobispo de Miami, Thomas Wenski, quien antes de comenzar la misa dijo a Radio Martí que estaba contento por ser un día muy grande para el pueblo de Cuba. Manifestó que en esa ceremonia se siente la unidad del pueblo cubano “aquí con el pueblo de Cuba, con los que viven en la Isla. La iglesia cubano sigue siendo un, al igual que el pueblo, a pesar de las diferencias políticas”. Wenski dijo que “la Virgen es un faro de esperanza para el pueblo cubano” y recalcó que la presencia de miles de personas en el BankUnited, es una muestra de que “el pueblo cubano no ha perdido su identidad, pues la Virgen de la Caridad es parte de la cubanía”.
La homilía fue oficiada por Monseñor Fernando Isern, Obispo Emérito de Pueblo, en el estado de Colorado. Tras permanecer al frente de la diócesis desde el 2009, regresó a Miami el pasado mes de junio, tras renunciar por enfermedad el pasado mes de junio. Ahora es párroco en la Iglesia de San Kieran, en la Arquidiócesis de Miami.
Comenzó sus palabras Monseñor Isern afirmando que era un honor estar oficiando la misa tras cuatro años de ausencia de Miami. Recordó su viaje a Cuba durante la visita a la isla del Papa Benedicto XVI y el fervor vivido en Cuba durante el recorrido de la imagen de la Virgen, por los 400 años de su hallazgo. En 1961 la imagen de la Virgen hizo su entrada solemne en el estadio Boby Maduro, y esa es la misma imagen que hoy se venera en la Ermita, dijo Isern y afirmó que la virgen mambisa invita a ser libres, y no atarnos a nada ni a nadie.
Los cubanos saben llevar la cruz, insistió el prelado, y han aprendido, recordó, pues muchos dejaron atrás los recuerdos familiares, la tierra donde había recibido sepultara sus abuelos, por lo que el cubano conoce bien la cruz, y de ella hay que aprender hacer el bien, con el ardor de la fe.
También recordó orar por el pueblo de Siria. La Virgen ha dado muchos regalos, aseguró el religioso, pues “de Nipe al Cobre y en Miami deja el regalo de la Ermita, construida por un pueblo generoso”. Antes de terminar su homilía, Monseñor Isern, recordó el esfuerzo de Monseñor Agustín Román., quien levantó la Ermita de la Caridad.
El rector de la Ermita de la Caridad Padre Juan Rumin agradeció la presencia de los miles de feligreses, a los que apoyaron en la organización del evento, a Radio Martí y Radio Paz, a la Universidad de Miami, a los miembros de la archicofradía, al coro y artistas que estuvieron en las vísperas de la Virgen en la Ermita.
Antes de finalizar la misa, el Arzobispo de Miami se dirigió a los presente, dijo que así lo hacía Monseñor Román y anuncio el relanzamiento del periódico La Voz Católica. Recordó el pedido del Papa Francisco a los jóvenes durante la Jornada Mundial de la Juventud que hagan “líos” en sus parroquias, y que participen en la vida de la sociedad en todos los ámbitos, que la transformen para bien, por lo que repitió el pedido de hacer “líos” y embrollos para decir la verdad, barrullos para expandir la palabra de Dios. Desorden para no callare las injusticias. Líos para transformar para bien las vidas de las personas, dijo Wenski. También pidió rezar por la paz en el Medio Oriente y en Siria, como pidió el Papa.
Wenski recordó los 40 años de la dedicación de la Ermita de la Caridad. La guerra es siempre una derrota para la humanidad, citó al Papa Juan Pablo II y recordó que María es Reina de la Paz, Patrona de Cuba, y que ella interceda por nosotros para hacer “líos”.
Como parte de los homenajes a los 25 años de fundado del Movimiento Cristiano Liberación (MCL) en La Habana, Cuba, por Oswaldo Payá Sardiñas, dos de los hijos del fallecido líder, que ahora residen en Miami, tomaron parte en la misa. Rosa María Payá hizo la primera lectura de la Misa, del Libro de la Sabiduría 9, 13-18. Y una de las intenciones de la misa fue leída por uno de los hijos de Oswaldo Payá quien dijo que “anhela una Cuba libre y soberana” y pidió por los que han dado sus vidas y esfuerzos por la libertad y la justicia, y “deseando una Patria con paz, bajo el manto de la Virgen de la Cariad” y pidió orar por ella.
Presidió la homilía el Arzobispo de Miami, Thomas Wenski, quien antes de comenzar la misa dijo a Radio Martí que estaba contento por ser un día muy grande para el pueblo de Cuba. Manifestó que en esa ceremonia se siente la unidad del pueblo cubano “aquí con el pueblo de Cuba, con los que viven en la Isla. La iglesia cubano sigue siendo un, al igual que el pueblo, a pesar de las diferencias políticas”. Wenski dijo que “la Virgen es un faro de esperanza para el pueblo cubano” y recalcó que la presencia de miles de personas en el BankUnited, es una muestra de que “el pueblo cubano no ha perdido su identidad, pues la Virgen de la Caridad es parte de la cubanía”.
La homilía fue oficiada por Monseñor Fernando Isern, Obispo Emérito de Pueblo, en el estado de Colorado. Tras permanecer al frente de la diócesis desde el 2009, regresó a Miami el pasado mes de junio, tras renunciar por enfermedad el pasado mes de junio. Ahora es párroco en la Iglesia de San Kieran, en la Arquidiócesis de Miami.
Comenzó sus palabras Monseñor Isern afirmando que era un honor estar oficiando la misa tras cuatro años de ausencia de Miami. Recordó su viaje a Cuba durante la visita a la isla del Papa Benedicto XVI y el fervor vivido en Cuba durante el recorrido de la imagen de la Virgen, por los 400 años de su hallazgo. En 1961 la imagen de la Virgen hizo su entrada solemne en el estadio Boby Maduro, y esa es la misma imagen que hoy se venera en la Ermita, dijo Isern y afirmó que la virgen mambisa invita a ser libres, y no atarnos a nada ni a nadie.
Los cubanos saben llevar la cruz, insistió el prelado, y han aprendido, recordó, pues muchos dejaron atrás los recuerdos familiares, la tierra donde había recibido sepultara sus abuelos, por lo que el cubano conoce bien la cruz, y de ella hay que aprender hacer el bien, con el ardor de la fe.
También recordó orar por el pueblo de Siria. La Virgen ha dado muchos regalos, aseguró el religioso, pues “de Nipe al Cobre y en Miami deja el regalo de la Ermita, construida por un pueblo generoso”. Antes de terminar su homilía, Monseñor Isern, recordó el esfuerzo de Monseñor Agustín Román., quien levantó la Ermita de la Caridad.
El rector de la Ermita de la Caridad Padre Juan Rumin agradeció la presencia de los miles de feligreses, a los que apoyaron en la organización del evento, a Radio Martí y Radio Paz, a la Universidad de Miami, a los miembros de la archicofradía, al coro y artistas que estuvieron en las vísperas de la Virgen en la Ermita.
Antes de finalizar la misa, el Arzobispo de Miami se dirigió a los presente, dijo que así lo hacía Monseñor Román y anuncio el relanzamiento del periódico La Voz Católica. Recordó el pedido del Papa Francisco a los jóvenes durante la Jornada Mundial de la Juventud que hagan “líos” en sus parroquias, y que participen en la vida de la sociedad en todos los ámbitos, que la transformen para bien, por lo que repitió el pedido de hacer “líos” y embrollos para decir la verdad, barrullos para expandir la palabra de Dios. Desorden para no callare las injusticias. Líos para transformar para bien las vidas de las personas, dijo Wenski. También pidió rezar por la paz en el Medio Oriente y en Siria, como pidió el Papa.
Wenski recordó los 40 años de la dedicación de la Ermita de la Caridad. La guerra es siempre una derrota para la humanidad, citó al Papa Juan Pablo II y recordó que María es Reina de la Paz, Patrona de Cuba, y que ella interceda por nosotros para hacer “líos”.
Como parte de los homenajes a los 25 años de fundado del Movimiento Cristiano Liberación (MCL) en La Habana, Cuba, por Oswaldo Payá Sardiñas, dos de los hijos del fallecido líder, que ahora residen en Miami, tomaron parte en la misa. Rosa María Payá hizo la primera lectura de la Misa, del Libro de la Sabiduría 9, 13-18. Y una de las intenciones de la misa fue leída por uno de los hijos de Oswaldo Payá quien dijo que “anhela una Cuba libre y soberana” y pidió por los que han dado sus vidas y esfuerzos por la libertad y la justicia, y “deseando una Patria con paz, bajo el manto de la Virgen de la Cariad” y pidió orar por ella.