Un amante de las motos, Christopher P. Baker, organizó la primera vuelta que da a la isla un grupo de estadounidenses sobre dos ruedas y dice haberla pasado como nunca gracias a la rica experiencia educacional propiciada por la excursión.
Baker publica un comentario promocional sobre el viaje en la página web de las guías de viaje Moon, en el que destaca que el operador turístico MotoDiscovery, radicado en Texas, es el único autorizado oficialmente para llevar a cabo este tipo de recorridos para estadounidenses.
El guía de viajes se ufana de haber creado con el dueño de MotoDiscovery una excursión única en su tipo que recibió licencia del Departamento del Tesoro de EE.UU. para organizar “itinerarios diarios que resulten en una significativa interacción”, bajo la política de contactos pueblo-pueblo.
Durante la vuelta en moto de 14 días, según relata Baker, el grupo de estadounidense tuvo un encuentro en Vado del Yeso con una enfermera y una médica en una clínica rural, para “aprender sobre el sistema comunitario de salud de Cuba”.
Luego en Sancti Spiritus intercambiaron con el dos veces campeón nacional de motocross Yuneisky Martin, quien les explicó cómo el estado “patrocina” los deportes en la isla, y en Camagüey, recibieron una charla de cómo los dueños de motos Harley Davidson las conservan en Cuba a pesar de “dificultades difícilmente imaginables”.
Baker ya había recorrido personalmente Cuba tres meses sobre una moto BMW en 1996, un viaje del que publicó un libro: “Mi Moto Fidel: Motorcycling Through Castro´s Cuba (Motociclismo por la Cuba de Castro).
Baker publica un comentario promocional sobre el viaje en la página web de las guías de viaje Moon, en el que destaca que el operador turístico MotoDiscovery, radicado en Texas, es el único autorizado oficialmente para llevar a cabo este tipo de recorridos para estadounidenses.
El guía de viajes se ufana de haber creado con el dueño de MotoDiscovery una excursión única en su tipo que recibió licencia del Departamento del Tesoro de EE.UU. para organizar “itinerarios diarios que resulten en una significativa interacción”, bajo la política de contactos pueblo-pueblo.
Durante la vuelta en moto de 14 días, según relata Baker, el grupo de estadounidense tuvo un encuentro en Vado del Yeso con una enfermera y una médica en una clínica rural, para “aprender sobre el sistema comunitario de salud de Cuba”.
Luego en Sancti Spiritus intercambiaron con el dos veces campeón nacional de motocross Yuneisky Martin, quien les explicó cómo el estado “patrocina” los deportes en la isla, y en Camagüey, recibieron una charla de cómo los dueños de motos Harley Davidson las conservan en Cuba a pesar de “dificultades difícilmente imaginables”.
Baker ya había recorrido personalmente Cuba tres meses sobre una moto BMW en 1996, un viaje del que publicó un libro: “Mi Moto Fidel: Motorcycling Through Castro´s Cuba (Motociclismo por la Cuba de Castro).