El Grupo de Trabajo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para la Crisis de Migrantes y Refugiados Venezolanos en la Región advierte en un informe que, de reabrirse las fronteras y profundizarse la crisis en Venezuela, el éxodo venezolano pudiera alcanzar a siete millones de personas en el primer trimestre de 2022, convirtiéndolo en la más grande del mundo.
El Grupo de Trabajo ha reunido más de 600 testimonios de migrantes y refugiados venezolanos quienes expresan que han tenido que escapar de su país esencialmente por cinco razones: la emergencia humanitaria, la violación sistemática a los derechos humanos, la inseguridad, el colapso de los servicios básicos y el alto costo de vida.
El Coordinador del Grupo de Trabajo de la OEA para la Crisis de Migrantes y Refugiados Venezolanos en la Región, David Smolansky, dijo en un comunicado que los datos que están publicando en el informe “son una actualización de la crisis de migrantes y refugiados venezolanos, que al día de hoy con más de 5,6 millones de migrantes y refugiados venezolanos es la crisis de desterrados más grande en la historia de la región”.
El informe señala que la cantidad de migrantes y refugiados venezolanos supera el total de población de países como Costa Rica, Panamá, Noruega o Irlanda. El informe también destaca que hay migrantes y refugiados venezolanos, conocidos como “caminantes”, que han recorrido más de 3.500 kilómetros a pie, muchas veces descalzos.
El reporte sostiene que, pese a que las fronteras están cerradas debido a la pandemia del COVID-19, “se estima que entre 700 y 900 venezolanos huyen diariamente de su país por caminos irregulares en las fronteras”.
Asimismo, el informe destaca que, a pesar de la reciente Conferencia Internacional en solidaridad con los migrantes y refugiados venezolanos, donde hubo importante donaciones, “el financiamiento a esta crisis es la décima parte de lo que se ha aportado para atender a la crisis de refugiados siria”.