El renombrado disidente cubano Guillermo Fariñas dijo tener información de las FAR de que en Cuba se está gestando una nueva traición al pueblo porque oficiales de las fuerzas armadas están siendo adoctrinados y preparados para un nuevo tipo de gobierno como el instituido por Vladimir Putin en Rusia.
Fariñas, de visita en Puerto Rico como parte de una gira a título de portavoz de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), señaló que se trata de un modelo de gobierno en el que “los mismos que están en el poder van a continuar en el poder”.
En declaraciones al diario puertorriqueño El Nuevo Día, el disidente indicó que el objetivo del gobierno de la isla es “que sus propios enemigos históricos lo mantengan”, o sea, “lograr el levantamiento del embargo económico financiero y comercial de EE.UU. Y en segundo lugar, lograr que la Unión Europea” lo financie mediante créditos e inversiones.
“No puedo aceptar que el embargo sea levantado si no ha logrado su objetivo—dijo—. El embargo es una medida que afecta al Gobierno cubano, incluyéndome a mí, pero a veces es mejor pasar hambre y tener dignidad que tener comida y ser indigno”.
Respecto a la nueva política de viajes al extranjero de Raúl Castro opinó que la intención es “engañar a la opinión pública internacional de que está cambiando algo en Cuba cuando en realidad nosotros podemos salir. Pero las golpizas siguen, los encarcelamientos siguen, las amenazas siguen contra todos los que levantan la voz de una manera u otra”.
Además de apuntar que no quieren reconocer a la oposición, precisó que es “un gobierno cruel, que asesina a sus propios opositores pacíficos dentro de las prisiones”, y añadió que aunque el sistema capitalista no es perfecto, “sin duda es el mejor que hay dentro de todos los sistemas que han existido”.
Fariñas dijo que como disidente ha recibido de los exiliados cubanos “apoyo, admiración, respeto, orgullo de que existamos dentro de Cuba personas que estemos dando la batalla y le estemos dando la cara al castrismo”.
Apuntó que su viaje es pagado por dos exiliados millonarios cubanos, Mario Luis del Valle y Eduardo Pérez Bengochea. “No recibo fondos de mi país—añadió—, pero para mí es un orgullo que dos personas que han podido tener prosperidad en la vida y son anticastristas financien este viaje”.
El opositor ve dos escenarios posibles en el futuro de la isla: “que seamos capaces de convertirnos en una masa crítica que al gobierno le sea imposible reprimir y nos podamos sentar con ese gobierno a sentar las bases de la democracia o que haya un estallido social donde el Gobierno cubano reprima brutalmente su propio pueblo y va a sufrir las consecuencias de la comunidad internacional”.
Fariñas, de visita en Puerto Rico como parte de una gira a título de portavoz de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), señaló que se trata de un modelo de gobierno en el que “los mismos que están en el poder van a continuar en el poder”.
En declaraciones al diario puertorriqueño El Nuevo Día, el disidente indicó que el objetivo del gobierno de la isla es “que sus propios enemigos históricos lo mantengan”, o sea, “lograr el levantamiento del embargo económico financiero y comercial de EE.UU. Y en segundo lugar, lograr que la Unión Europea” lo financie mediante créditos e inversiones.
“No puedo aceptar que el embargo sea levantado si no ha logrado su objetivo—dijo—. El embargo es una medida que afecta al Gobierno cubano, incluyéndome a mí, pero a veces es mejor pasar hambre y tener dignidad que tener comida y ser indigno”.
Respecto a la nueva política de viajes al extranjero de Raúl Castro opinó que la intención es “engañar a la opinión pública internacional de que está cambiando algo en Cuba cuando en realidad nosotros podemos salir. Pero las golpizas siguen, los encarcelamientos siguen, las amenazas siguen contra todos los que levantan la voz de una manera u otra”.
Además de apuntar que no quieren reconocer a la oposición, precisó que es “un gobierno cruel, que asesina a sus propios opositores pacíficos dentro de las prisiones”, y añadió que aunque el sistema capitalista no es perfecto, “sin duda es el mejor que hay dentro de todos los sistemas que han existido”.
Fariñas dijo que como disidente ha recibido de los exiliados cubanos “apoyo, admiración, respeto, orgullo de que existamos dentro de Cuba personas que estemos dando la batalla y le estemos dando la cara al castrismo”.
Apuntó que su viaje es pagado por dos exiliados millonarios cubanos, Mario Luis del Valle y Eduardo Pérez Bengochea. “No recibo fondos de mi país—añadió—, pero para mí es un orgullo que dos personas que han podido tener prosperidad en la vida y son anticastristas financien este viaje”.
El opositor ve dos escenarios posibles en el futuro de la isla: “que seamos capaces de convertirnos en una masa crítica que al gobierno le sea imposible reprimir y nos podamos sentar con ese gobierno a sentar las bases de la democracia o que haya un estallido social donde el Gobierno cubano reprima brutalmente su propio pueblo y va a sufrir las consecuencias de la comunidad internacional”.