El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, inicia este jueves una nueva visita a Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en la que presentará el borrador de un acuerdo marco para las negociaciones de paz, indicó la agencia Efe.
Kerry tiene previsto llegar al aeropuerto de Tel Aviv a primera hora de la tarde y se entrevistará en Jerusalén con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, informó su oficina.
La primera reunión con el presidente palestino, Mahmud Abás, está prevista para mañana, aunque se esperan más encuentros con ambos mandatarios a lo largo de todo el fin de semana.
"El secretario de Estado trae consigo un borrador primario del acuerdo marco para seguir las negociaciones", afirma el diario Yediot Aharonot.
En ese documento se incluyen todos los asuntos en disputa entre israelíes y palestinos: delimitación de fronteras, mecanismos de seguridad, la división de Jerusalén y el futuro de los refugiados, entre otros asuntos.
El objetivo, según el diario, es convencer a las dos partes de seguir negociando más allá de los nueve meses previstos, un plazo que debe concluir en abril.
"La mayoría de los líderes palestinos (...) se oponen a extender las conversaciones debido a que en los últimos meses no ha habido ningún logro", dijo una fuente palestina al diario Haaretz.
Al quejarse de la "masiva construcción en los asentamientos estos últimos meses y la demolición de casas", la fuente señala que el liderazgo palestino "urge a Abás a dirigirse a las Naciones Unidas" y otros organismos internacionales para concretar las aspiraciones nacionales.
EEUU quiere convencer a las partes de que acepten el documento como "hoja de ruta" en las negociaciones y, aunque no exigirá a Netanyahu y Abás que lo firmen, incluirá todas las cuestiones a negociar y, también, las reservas de cada uno en cada asunto en particular.
En líneas generales, el documento habla de las fronteras de 1967 con retoques territoriales, de la división de Jerusalén como capital de los dos pueblos, de que los palestinos reconozcan a Israel como "Estado judío", que Israel no se vea inundada de refugiados palestinos y de una declaración que ponga fin a las reclamaciones y al conflicto, según la descripción del Yediot Aharonot.
Kerry tiene previsto llegar al aeropuerto de Tel Aviv a primera hora de la tarde y se entrevistará en Jerusalén con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, informó su oficina.
La primera reunión con el presidente palestino, Mahmud Abás, está prevista para mañana, aunque se esperan más encuentros con ambos mandatarios a lo largo de todo el fin de semana.
"El secretario de Estado trae consigo un borrador primario del acuerdo marco para seguir las negociaciones", afirma el diario Yediot Aharonot.
En ese documento se incluyen todos los asuntos en disputa entre israelíes y palestinos: delimitación de fronteras, mecanismos de seguridad, la división de Jerusalén y el futuro de los refugiados, entre otros asuntos.
El objetivo, según el diario, es convencer a las dos partes de seguir negociando más allá de los nueve meses previstos, un plazo que debe concluir en abril.
"La mayoría de los líderes palestinos (...) se oponen a extender las conversaciones debido a que en los últimos meses no ha habido ningún logro", dijo una fuente palestina al diario Haaretz.
Al quejarse de la "masiva construcción en los asentamientos estos últimos meses y la demolición de casas", la fuente señala que el liderazgo palestino "urge a Abás a dirigirse a las Naciones Unidas" y otros organismos internacionales para concretar las aspiraciones nacionales.
EEUU quiere convencer a las partes de que acepten el documento como "hoja de ruta" en las negociaciones y, aunque no exigirá a Netanyahu y Abás que lo firmen, incluirá todas las cuestiones a negociar y, también, las reservas de cada uno en cada asunto en particular.
En líneas generales, el documento habla de las fronteras de 1967 con retoques territoriales, de la división de Jerusalén como capital de los dos pueblos, de que los palestinos reconozcan a Israel como "Estado judío", que Israel no se vea inundada de refugiados palestinos y de una declaración que ponga fin a las reclamaciones y al conflicto, según la descripción del Yediot Aharonot.