El gobierno venezolano implementará un sistema de racionamiento parecido al que los cubanos han padecido desde hace 50 años, a través de una tarjeta electrónica que les permitirá comprar en una red de establecimientos estatales, anunció este sábado el presidente Nicolás Maduro.
"Es un sistema con una tarjeta bancaria electrónica para garantizarle a ustedes la satisfacción de todas las necesidades de las familias que trabajan, que permita acabar con los especuladores y bachaqueros", dijo el mandatario desde la Plaza Bolívar de Caracas.
"Vamos a sacar ofertas especiales de abastecimiento con precios especiales para el pueblo en materia de alimentos, línea blanca (...) La especulación se va a acabar con la Ley de Precios Justos y con el nuevo sistema digitalizado de abastecimiento seguro", agregó.
Con el sistema digitalizado de abastecimiento se controlará el consumo de los participantes en la llamada Misión Alimentación.
Sin embargo, en junio del 2013 el propio Nicolás Maduro ordenó poner fin a una medida tomada por el oficialista gobernador del estado de Zulia que controlaba la venta de productos básicos en la frontera colombo-venezolana a través de una tarjeta de racionamiento, asegurando que se trataba de una locura.
"Es una locura a quien se le haya ocurrido la idea de poner un chip de consumo. Esa no es la solución del gobierno socialista y revolucionario que hemos ofrecido. Ese no es el pensamiento económico nuestro (...). Si alguien lo está aplicando que lo deje de aplicar inmediatamente", dijo el presidente en un acto oficial.
Para el primer mandatario, la solución "a todos nuestros problemas es producir más, trabajar más, el crecimiento de la economía, que el sistema de distribución sea funcional, que haya equilibrio entre lo que se produce y lo que se importa, lo que se consume", agregó en aquella ocasión.
En Cuba el gobierno instauró un férreo sistema de racionamiento desde 1963 con el que cada núcleo familiar posee una libreta de abasteciemiento que limita el consumo de cada integrante de la familia, con dietas excepcionales, aunque muy limitadas, para niños y enfermos.
El sábado miles de opositores venezolanos realizaron la marcha de las "Ollas vacías" en el norte de la capital, haciendo un ruido ensordecedor de cacerolas y cornetas, y enarbolando pancartas en las que se leía "No hay, no hay ¿Hasta cuándo?".
Los manifestantes protestaron así contra la inflación galopante, que alcanzó a inicios de año una tasa anualizada de 56,3%, y los problemas graves de abastecimiento de algunos alimentos y bienes básicos que se han agudizado en los últimos meses debido a la entrega retardada de las divisas por parte del gobierno, lo que ha afectado el ingreso de importaciones al país.
El índice de escasez, que mide la disponibilidad de productos en los comercios, saltó en enero pasado a 28%, uno de los niveles más altos desde el 2009 cuando el Banco Central de Venezuela comenzó a difundirse el indicador.
"Es un sistema con una tarjeta bancaria electrónica para garantizarle a ustedes la satisfacción de todas las necesidades de las familias que trabajan, que permita acabar con los especuladores y bachaqueros", dijo el mandatario desde la Plaza Bolívar de Caracas.
"Vamos a sacar ofertas especiales de abastecimiento con precios especiales para el pueblo en materia de alimentos, línea blanca (...) La especulación se va a acabar con la Ley de Precios Justos y con el nuevo sistema digitalizado de abastecimiento seguro", agregó.
Con el sistema digitalizado de abastecimiento se controlará el consumo de los participantes en la llamada Misión Alimentación.
Sin embargo, en junio del 2013 el propio Nicolás Maduro ordenó poner fin a una medida tomada por el oficialista gobernador del estado de Zulia que controlaba la venta de productos básicos en la frontera colombo-venezolana a través de una tarjeta de racionamiento, asegurando que se trataba de una locura.
"Es una locura a quien se le haya ocurrido la idea de poner un chip de consumo. Esa no es la solución del gobierno socialista y revolucionario que hemos ofrecido. Ese no es el pensamiento económico nuestro (...). Si alguien lo está aplicando que lo deje de aplicar inmediatamente", dijo el presidente en un acto oficial.
Para el primer mandatario, la solución "a todos nuestros problemas es producir más, trabajar más, el crecimiento de la economía, que el sistema de distribución sea funcional, que haya equilibrio entre lo que se produce y lo que se importa, lo que se consume", agregó en aquella ocasión.
En Cuba el gobierno instauró un férreo sistema de racionamiento desde 1963 con el que cada núcleo familiar posee una libreta de abasteciemiento que limita el consumo de cada integrante de la familia, con dietas excepcionales, aunque muy limitadas, para niños y enfermos.
El sábado miles de opositores venezolanos realizaron la marcha de las "Ollas vacías" en el norte de la capital, haciendo un ruido ensordecedor de cacerolas y cornetas, y enarbolando pancartas en las que se leía "No hay, no hay ¿Hasta cuándo?".
Los manifestantes protestaron así contra la inflación galopante, que alcanzó a inicios de año una tasa anualizada de 56,3%, y los problemas graves de abastecimiento de algunos alimentos y bienes básicos que se han agudizado en los últimos meses debido a la entrega retardada de las divisas por parte del gobierno, lo que ha afectado el ingreso de importaciones al país.
El índice de escasez, que mide la disponibilidad de productos en los comercios, saltó en enero pasado a 28%, uno de los niveles más altos desde el 2009 cuando el Banco Central de Venezuela comenzó a difundirse el indicador.
