Enlaces de accesibilidad

Las críticas a El Gabo desde Colombia y Aracataca


Un policía vigila la casa donde nació el escritor colombiano, Gabriel García Márquez, en Aracataca (Colombia).
Un policía vigila la casa donde nació el escritor colombiano, Gabriel García Márquez, en Aracataca (Colombia).

"El no debió morir en México, debió morir aquí en su pueblo natal... ¿Cómo lo explicó? Prefirió la fama y dejarnos abandonados", dijo Mariby Zapata.

Esta empobrecida localidad lanzada a la fama internacional por ser la cuna del Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, fallecido la víspera en Ciudad de México, mantuvo el Viernes Santo su rutina normal sin grandes actos en memoria del que ha sido descrito como el colombiano más importante de todos los tiempos.

García Márquez, de 87 años, murió en su residencia en México, donde estaba radicado desde hace años, lejos de su país natal y de su propia localidad de nacimiento, Aracataca, en el departamento de Magdalena y a unos 670 kilómetros al norte de Bogotá, debido a diferencias políticas y a su propio trabajo.

Sus posturas políticas, incluida su estrecha amistad con el expresidente de Cuba Fidel Castro, o algunas críticas por no donar algunas de sus premios para obras en Aracataca, un poblado de unos 45.000 habitantes que sigue sin tener servicio de agua potable permanente, aún levantan molestias.

Pero como personaje público, controversial y el más reconocido del país, García Márquez logró con su fallecimiento poner de acuerdo al menos por una vez a dos archienemigos: las guerrillas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), que lamentaron al unísono la muerte del escritor, ganador del Nobel de Literatura en 1982.

Plinio Apuleyo Mendoza, uno de los amigos de Gabo y también escritor, explicó a The Associated Press esa aparente indiferencia: el escritor visitó muy poco el pueblo, la última vez hace siete años. "La gente se siente un poco distante de él", dijo Mendoza. García Márquez salió de Aracataca a los ocho años, según narró el propio Nobel en sus memorias "Vivir para contarla".

Hasta ahora se desconoce cuándo y dónde será sepultado el autor de "Cien años de soledad", un tema en el que los cataqueños o el gentilicio de los nacidos en Aracataca sí tienen posturas claras: debería regresar.

"El no debió morir en México, debió morir aquí en su pueblo natal... ¿Cómo lo explicó? Prefirió la fama y dejarnos abandonados", dijo Mariby Zapata, una odontóloga de 31 años.

La localidad carece de agua potable de forma permanente porque distintos proyectos por renovar un viejo acueducto se han retrasado. Actualmente, el 70% de las 38 barriadas ya recibe el líquido y se espera que en seis meses se completen los trabajos, indicó el alcalde de Aracataca, Tufith Hatum.

Para Robinson Leyva, un maestro de 49 años, los problemas del poblado no eran responsabilidad del escritor: "ha habido negligencia de los mandatarios de turno que no gestionaron las influencias del Gabo".

La cercanía de García Márquez con dirigentes de izquierda como Castro aún generan molestia. La recién elegida senadora María Fernanda Cabal, del movimiento Centro Democrático, del expresidente Uribe, envió varios mensajes en la red social, entre ellos uno diciendo: "Mansión de GABO contigua a la del Príncipe satanico Fidel". Los mensajes fueron borrados luego de una avalancha de críticas.

El escritor, al que sobreviven su esposa Mercedes Barcha y sus dos hijos Rodrigo y Gonzalo, contó entre sus amigos a mandatarios y exmandatarios en al menos tres continentes. Colombia, su país natal, no podía ser la excepción, aunque el escritor tuvo sus altos y bajos en esa relación cercana con los poderosos a través de las décadas.

Quizá el capítulo más recordado fue cuando marchó a su exilio desde Colombia a México durante el gobierno del presidente Julio César Turbay (1978-1982) y que el mismo laureado con el Nobel de Literatura en 1982 describió en un artículo que publicó en esa ocasión en el diario El País, de Madrid.

Explicó que salió del país porque amigos le avisaron y hasta algunos funcionarios dijeron públicamente que lo interrogarían en el ejército por supuestos vínculos con la ahora pacificada guerrilla Movimiento 19 de Abril (M-19).
XS
SM
MD
LG