Sí, hay una ley dictada al respecto y un trámite jurídico amparado en esa ley que implica los 5 años de prohibición.
Existe un cuerpo legal que obliga a los técnicos y profesionales de la salud a depender del Ministerio de Salud Pública para poder viajar al exterior como personas privadas.Se trata de la cuestionada y polémica Resolución número 54 de 1999, del Ministerio de Salud pública.
Esta norma legal interna, con aplicación obligatoria para el Ministerio de Salud Pública, establece la obligatoriedad de todos los técnicos y profesionales de la salud de solicitar su liberación profesional para realizar cualquier tipo de viaje o cualquier intento de reubicación laboral fuera de su área profesional. Quiere decir que para viajar como ciudadanos comunes los técnicos y profesionales de la salud tendrán que haber sido autorizados o liberados por la máxima dirección del Ministerio de Salud Pública.
A partir de octubre de 1999, los técnicos y profesionales de la salud que soliciten su permiso de salida o tarjeta blanca, como requisito indispensable deberán presentar ante las oficinas de inmigración el documento de liberación del Ministro de Salud.
Esta resolución no hace referencia al tiempo que demora el gobierno en otorgar la liberación a los profesionales que intentan viajar al exterior. Tampoco establece límites mínimos o máximos para qué el Ministro de Salud responda a las solicitudes de liberación.
Pero la práctica demuestra que una vez solicitada la liberación oficial, el profesional o técnico de la salud debe esperar un promedio de 5 años para que su solicitud sea aceptada. Estos cinco años comienzan a contar desde el momento en que el técnico o profesional deja de trabajar en su especialidad. Por lo que serán cinco años separados de la profesión para la que se encuentra calificado.
Se trata de un ardid legal que permite al Ministerio de Salud tomarse todo el tiempo que quiera para contestar un trámite al que se encuentran obligados todos los técnicos y profesionales de la salud.
Existe un cuerpo legal que obliga a los técnicos y profesionales de la salud a depender del Ministerio de Salud Pública para poder viajar al exterior como personas privadas.Se trata de la cuestionada y polémica Resolución número 54 de 1999, del Ministerio de Salud pública.
Esta norma legal interna, con aplicación obligatoria para el Ministerio de Salud Pública, establece la obligatoriedad de todos los técnicos y profesionales de la salud de solicitar su liberación profesional para realizar cualquier tipo de viaje o cualquier intento de reubicación laboral fuera de su área profesional. Quiere decir que para viajar como ciudadanos comunes los técnicos y profesionales de la salud tendrán que haber sido autorizados o liberados por la máxima dirección del Ministerio de Salud Pública.
A partir de octubre de 1999, los técnicos y profesionales de la salud que soliciten su permiso de salida o tarjeta blanca, como requisito indispensable deberán presentar ante las oficinas de inmigración el documento de liberación del Ministro de Salud.
Esta resolución no hace referencia al tiempo que demora el gobierno en otorgar la liberación a los profesionales que intentan viajar al exterior. Tampoco establece límites mínimos o máximos para qué el Ministro de Salud responda a las solicitudes de liberación.
Pero la práctica demuestra que una vez solicitada la liberación oficial, el profesional o técnico de la salud debe esperar un promedio de 5 años para que su solicitud sea aceptada. Estos cinco años comienzan a contar desde el momento en que el técnico o profesional deja de trabajar en su especialidad. Por lo que serán cinco años separados de la profesión para la que se encuentra calificado.
Se trata de un ardid legal que permite al Ministerio de Salud tomarse todo el tiempo que quiera para contestar un trámite al que se encuentran obligados todos los técnicos y profesionales de la salud.