¿Puede un cliente contratar al abogado que le guste y pagarle directamente por sus servicios?
Puedes contratar al abogado que mejor te plazca, inclusive lo puedes contratar en cualquier lugar del territorio nacional cubano.
No necesitas dirigirte al bufete colectivo de tu zona de residencia, lo puedes contratar directamente en el bufete donde trabaje el abogado que te guste o te convenza.
Siempre te recomendamos que no sea demasiado lejos del tribunal o la corte donde vas a dirimir tu caso, porque los problemas de transporte conspirarán contra la asistencia de tu abogado.
En cuanto al pago, la ley prohíbe la retribución directa a los abogados, ellos no le pueden cobrar ni aceptar pagos a los clientes.
La estructura administrativa creada establece que la oficina donde laboran los abogados es la encargada de cobrar una tarifa fija y preconcebida, de la que el abogado cobrará una mínima porción cuando se le pague su sueldo a fin de mes.
Los abogados cubanos además de ser los más perseguidos son los peores pagados dentro de su profesión.
La relación no profesional entre cliente y abogado está prohibida por la organización nacional de bufetes colectivos, pero es una relación que siempre surge y que no pueden evitar los controles estatales.
El pago en agradecimiento al letrado por parte del cliente es inevitable también, pero es bueno que siempre se tenga claro que se trata de un pago informal y que no debe trascender públicamente.
En muchos casos, estos regalos son disimulados como gastos de transporte o de viáticos para que el abogado garantice su presencia en los diferentes sitios a donde debe asistir.
Nunca el cliente participa en la negociación del contrato del abogado, ya que solo acepta un contrato general preconcebido, y nunca paga directamente al abogado por sus servicios.
Todo lo demás es un arreglo entre el abogado y el cliente.
Puedes contratar al abogado que mejor te plazca, inclusive lo puedes contratar en cualquier lugar del territorio nacional cubano.
No necesitas dirigirte al bufete colectivo de tu zona de residencia, lo puedes contratar directamente en el bufete donde trabaje el abogado que te guste o te convenza.
Siempre te recomendamos que no sea demasiado lejos del tribunal o la corte donde vas a dirimir tu caso, porque los problemas de transporte conspirarán contra la asistencia de tu abogado.
En cuanto al pago, la ley prohíbe la retribución directa a los abogados, ellos no le pueden cobrar ni aceptar pagos a los clientes.
La estructura administrativa creada establece que la oficina donde laboran los abogados es la encargada de cobrar una tarifa fija y preconcebida, de la que el abogado cobrará una mínima porción cuando se le pague su sueldo a fin de mes.
Los abogados cubanos además de ser los más perseguidos son los peores pagados dentro de su profesión.
La relación no profesional entre cliente y abogado está prohibida por la organización nacional de bufetes colectivos, pero es una relación que siempre surge y que no pueden evitar los controles estatales.
El pago en agradecimiento al letrado por parte del cliente es inevitable también, pero es bueno que siempre se tenga claro que se trata de un pago informal y que no debe trascender públicamente.
En muchos casos, estos regalos son disimulados como gastos de transporte o de viáticos para que el abogado garantice su presencia en los diferentes sitios a donde debe asistir.
Nunca el cliente participa en la negociación del contrato del abogado, ya que solo acepta un contrato general preconcebido, y nunca paga directamente al abogado por sus servicios.
Todo lo demás es un arreglo entre el abogado y el cliente.