La popular presidenta de un club de fútbol de Laos, que renunció a su trabajo con lágrimas la semana pasada después de haber sido acusada de difamar al país, fue convocada por la policía el viernes para celebrar conversaciones destinadas a aclarar las restricciones sobre lo que puede publicar en su página de Facebook, dijeron fuentes de Laos.
Phijika Boonkwang, presidenta del club Vientiane Football United, había criticado la condición de una carretera local en un video de Facebook en vivo el 25 de agosto, y después de enterarse de que había sido expulsada del deporte durante 90 días, renunció a su puesto en otro video de Facebook cuatro días después.
El 5 de septiembre, la Federación Nacional de Fútbol de Laos envió una carta a las autoridades policiales en la que pedía que se investigara a Phijika, que, según dijeron, estaba "enfadada" por las medidas adoptadas contra ella, por "seguir realizando actividades inapropiadas" en los medios de comunicación social.
La policía entonces le envió una carta, ordenándole que se presentara a las discusiones en su departamento el 11 de septiembre.
Sollozando en un nuevo video el 7 de septiembre en su página de Facebook, Phijika dijo que ahora teme que la metan en la cárcel.
Hablando con el Servicio Laosiano de Radio Asia Libre (RFA) el pasado viernes, el teniente coronel Xayaphone Duangvilay calificó la citación de "nada serio", añadiendo: "Sólo queremos asegurarnos de que[Phijika] entiende nuestras reglas sobre lo que se puede o no se puede publicar en los medios sociales en este país".
"Sólo tiene que venir a la comisaría para que podamos hablar y aclarar algunos malentendidos."
"Inapropiado
También hablando con RFA, un fanático del fútbol laosiano llamó a la Federación y a la acción policial "inapropiada". "Hay mejores maneras de lidiar con esto", dijo el hombre, hablando a condición de que se mantenga en el anonimato. "La Federación debería hablar con ella y advertirle que no salga en Facebook en vivo para decir cosas como esta otra vez."
"Esto es muy amenazador. La policía no debería estar involucrada", añadió un abogado de la capital, quien también habló con RFA a condición de que no se le nombrara.
"Deberían mostrarle más compasión, y deberían escuchar sus comentarios y mejorar las condiciones del camino. La forma en que la policía está manejando esto es demasiado negativa", dijo.
Laos, un estado comunista monopartidista, es muy sensible a las críticas públicas a las condiciones del país, y ha tratado con dureza los casos de lo que considera declaraciones que dañan la reputación del país en el pasado.
Tres jóvenes trabajadores migrantes lao que regresaron de Tailandia a Laos en marzo de 2016 para renovar sus pasaportes fueron acusados de criticar al gobierno lao en línea mientras trabajaban en el extranjero, y posteriormente fueron condenados a penas de prisión de entre 12 y 20 años en un juicio secreto celebrado en abril de 2017.
