El comunicador Misael Aguilar Hernández explica lo que ocurre en un establecimiento comercial de la localidad de Quivicán.
"Las necesidades económicas por las que atraviesan los cubanos actualmente los han llevado a los más insólitos inventos comerciales, para poder ganar algún dinero para el sustento de la familia".
"La Hayaca, ubicada en Quivicán, provincia de Mayabeque es un comercio que atrae a gran cantidad de personas de diferentes lugares, que acuden allí con el fin de adquirir diferentes productos tales como: cabezas de cerdo ahumadas, morcilla, gallinas –por cierto muy flacas– que compran para luego trasladar hacia la capital y revenderlos".
"No obstante, hay un obstáculo en el momento de trasladar la mercancía, y es que tienen que enfrentar al punto de control policial, que se encuentra en la carretera donde revisan los carros de transporte de pasajeros, y cuando encuentran que alguien lleva productos en cantidades sospechosas, se los decomisan allí mismo".
"No todos logran sobrevivir la travesía. Algunos han creado sus mecanismos para evitar este impedimento y mantienen relaciones con las patrullas de camino".
"Hayaca es el modo en que se le suele llamar a los tamales en algunos lugares del oriente del país", precisa el autor.