La Convención Republicana entra en su segundo día con el ímpetu recibido en las intervenciones de este martes, que cerró con los discursos de la señora Ann Romney, esposa del candidato presidencial Mitt Romney, y del gobernador de Nueva Jersey Chris Christie, a quien correspondió pronunciar lo que se conoce aquí como el “discurso de la nota clave”, que establece la línea sobre la que gira la convención.
Ann Romney tenía la misión de presentar la cara humana del candidato y para ello dijo que hablaría del amor y de la vida. Aunque aseguró que su discurso no trataría de cuestiones políticas y, efectivamente, no habló de las cuestiones concretas que preocupan al pueblo norteamericano y dominan el debate político, como el desempleo, el seguro médico o el déficit público, llevó un mensaje tan importante como la capacidad de su marido para enfrentarse a los desafíos que se le presenten: “No puedo decirles lo que ocurrirá en los próximos cuatro años”, aseguró, “pero sí puedo prometerles solemnemente desde aquí, como esposa, madre y abuela, como ciudadana norteamericana, que este hombre no fracasará, no nos abandonará y levantará a Estados Unidos”.
Al acabar el primer día de la convención, el Partido Republicano tenía ya oficialmente candidato presidencial, pues todos los estados emitieron son voto, que dio una amplia mayoría a Mitt Romney, aunque también reflejó la campaña primaria, pues hubo votos también por los otros candidatos.
Además se aprobó e hizo pública su plataforma, es decir, el programa de gobierno que quisiera aplicar si gana su candidato, en el cual trata principalmente de cuestiones económicas y fiscales, para consolidar las finanzas del país, pero también dedica un apartado a las relaciones internacionales, en que quiere, por una parte, aumentar la capacidad de las fuerzas para la defensa nacional y reforzar las vías diplomáticas para mantener el lugar que corresponde a Estados Unidos en el mundo.
Algunos de los participantes en este primer día eran figuras relativamente nuevas, que permiten imaginar quienes serán los futuros líderes del partido. Se trata, por ejemplo, de la gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, o del candidato al senado por Texas, Alex Cruz, o del senador de la Florida Marco Rubio, todos ellos de origen extranjero, pues Haley es hija de inmigrantes de la India, y tanto Cruz como Rubio tienen sus raíces en Cuba.
El segundo día de la convención se centra en el candidato a la vicepresidencia, Paul Ryan, quien acepta el nombramiento, pero también hablan otras figuras del partido, como la ex canciller Condoleezza Rice, quien ya en la mañana criticó la administración del presidente Obama por lo que considera una gestión indecisa que no está a la altura de las responsabilidades internacionales del país. Rice, junto con Ryan, habla en la hora de máxima audiencia, cuando todo el país puede seguir en directo sus palabras en las pantallas de televisión.
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Rubio y Cruz: líderes cubanoamericanos presentes en la política de EEUU