El mandatario colombiano subrayó, en un comunicado posterior a la entrevista con el candidato opositor venezolano, su agradecimiento por la colaboración de Caracas en materia de seguridad y como facilitador en el diálogo con las FARC.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, reiteró al candidato presidencial de la oposición venezolana, Henrique Capriles, “la neutralidad” de su país ante las elecciones en Venezuela el próximo 7 de octubre.
La Casa de Nariño se limitó a publicar una foto y un comunicado sobre el encuentro que sostuvieron el miércoles Santos y Capriles en el despacho presidencial. Este último es descrito en el texto colombiano como “candidato a la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela”.
La nota de la oficina del más diplomático de los presidentes de Colombia desde Andrés Pastrana manifestó la necesidad de seguir trabajando “en forma armónica” para estrechar las relaciones entre su país y Venezuela.
En ese sentido, el comunicado enfatizó algunos de los frutos de la política de distensión de Santos hacia el gobierno de Hugo Chávez. Mencionó entre ellos la cooperación en materia de seguridad que ha permitido, entre otras capturas, la del narcotraficante colombiano conocido como el “Loco” Barrera el martes pasado, en la localidad fronteriza venezolana de San Cristóbal.
También resaltó la nota de la Casa de Nariño que Santos le explicó a Capriles los avances que se vienen dando en los diálogos para poner fin al conflicto armado en Colombia, destacando “el permanente apoyo y el papel de facilitador que desarrolla el Gobierno de Venezuela”.
Horas antes de la entrevista, que fue solicitada por el equipo de Capriles, fuentes de la Presidencia colombiana subrayaron a la agencia EFE que la reunión tenía un carácter “estrictamente privado”.
El gobierno de Venezuela reaccionó al encuentro por boca del vicepresidente Elías Jaua, quien destacó que a su Gobierno solo le quedaba "respetarlo" ya que, según él, es una decisión “natural” y "soberana" del mandatario colombiano recibir a cualquier dirigente político del mundo.
Antes de viajar a Bogotá, el abanderado de la opositora Mesa de la Unidad Democrática reveló que tenía previsto conversar con el primer mandatario vecino sobre la necesidad de fortalecer las relaciones, el tema fronterizo y la reactivación del comercio binacional.
Capriles indicó además que aprovecharía su visita para manifestar al presidente neogranadino su respaldo al diálogo de paz que ha iniciado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, uno de los grupos armados irregulares más antiguos del continente
Las FARC han sido un punto controversial en las relaciones entre los dos países, debido a la ubicación de hasta 1.500 de sus efectivos en territorio venezolano por parte de la inteligencia colombiana, incluidos varios de sus jefes.
En el comunicado de la presidencia de Colombia se indica que Santos “hizo votos para que el pueblo venezolano acuda en forma masiva y pacífica a las urnas en la jornada electoral del próximo 7 de octubre”, cuando cerca de 19 millones de venezolanos podrían votar y elegir presidente para el periodo 2013-2019.
El diario El Tiempo de Bogotá señaló que el anuncio de la reunión “desató en seguida todo tipo de análisis sobre la importancia que da el presidente Santos a conocer de cerca los factores más importantes de la política venezolana”, sobre los cuales esperaba hablar con el candidato presidencial del país vecino.
Santos restableció en 2010 las relaciones que su predecesor, Álvaro Uribe, había roto con el gobierno de Hugo Chávez, y ha conseguido un incremento de las relaciones comerciales y la colaboración bilateral. El mandatario colombiano ha lllegado a decir en broma que su similar venezolano, es su "nuevo mejor amigo".
Chávez había asegurado en 2010 que el entonces ministro de Defensa de Colombia era "un peligro para la paz del continente", y prometió no reanudar las relaciones si Santos resultaba electo presidente.
La Casa de Nariño se limitó a publicar una foto y un comunicado sobre el encuentro que sostuvieron el miércoles Santos y Capriles en el despacho presidencial. Este último es descrito en el texto colombiano como “candidato a la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela”.
La nota de la oficina del más diplomático de los presidentes de Colombia desde Andrés Pastrana manifestó la necesidad de seguir trabajando “en forma armónica” para estrechar las relaciones entre su país y Venezuela.
En ese sentido, el comunicado enfatizó algunos de los frutos de la política de distensión de Santos hacia el gobierno de Hugo Chávez. Mencionó entre ellos la cooperación en materia de seguridad que ha permitido, entre otras capturas, la del narcotraficante colombiano conocido como el “Loco” Barrera el martes pasado, en la localidad fronteriza venezolana de San Cristóbal.
También resaltó la nota de la Casa de Nariño que Santos le explicó a Capriles los avances que se vienen dando en los diálogos para poner fin al conflicto armado en Colombia, destacando “el permanente apoyo y el papel de facilitador que desarrolla el Gobierno de Venezuela”.
Horas antes de la entrevista, que fue solicitada por el equipo de Capriles, fuentes de la Presidencia colombiana subrayaron a la agencia EFE que la reunión tenía un carácter “estrictamente privado”.
El gobierno de Venezuela reaccionó al encuentro por boca del vicepresidente Elías Jaua, quien destacó que a su Gobierno solo le quedaba "respetarlo" ya que, según él, es una decisión “natural” y "soberana" del mandatario colombiano recibir a cualquier dirigente político del mundo.
Antes de viajar a Bogotá, el abanderado de la opositora Mesa de la Unidad Democrática reveló que tenía previsto conversar con el primer mandatario vecino sobre la necesidad de fortalecer las relaciones, el tema fronterizo y la reactivación del comercio binacional.
Capriles indicó además que aprovecharía su visita para manifestar al presidente neogranadino su respaldo al diálogo de paz que ha iniciado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, uno de los grupos armados irregulares más antiguos del continente
Las FARC han sido un punto controversial en las relaciones entre los dos países, debido a la ubicación de hasta 1.500 de sus efectivos en territorio venezolano por parte de la inteligencia colombiana, incluidos varios de sus jefes.
En el comunicado de la presidencia de Colombia se indica que Santos “hizo votos para que el pueblo venezolano acuda en forma masiva y pacífica a las urnas en la jornada electoral del próximo 7 de octubre”, cuando cerca de 19 millones de venezolanos podrían votar y elegir presidente para el periodo 2013-2019.
El diario El Tiempo de Bogotá señaló que el anuncio de la reunión “desató en seguida todo tipo de análisis sobre la importancia que da el presidente Santos a conocer de cerca los factores más importantes de la política venezolana”, sobre los cuales esperaba hablar con el candidato presidencial del país vecino.
Santos restableció en 2010 las relaciones que su predecesor, Álvaro Uribe, había roto con el gobierno de Hugo Chávez, y ha conseguido un incremento de las relaciones comerciales y la colaboración bilateral. El mandatario colombiano ha lllegado a decir en broma que su similar venezolano, es su "nuevo mejor amigo".
Chávez había asegurado en 2010 que el entonces ministro de Defensa de Colombia era "un peligro para la paz del continente", y prometió no reanudar las relaciones si Santos resultaba electo presidente.