“Espero que podamos realizar las consultas en octubre próximo. No serán las negociaciones todavía, sino un intento de reanudar el diálogo interrumpido hace diez años”, dijo el viceministro ruso de Finanzas Serguéi Storchak.
El viceministro de Finanzas de Rusia, Serguéi Storchak, declaró hoy que el próximo mes de octubre comenzarán las consultas sobre el pago de la deuda de 25, 000 millones de dólares que Moscú reclama a La Habana, como herencia del desaparecido estado soviético.
“Espero que podamos realizar las consultas en octubre próximo. No serán las negociaciones todavía, sino un intento de reanudar el diálogo interrumpido hace diez años”, dijo Storchak reunido con los periodistas rusos en México, donde se desarrolló una reunión de los viceministros de Finanzas y los presidentes de los bancos centrales de los países del G-20.
El viceministro ruso precisó que la orden para realizar las consultas fue recibida del presidente del gobierno de Rusia, Vladimir Putin, teniendo en cuenta que la situación financiera se ha normalizado en ambos países en comparación con el año 2002, cuando fue interrumpido el diálogo sobre la deuda cubana.
La agencia rusa Ria Novosti, dijo que Storchak, quien encabezará la delegación rusa en las consultas, se negó a definir la postura que la parte rusa mantendrá en las futuras negociaciones. Explicó que el vicepresidente del Consejo de Ministros de Cuba, Ricardo Cabrisas, actuará como jefe de la delegación cubana.
Storchak ha sido el negociador ruso por excelencia en cuestiones relacionadas con la deuda que Rusia heredó de la URSS. Hace apenas una semana informó que Moscú y Pyongyan firmaron un acuerdo mediante el cual Rusia perdonó a Corea del Norte el 90% de su deuda de $11,000 millones de dólares de la era soviética.
Hasta el mismo día de su desaparición en 1991, la extinta Unión Soviética financió durante tres décadas al régimen castrista, que tuvo en la URSS y los países del llamado bloque socialista un mercado preferencial para sus productos de exportación, al tiempo que importaba de ellos el 63 por ciento de sus alimentos, 13 millones de toneladas anuales de petróleo y hasta el 80 por ciento de equipos y productos manufacturados, a precios preferenciales, con pagos a largo plazo y bajas tasas de interés.
A esos beneficios habría que agregar el valor del armamento y maquinaria bélica recibido por Cuba de la Unión Soviética que en 1993, Raúl Castro estimó en unos $10,000 millones de dólares "a precios viejos" .
La deuda cubana con la URSS calculada en varios miles de millones de rublos convertibles, que los rusos consideran equivalentes al dólar estadounidense, ha estado en los últimos 20 años en el centro de un diferendo entre ambos países, sobre su valor real actual.
Las relaciones entre Moscú y La Habana comenzaron a recomponerse con el viaje de Putín a Cuba en 2000, el primero de un presidente ruso desde que Gorbachov visitara la isla en 1989.
A partir de 2005 se incrementaron las visitas recíprocas de funcionarios de alto rango, y se formó una Comisión Mixta de Cooperación entre ambos países, donde más de 70 empresas rusas se han vinculado con sus contrapartes cubanas.
En 2008 el presidente Dimitri Medvédev viajó a La Habana y un año después el gobernante Raúl Castro, visitó por primera vez la Rusia independiente, después de haber visitado la Rusia soviética 23 veces, la última en 1985.
“Espero que podamos realizar las consultas en octubre próximo. No serán las negociaciones todavía, sino un intento de reanudar el diálogo interrumpido hace diez años”, dijo Storchak reunido con los periodistas rusos en México, donde se desarrolló una reunión de los viceministros de Finanzas y los presidentes de los bancos centrales de los países del G-20.
El viceministro ruso precisó que la orden para realizar las consultas fue recibida del presidente del gobierno de Rusia, Vladimir Putin, teniendo en cuenta que la situación financiera se ha normalizado en ambos países en comparación con el año 2002, cuando fue interrumpido el diálogo sobre la deuda cubana.
La agencia rusa Ria Novosti, dijo que Storchak, quien encabezará la delegación rusa en las consultas, se negó a definir la postura que la parte rusa mantendrá en las futuras negociaciones. Explicó que el vicepresidente del Consejo de Ministros de Cuba, Ricardo Cabrisas, actuará como jefe de la delegación cubana.
Storchak ha sido el negociador ruso por excelencia en cuestiones relacionadas con la deuda que Rusia heredó de la URSS. Hace apenas una semana informó que Moscú y Pyongyan firmaron un acuerdo mediante el cual Rusia perdonó a Corea del Norte el 90% de su deuda de $11,000 millones de dólares de la era soviética.
Hasta el mismo día de su desaparición en 1991, la extinta Unión Soviética financió durante tres décadas al régimen castrista, que tuvo en la URSS y los países del llamado bloque socialista un mercado preferencial para sus productos de exportación, al tiempo que importaba de ellos el 63 por ciento de sus alimentos, 13 millones de toneladas anuales de petróleo y hasta el 80 por ciento de equipos y productos manufacturados, a precios preferenciales, con pagos a largo plazo y bajas tasas de interés.
A esos beneficios habría que agregar el valor del armamento y maquinaria bélica recibido por Cuba de la Unión Soviética que en 1993, Raúl Castro estimó en unos $10,000 millones de dólares "a precios viejos" .
La deuda cubana con la URSS calculada en varios miles de millones de rublos convertibles, que los rusos consideran equivalentes al dólar estadounidense, ha estado en los últimos 20 años en el centro de un diferendo entre ambos países, sobre su valor real actual.
Las relaciones entre Moscú y La Habana comenzaron a recomponerse con el viaje de Putín a Cuba en 2000, el primero de un presidente ruso desde que Gorbachov visitara la isla en 1989.
A partir de 2005 se incrementaron las visitas recíprocas de funcionarios de alto rango, y se formó una Comisión Mixta de Cooperación entre ambos países, donde más de 70 empresas rusas se han vinculado con sus contrapartes cubanas.
En 2008 el presidente Dimitri Medvédev viajó a La Habana y un año después el gobernante Raúl Castro, visitó por primera vez la Rusia independiente, después de haber visitado la Rusia soviética 23 veces, la última en 1985.