Gobierno cubano acaba con negocios de venta de ropa

En los últimos dos años, los pequeños negocios privados han sido la principal fuente de empleo de hombres y mujeres, principalmente jóvenes.

Abundan los vendedores de confecciones textiles que son traídas del exterior y tienen una gran aceptación del público.

Detalle de un letrero que anuncia rebajas en una tienda de ropa importada ofertada por comerciantes privados.

Los dueños de estos establecimientos, quienes tienen licencias como modistas o sastres, han abonado sus impuestos mensuales y han hecho las declaraciones juradas de sus ventas, en las que está contemplado el número de empleados contratados.

El primero de septiembre, sin esperar a la puesta en vigor de la resolución 42, los consejos de administración de las provincias de Pinar del Río, Sancti Spíritus y Cienfuegos, prohibieron la venta de ropa importada en todos sus municipios.

La ropa de estas tiendas son más atractivas que las que se encuentran en las Tiendas de Recuperación de Divisas (TRD), propiedad del Estado.

El gobierno cubano argumenta que la prohibición quiere evitar "deformaciones" de determinadas licencias
para ejercer el "cuentapropismo" y aseguran que se explicarán a los afectados los argumentos que han motivado la medida.

La mayoría de estos comerciantes privados están indignados por las pérdidas de empleos que provocará la prohibición, por el dinero que han invertido en su negocio y por las cantidades que ya han desembolsado al Estado en impuestos y en una licencia que ahora no sirve.

Los comerciantes que venden esa mercancía en la isla lo han hecho al amparo de la licencia de "modisto" o "sastre".

La mayor parte de esas prendas llegan a la isla en abultados equipajes de particulares, muchos de ellos cubanos, que la compran en países como México, Panamá, Ecuador o Perú e incluso en naciones
europeas como España o Italia.

La prohibición de vender ropa importada en Cuba ha encendido la polémica y desatado un visible malestar
entre comerciantes privados que desde hace algunos años se dedican a ese negocio y que ahora parecen abocados de nuevo al mercado negro.