Michael Lima, activista de derechos humanos radicado en Canadá, fustigó la postura de una legisladora del parlamento de Ontario que elogió al régimen de La Habana, en ocasión de conmemorarse la llegada al poder de Fidel Castro, el 1 de enero de 1959.
El fundador y director de Espacios Democráticos envió una carta fechada el 10 de enero de 2024 a la parlamentaria Kristyn Wong-Tam, donde expresa preocupación "por el hecho de que un miembro del parlamento provincial de Canadá, de quien se espera que represente la tolerancia, la pluralidad y los valores canadienses en defensa de los derechos humanos y la justicia, considere un honor rendir homenaje a una fecha como el 1 de enero de 1959".
"Esta fecha marcó el ascenso al poder de una dictadura que traicionó los ideales revolucionarios de su generación. En lugar de convocar elecciones libres y restaurar el Estado de Derecho y la Constitución de 1940, instauró un sistema opresivo que, durante 65 años, se ha basado en la criminalización de las ideas, la exclusión y la persecución de los cubanos por sus ideas políticas, su orientación sexual, su religión y su diversidad".
En declaraciones a Martí Noticias, Lima explicó que el 4 de enero la legisladora, que ha representado al Toronto Centre en la Asamblea Legislativa de Ontario desde 2022 como miembro del Nuevo Partido Demócrata de Ontario, participó en un acto organizado por el consulado del régimen cubano para conmemorar la fecha.
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Declaraciones de Michael Lima Cuadra
"Como cubano canadiense, refugiado político y activista de derechos humanos, le mandé una carta a la miembro del parlamento explicándole el significado del 1ro de enero para los cubanos, que no es un día nacional, es un día que conmemora el establecimiento por la fuerza de una dictadura que nunca se sometió a elecciones libres, que ha enviado a decenas de miles de cubanos a campos de concentración por su orientación sexual, su religión, sus ideas políticas, que persigue, que excluye, que criminaliza ideas, que ha expulsado a incontables estudiantes y profesores del sistema universitario", indicó el activista.
El 4 de enero de 2024 en la plataforma de medios sociales X e Instagram, Wong-Tam dijo sentirse "honrada de transmitir saludos de felicitación en nombre de @MaritStiles @OntarioNDP al primer izamiento de la bandera cubana en Queens Park para el Día Nacional de Cuba. Canadá y Cuba han sido amigos y socios comerciales durante décadas y lo seguirán siendo en los años venideros."
Honoured to bring congratulatory greetings on behalf of @MaritStiles + @OntarioNDP to the first ever Cuban flag raising at Queens Park for the National Day of Cuba. Canada & Cuba have been friends and trading partners for decades and will continue to be for years to come. ✌🏼🇨🇺🇨🇦 pic.twitter.com/tRJRoBOuME
— Kristyn Wong-Tam 🇨🇦 (@kristynwongtam) January 4, 2024
"Celebrar el 1 de enero es celebrar a una élite de poder que ha violado sistemáticamente los derechos humanos como política de Estado durante más de seis décadas", destaca Lima en la misiva a la que tuvo acceso Martí Noticias.
"Les animo a que, si de verdad celebran la diversidad, la pluralidad y los valores democráticos que reflejan la esencia de Canadá, reconsideren su alabanza y celebración de una fecha como el 1 de enero de 1959, que marcó el ascenso al poder de un régimen depredador de los derechos humanos que, desde los primeros días en el poder, procedió a perseguir, criminalizar, someter al ostracismo, encarcelar y exiliar por la fuerza a cientos de miles de cubanos de varias generaciones. Si usted se dice ser amiga de Cuba, la insto cordialmente a que sea amiga del pueblo cubano, no de un régimen que nadie eligió en elecciones libres, plurales, multipartidistas y justas. Es hora de que una nación como Canadá, una de las democracias más respetadas del mundo, considere su papel del lado del pueblo de Cuba, denunciando la represión contra aquellos que piensan diferente y no estrechando la mano con un grupo de representantes de una dictadura que respalda actos de repudio, encarcelamiento y la exclusión de cualquiera que piense diferente", concluye el texto del fundador de Democratic Spaces.