Art Basel de Miami Beach con más participación que nunca antes

  • Agencias

"Eva" (2014), figura hecha a base de fibra de vidrio, de la artista multimedia brasileña Ana Luiza Dias Batista.

El Centro de Convenciones de Miami Beach se ha convertido hasta el próximo domingo en algo así como un parque del arte, donde la algarabía domina y destierra del laberinto de pasillos los pasos silenciosos que suelen ser habituales en otras citas.

La persistencia insolente con que Art Basel Miami Beach asume a partir de hoy que es un gran espectáculo de las artes plásticas, sin desvincularlo del carácter festivo y comercial, arrastra a muchedumbres ávidas por zambullirse en las nuevas tendencias contemporáneas.

El Centro de Convenciones de Miami Beach se ha convertido hasta el próximo domingo en algo así como un parque del arte, donde la algarabía domina y destierra del laberinto de pasillos los pasos silenciosos que suelen ser habituales en otras citas.

Art Basel Miami Beach exalta el arte como mejor sabe: en clave festiva, aceptando la realidad de que el gran público quiere que le den una amplia panorámica de la situación actual del arte y que resulte una experiencia casi de ebriedad.

Y esta feria, convertida en el acontecimiento artístico más importante de las Américas cumple con ese objetivo.

En su décimo tercera edición, los organizadores de la muestra esperan que más de 70.000 visitantes, una buena parte turistas, recorran las 267 galerías que integran la exposición o asistan a los numerosos actos paralelos que tienen lugar durante estos cinco días.

El catálogo de la obra expuesta resulta abrumador: Unos 4.000 artistas modernos y contemporáneos tienen trabajos presentes en la feria Art Basel Miami Beach.

El fervor que despierta Art Basel Miami Beach quedó hoy patente al contemplar, en su inauguración, la riada humana que desbordaba las puertas de acceso al recinto ferial, una muestra que este año es "más fuerte que nunca, con la incorporación de más y nuevas galerías de todo el mundo, algunas de Miami, y estrellas emergentes", destacó en una rueda de prensa Marc Spiegler, director de la feria.

Spiegler hizo hincapié en que esta vibrante exhibición, filial de la feria principal que se celebra en Basilea (Suiza), ha desplegado un "programa muy amplio, asombroso, con espacios fascinantes" que la definen como una suerte de meca del "arte mundial inspirador".

Dio la bienvenida a un nuevo sector, "Survey", centrado en proyectos que abarcan nueve propuestas temáticas y nueve muestras de artistas en solitario, con obras de artistas tan destacados como el brasileño Alfredo Volpi, Andrei Monastyrsky o Valie Export, temprano representante este último del movimiento Action Painting.

Un sector en el que tiene una presencia importante la galería Espaivisor, (Valencia, España), con trabajos del artista chileno Lotty Rosenfeld.

Uno de los principales exponentes a nivel mundial del informalismo, el español Antoni Tapies (1923-2012), es sin duda foco importante de atención en la feria, con la muestra de varias de sus obras en las galerías Waddington Custot y Timothy Taylor.

La corriente figurativa actual y el nuevo expresionismo abstracto convive con el arte conceptual, el pop-art del siglo pasado y ciertas propuestas barrocas y manieristas de nuestro siglo, en una feria que asume el papel fundamental de las galerías como catalizadoras de corrientes y puente entre el artista y el público.

La obra de uno de los artista más populares del siglo XX, Andy Warhol, no puede estar ausente de la cita. Su serigrafía con tinta sobre papel "Autorretrato" (1967), con un precio de venta de unos $100.000, es uno de los reclamos más atractivos para los amantes del movimiento pop-art.

La galería Thomas Modern concentra en su reducido espacio obras
muy cotizadas de autores consagrados del siglo XX y XXI: Próximo a
dos Chagall ("Les amoreux au clair de lune" y "Le clown", valoradas
cada una en más de un millón de dólares) comparte pared un Picasso
("Trois Femmes a la Fontaine").

En una esquina, la figura de mujer "Standing Woman with Hands on her Hips" (2013), esculpida en mármol blanco de Carrara por el pintor y escultor colombiano Fernando Botero (Medellín, 1932). El precio del Botero alcanza un precio de $755.000.

La humanista obra del escultor y artista gráfico alemán Joseph Beuys (1921-1986), uno de los creadores más influyentes de la segunda mitad del siglo XX, se haya representada con la pieza "Eurasia", con un precio de $220.000, mientras que el reconocido fotógrafo y escultor estadounidense Jack Pierson (Massachusetts, 1960) exhibe su obra "Meditate".

"Beuys fue piloto de la Lutwaffe (la fuerza aérea alemana) durante la II Guerra Mundial y su avión fue derribado en territorio ruso y hecho prisionero. Esa experiencia marcó su vida y el carácter social de su trabajo", dijo a Efe Michael Radke, propietario de la galería Thomas, quien afirmó que se trata de "uno de los más importantes artistas en Alemania".

"Era un maravilloso dibujante y profesor de arte que quiso abrir el arte a todo el público con increíbles instalaciones, algunas muy caras, pero otras asequibles para muchos coleccionistas de arte", agregó Radke.

Las corrientes y tendencias contemporáneas más significativas se pueden contemplar en Nova, una sección que presenta la obra y piezas nunca antes vistas creadas en los últimos tres años por relevantes artistas de todo el mundo.

Sobresalen en esta sección un buen número de artistas iberoamericanos, entre otros el español Oriol Vilanova, las mexicanas Teresa Margolles y Milena Muzquiz, el peruano Nicolás Lamas, la argentina Adriana Bustos y la brasileña Regina de Miguel.

Otro eje de la feria es la poderosa irrupción de Art Basel Public, que transformará Collins Park (South Beach) en un espacio de exposición al aire libre con más de 26 instalaciones y escultura.