Aunque el brote de la influenza aviar, subtipo H5N1, detectado en el Zoológico de 26, en La Habana, está bajo control y las autoridades cubanas afirmaron que el entorno zoosanitario nacional no está en riesgo, es importante mantener la alerta.
“Es por ahora un caso aislado, detectado gracias a la vigilancia desplegada por la incidencia de esta enfermedad en la región y los riesgos potenciales de que Cuba fuera afectada y de esas medidas que se tomaron para detectar cualquier irregularidad respecto a las aves; se descubrió en aves silvestres, en el zoológico”, indicó el biólogo Osmel Ramírez en conversación con Radio Televisión Martí.
“Es presumible que no sea el único, que sucedan otros eventos similares, porque no hay nada que impida que en otros sitios del país, por la misma razón, se den casos parecidos, en aves silvestres, primeramente, y que luego sea transmitido a aves domésticas”, señaló el experto.
“Cuba es vulnerable a esa enfermedad como cualquier otro país de la región. Es una enfermedad que se está diseminando en los últimos tiempos y hay una alerta sobre eso”, recordó el biólogo.
La Organización Panamericana de la Salud lanzó en febrero una alerta epidemiológica sobre diversos focos de influenza aviar. También confirmó un caso de infección humana causada por influenza aviar en América del Sur.
Los virus H5N1 han sido responsables de la mayoría de los casos de humanos infectados por virus de la influenza aviar hasta la fecha a nivel mundial, lo que incluye las enfermedades más graves y las de mayor mortalidad.
Las infecciones en humanos por influenza aviar se han registrado después de haber tenido contacto sin protección con aves infectadas o superficies contaminadas, sin embargo, se han identificado algunas sin que se revelara contacto directo con aves infectadas o su entorno.
Algunos países han tomado medidas para evitar la enfermedad, como la instalación de alfombras, incineradores y áreas de cuarentena en los aeropuertos y puertos, y la utilización de perros que reconocen cualquier alimento que podría transportar el virus.
Lee también Detectan virus de influenza H5N1 en Cuba y piden a la población no tocar aves muertas o enfermasLa transmisión de la gripe aviar no tiene fronteras, por las propias aves migratorias, principalmente gansos y patos, que cruzan los continentes y océanos.
Los productos avícolas son la proteína más asequible en la Isla, el medio de sustento para la mayoría de las personas. En este sentido, Ramírez considera que sería catastrófico para la economía familiar del cubano que la gripe aviar se extendiera.
“Con todo lo deprimida que está la masa avícola cubana, y que se importa del exterior el pollo y las aves en general, una propagación de la influenza en la pequeña masa avícola convertiría en mucho más desastrosa, y mucho más grave, la crisis alimentaria que vive Cuba, y es como para tener en cuenta, es como para observar. El país no tiene condiciones, ni siquiera para importar huevos o carne de ave que necesita la población para el consumo, y si esto viene a diezmar más la masa avícola, sería un desastre alimentario”, sentenció.
Las autoridades sanitarias cubanas han insistido en que la situación está controlada.
Según el Banco Mundial (BM) una pandemia de gripe aviar que se mantuviera por un año costaría a la economía mundial 800 mil millones de dólares, es decir el 2% del Producto Interno Bruto (PIB) de todo el planeta.