El ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira, quien también fue canciller en el mandato de Dilma Rousseff, dijo que desde entonces mantiene conversaciones en materia de derechos humanos con los gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
El que fuera Representante Permanente de Brasil ante las Naciones Unidas entre 2016 y 2020 aseguró a Infobae que los abusos a los derechos humanos cometidos por los regímenes de Cuba, Nicaragua y Venezuela son un tema "que tiene que ser discutido".
"Con Cuba tenemos relaciones tradicionales, creo que ellos van hacia una situación económica muy compleja pero nosotros incluso estamos trabajando con ellos en relación a la defensa de los derechos humanos; nosotros hablamos con todos ellos sobre estos problemas", afirmó el representante diplomático del gabinete de Luiz Inácio Lula da Silva.
De acuerdo a Infobae, el alto funcionario afirmó que "ha venido hablando con los tres regímenes latinoamericanos sobre el flagelo de los derechos humanos, no sólo desde ahora, sino desde cuando era el ministro de relaciones exteriores de la ex presidenta Dilma Rousseff".
"Especialmente en el caso de Nicaragua nosotros hemos tenido la oportunidad de votar en Ginebra y eso ha dejado en claro nuestra posición, es un tema que nos preocupa", indicó el canciller cuando fue preguntado sobre la represión y expulsión de más de 200 líderes opositores del régimen de Daniel Ortega.
"Nosotros reconocemos eso, es un tema que tiene que ser discutido, nosotros hemos estado hablando con ellos y con otros países, incluso en Ginebra, en el Consejo de derechos humanos, porque nosotros estamos listos y abiertos para discutir cualquier tema que sea necesario", manifestó el jefe de la diplomacia brasileña.
En el caso de Venezuela recordó que había formado parte de las negociaciones entre el chavismo y la oposición en 2015 y anunció que todavía están "haciendo lo mismo".
Además, aseguró que el restablecimiento de las relaciones con Venezuela había sido una prioridad para el actual gobierno de Brasil.
“El presidente Lula, apenas tomó posición en el gobierno me dio instrucciones inmediatamente para reabrir la embajada y los consulados que habían sido clausurados por el gobierno anterior y nosotros queremos seguir conversando (con Venezuela), es un país importante, tenemos una frontera muy grande, tenemos más de 20 mil brasileños viviendo en Venezuela y por supuesto sabemos que tiene enormes reservas de petróleo y gas y es un país muy importante y queremos seguir hablando”, dijo Vieira.
A raíz de la victoria de Lula en las elecciones de 2022, la ONG Human Rights Watch lo exhortó a impulsar una agenda de derechos humanos en todo el mundo, sin importar ideologías y dijo que tendría "muchas oportunidades para una defensa coherente de los derechos humanos, comenzando por la región".