Canciller iraní afirma que Teherán no busca guerra con Estados Unidos

Ali Khamenei, Guía Supremo de Irán y Ursula von der Leyen, Presidenta de la Comisión Europea.

En respuesta a la muerte del general Qasem Soleimani tras un ataque con drones ordenado por el gobierno de Estados Unidos, Irán lanzó misiles en la madrugada del miércoles (hora de Bagdad) contra la base militar de Ain al Asad, en Irak.

La instalación alberga tropas estadounidenses y efectivos de la coalición internacional.

Tras el ataque, el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, escribió en su cuenta de Twitter que su país no buscaba una guerra con Estados Unidos. "Irán procedió y concluyó medidas proporcionadas en defensa propia bajo el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, al atacar la base desde la cual se lanzó un cobarde ataque armado contra nuestros ciudadanos y altos funcionarios".

En ese momento, el diplomático agregó que Teherán "no busca una guerra" pero que "se defenderá frente a cualquier agresión".

El Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas al cual hace referencia el canciller iraní contempla lo siguiente: "Ninguna disposición de esta Carta menoscabará el derecho inmanente de legítima defensa, individual o colectiva, en caso de ataque armado contra un Miembro de las Naciones Unidas, hasta tanto que el Consejo de Seguridad haya tomado las medidas necesarias para mantener la paz y la seguridad internacionales.

Las medidas tomadas por los Miembros en ejercicio del derecho de legítima defensa serán comunicadas inmediatamente al Consejo de Seguridad, y no afectarán en manera alguna la autoridad y responsabilidad del Consejo conforme a la presente Carta para ejercer en cualquier momento la acción que estime necesaria con el fin de mantener o restablecer la paz y la seguridad internacionales".

El presidente de Irán, Hassan Rouhani, escribió en sus redes sociales que su respuesta final por "el asesinato de Soleimani será expulsar a todas las tropas americanas de la región".

Por otra parte, Mohamad Yavad Azari Jahromi, Ministro de Telecomunicaciones de Irán, se unió a su presidente, en el afán de expulsar las tropas americanas y escribió en Twitter "vayánse de aquí".

La respuesta de Estados Unidos

Durante una rueda de prensa en Washington en la mañana del miércoles, el presidente Donald Trump confirmó que durante el ataque no hubo pérdidas humanas.

"Ningún estadounidense resultó herido en el ataque de anoche (martes) del régimen iraní. No sufrimos víctimas. Todos nuestros soldados están seguros y solo hubo daños mínimos en nuestras bases militares."

Del mismo modo, el presidente, anunció nuevas sanciones para Irán e invitó a las potencias mundiales a romper con el acuerdo nuclear para renegociar un nuevo pacto.

¿Antiamericanismo?

Según Eduardo Gamarra, profesor del Departamento de Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Internacional de la Florida (FIU), "por ahora ambos lados han quedado bien internamente".

Gamarra consideró que a pesar de que ambos países han quedado bien, "esto no quiere decir que no vayamos a tener consecuencias adicionales en un contexto que está en llamas y con todo tipo de células activas. El antiamericanismo tan grande que existe se ha exacerbado por lo que ha ocurrido".

Por otra parte, Gamarra opinó que la muerte del general "ocurre en un momento en que Irán está asediado políticamente también. La semana pasada, hubo manifestaciones en contra del régimen".

Según Gamarra, Estados Unidos atraviesa una situación interna delicada, "donde el presidente enfrenta un juicio político". Según su parecer, la respuesta por parte del gobierno iraní solo demuestra que "están defendiendo el intéres nacional, pero tampoco podían generar una respuesta de la envergadura que muchos estaban hablando".

En conclusión, Gamarra subrayó que esta respuesta fue proporcional y sin víctimas, para que de esta manera "Irán aparezca dando una respuesta concreta a los Estados Unidos".