Caso de periodistas de La Hora de Cuba acusados de "desorden público" cierra con multa de 1,000 pesos (VIDEO)

De derecha a izquierda Henry Constantín, Neife Rigau e Iris Mariño, periodistas de La Hora de Cuba

Los periodistas del medio independiente camagüeyano "La Hora de Cuba" Henry Constantín, Neife Rigau e Iris Mariño, fueron multados este lunes con 1,000 pesos cada uno como cierre de sus casos por "desorden público", a raíz de los sucesos del 11 de julio y sus intentos de cubrir las protestas en esta ciudad.

"La sanción fue comunicada a los periodistas por una fiscal —que no accedió a identificarse— y un oficial, Dainier Forester Maceo, en el citatorio con la SE. Esto supone el fin de la medida cautelar de prisión domiciliaria, impuesta a los periodistas tras permanecer diez días en calabozos de Camagüey", informó La Hora de Cuba en Facebook.

En un video transmitido en vivo por Facebook desde las afueras de Villa María Luisa, la sede de Operaciones de la Seguridad del Estado en Camagüey, Constantin dijo que, aunque consideran que la sanción es injusta, de cierta manera están contentos con que el proceso haya culminado.

El periodista y vicepresidente para Cuba de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) agradeció, además, a todos los que los apoyaron y han estado pendientes del caso de ellos tres, y del resto de los arrestados tras estas protestas del 11 y 12 julio en la isla.

Your browser doesn’t support HTML5

Declaraciones de Henry Constantín a Radio Martí

También informó en el video que el opositor Félix Navarro, detenido a raíz de las manifestaciones antigubernamentales, se encuentra en huelga de hambre exigiendo sus derechos.

Mariño, Rigau y Constantín permanecieron presos e incomunicados durante varios días tras el levantamiento popular anticomunista del 11 de julio.

En su momento, la SIP solicitó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que otorgara con urgencia medidas cautelares a favor de los tres periodistas cubanos. Luego de su excarcelación, el 22 de julio, la organización manifestó “satisfacción y alivio”.

“Nunca debieron haber estado presos y menos aún incomunicados”, declaró al respecto Jorge Canahuati, presidente de la SIP, quien, además, exigió que les fueran retirados los cargos.