Centro Cubano de Derechos Humanos visibiliza situación de tres presos políticos con enfermedades mentales

Vista exterior de uno de los destacamentos de la prisión Combinado del Este, en La Habana. (Adalberto Roque/AFP)

El Centro Cubano para los Derechos Humanos (CCDH), publicó este lunes su informe correspondiente al mes de enero, en el que documentó los casos de 740 presos políticos, 607 de ellos por participar en las protestas del 11 de julio de 2021.

“En el informe hemos destacado que la organización World Prison Brief ha dicho que en Cuba está la segunda tasa mayor de población carcelaria en el mundo. Esto es indiscutiblemente significativo”, dijo a Martí Noticias, Martha Beatriz Roque Cabello, asesora del CCDH, con sede en La Habana.

La organización alertó sobre personas que están encarceladas por hechos no vinculados a una condición de disidencia, que, aunque podrían tener una actitud crítica al régimen, no son presos políticos.

“Nosotros hemos tratado de recolectar la mayor cantidad de información posible de cada uno de los presos en diferentes procesos, los que están de pase, los que están en celdas de castigo, algunos hospitalizados y otros a los que se les han negado los beneficios para ello hemos hablado durante el mes con 200 familiares de presos y hemos podido constatar, y así lo hemos plasmado en el informe, que durante este mes que ha pasado, ha habido una cantidad bastante grande de movimientos entre prisiones: presos cambiados de una prisión para otra, algunos de ellos en forma de castigo para que no puedan estar junto a otros presos disidentes dentro de la prisión”, indicó Roque Cabello.

El informe señala que un número no precisado de presos políticos al transitar a régimen de menor rigor han sido internados en centros abiertos, y al menos seis, disfrutaron en enero de los pases que les permiten cortas visitas a sus hogares.

Otros diez prisioneros políticos fueron trasladados de cárceles, aunque la disposición no implicó mayor lejanía de sus hogares.

En enero, de acuerdo al Centro Cubano de Derechos Humanos, las autoridades judiciales otorgaron el tránsito a una fase de menor rigor a Leidiana Prohía Guevara, condenada a 12 años de privación de libertad, pero se le negó a Andy Boza sentenciado a nueve años.

La recopilación resalta tres casos críticos de presos políticos con serias enfermedades mentales y la hospitalización de cuatro por otras dolencias.

“También ha sido un mes en que se ha podido constatar algunos casos de presos hospitalizados, presos que necesitan ser liberados porque las enfermedades que tienen los van a mantener yendo para el hospital a cada rato. Pero como todos sabemos, la dictadura no quiere liberar a ningún preso político”, lamentó la opositora.

El Centro Cubano para los Derechos Humanos mencionó la liberación por cumplimiento de sanción de Yusmely Moreno, manifestante del 11 de julio en Batabanó, Mayabeque.

De acuerdo con las autoridades cubanas no hay presos políticos en Cuba, todos forman parte de una operación de Estados Unidos y grupos de del exilio destinadas a socavar a la revolución.

Tras las protestas del verano de 2021, el gobierno defendió las sanciones a los manifestantes alegando que fueron justas, según lo estipulado en el Código Penal e impuestas por los tribunales y que no constituyeron violaciones a la libertad de expresión.