Se recomendó al Congreso que incremente los requerimientos de información para compañías estatales que quieren cotizar en bolsa en Estados Unidos.
Una comisión especial urgió este miércoles a los legisladores estadounidenses a considerar reglas más estrictas en materia de inversión por parte de firmas chinas de propiedad estatal, y advirtieron que este tipo de emprendimientos podría conllevar riesgos económicos y de seguridad.
En un informe anual al Congreso, la Comisión de Revisión en Economía y Seguridad EEUU-China, también pidió que se hagan esfuerzos para llevar al gigante asiático a conversaciones para que reduzca su arsenal, debido al creciente gasto del país en este ramo.
La inversión china en el exterior se disparó en la última década. La comisión concluyó que la segunda economía mundial probablemente comprará compañías estadounidenses para diversificar sus más de tres billones de dólares en reservas monetarias.
“Mientras la inversión extranjera en EEUU es generalmente vista como algo positivo porque crea empleos (...) podría haber algunas excepciones a la regla general", dijo a periodistas William Reinsch, vicepresidente de la Comisión.
Reinsch indicó que las empresas estatales chinas, que representan la mitad del PIB del país, podrían estarse beneficiando de ventajas injustas, con costos laborales y financieros menores, así como preferencias en contratos domésticos.
La comisión también recomendó al Congreso que incremente los requerimientos de información para compañías estatales que quieren cotizar en bolsa en Estados Unidos. Este informe se conoce un mes después que una investigación del Congreso estadounidense determinara que los gigantes chinos de telecomunicaciones Huawei y ZTE amenazan a Estados Unidos, por lo que deben ser excluidos de contratos y adquisiciones de compañías norteamericanas, ya que sus equipamientos podrían ser utilizados para espionaje.
Preocupaciones sobre seguridad llevaron asimismo al presidente Barack Obama en setiembre a bloquear la construcción de un parque eólico cerca de una base militar en Oregon por parte de una firma privada china. China ha acusado a EEUU de proteccionismo y advirtió que sus esfuerzos para para regular o evitar inversiones podrían mermar el entusiasmo de compañías que desean invertir en la mayor economía del planeta.
En un informe anual al Congreso, la Comisión de Revisión en Economía y Seguridad EEUU-China, también pidió que se hagan esfuerzos para llevar al gigante asiático a conversaciones para que reduzca su arsenal, debido al creciente gasto del país en este ramo.
La inversión china en el exterior se disparó en la última década. La comisión concluyó que la segunda economía mundial probablemente comprará compañías estadounidenses para diversificar sus más de tres billones de dólares en reservas monetarias.
“Mientras la inversión extranjera en EEUU es generalmente vista como algo positivo porque crea empleos (...) podría haber algunas excepciones a la regla general", dijo a periodistas William Reinsch, vicepresidente de la Comisión.
Reinsch indicó que las empresas estatales chinas, que representan la mitad del PIB del país, podrían estarse beneficiando de ventajas injustas, con costos laborales y financieros menores, así como preferencias en contratos domésticos.
La comisión también recomendó al Congreso que incremente los requerimientos de información para compañías estatales que quieren cotizar en bolsa en Estados Unidos. Este informe se conoce un mes después que una investigación del Congreso estadounidense determinara que los gigantes chinos de telecomunicaciones Huawei y ZTE amenazan a Estados Unidos, por lo que deben ser excluidos de contratos y adquisiciones de compañías norteamericanas, ya que sus equipamientos podrían ser utilizados para espionaje.
Preocupaciones sobre seguridad llevaron asimismo al presidente Barack Obama en setiembre a bloquear la construcción de un parque eólico cerca de una base militar en Oregon por parte de una firma privada china. China ha acusado a EEUU de proteccionismo y advirtió que sus esfuerzos para para regular o evitar inversiones podrían mermar el entusiasmo de compañías que desean invertir en la mayor economía del planeta.