Los beisbolistas cubanos que quieren jugar en las ligas mayores de Estados Unidos (MLB, en inglés) "están privados de una relación normal, como la que tienen hoy con esa organización más de 240 atletas de 16 naciones que intervienen en el torneo de élite de Estados Unidos. En otras palabras, eres elegible si renuncias a Cuba", apostilló el diario Granma, órgano oficial del Partido Comunista.
"No se puede ser ingenuo; obligarlos a dejar el béisbol de su nación, que igual que en Estados Unidos, es pasión, identidad nacional, cultura, donde son ídolos, líderes de opinión, admirados por niños, jóvenes, y adultos, tiene el miserable objetivo de convertirnos a los héroes en traidores y para ello se destinan sumas millonarias. Cualquier parecido con la guerra no convencional no es pura coincidencia", dijo Granma.
El artículo del partido gobernante (único) reconoció que todos los jugadores cubanos que se fueron del país para jugar en Estados Unidos han tenido "excelentes resultados".
El zurdo cubano Aroldis Chapman, 104 ponches en 53 entradas.
“Hoy por esa vía son más de diez los peloteros cubanos que actúan en la MLB con excelentes resultados, como el cienfueguero José Dariel Abreu, con 36 jonrones, 107 impulsadas y 317 de average, además de ser el primero en slugging, con 581; su coterráneo Yasiel Puig (297 a la ofensiva) o los 104 ponches del holguinero Aroldis Chapman en 53 entradas, con 35 salvados, que solo vienen a ratificar la calidad del béisbol en la Mayor de las Antillas y la enseñanza que aquí recibieron”.
Aunque las hazañas de los cubanos en las Grandes Ligas son seguidas por numerosos aficionados en la isla, los medios oficiales no dan cobertura regular ni escrita, ni radial, ni televisada, a los juegos de la MLB, y si programan algún partido, verifican que no esté participando ningún cubano.
El periódico del Partido Comunista reconoció sin embargo que los millones de dólares que ganan los jugadores en las Grandes Ligas en EEUU "generan un desarrollo acelerado, sustentan un espectáculo de altísima calidad, convirtiendo en máquinas perfectas la geografía humana de los atletas, llevándolos a insospechadas realizaciones".
Para Granma, las leyes del embargo que aplica Washington al gobierno de Cuba hace más de medio siglo no permiten que los equipos de Estados Unidos contraten "de manera normal" a los jugadores cubanos, quienes desde hace unos meses pueden lograr un permiso para jugar en ligas extranjeras.
Este año entraron en vigencia nuevas regulaciones que incluyeron autorización a los peloteros para jugar, durante la temporada muerta del béisbol cubano, en ligas profesionales de otros países. Varios están jugando en la liga japonesa, pero los contratos y la calidad de juego son mucho más modestos que en la MLB, de modo que el éxodo de los atletas hacia Estados Unidos continúa creciendo.