Canadá, sin conclusiones sobre qué afectó salud de sus diplomáticos en Cuba

Banderas de Cuba y Canadá.

Al menos cinco canadienses y 24 estadounidenses destacados en las delegaciones diplomáticas de sus países en La Habana sufrieron el año pasado problemas de salud, desde dolores de cabeza a pérdida auditiva, problemas de visión y pérdida de memoria.

Las autoridades de Canadá ofrecieron hoy la primera información oficial sobre los problemas de salud que afectaron a sus diplomáticos en La Habana.

Un total de 27 canadienses destinados en Cuba han sido examinados después de que varios de ellos sufriesen diferentes dolencias sin explicación.

De estos 27 individuos, entre personal diplomático y sus familias, ocho necesitaron atención por síntomas como mareos, dolores de cabeza y hemorragias nasales.

Las familias de tres diplomáticos destacados en La Habana han regresado a Canadá, dos de ellos tras sufrir síntomas. Sin embargo, los niveles de personal diplomático canadiense en la capital no han cambiado.

Las autoridades también confirmaron que la Policía Montada de Canadá está a cargo de la investigación, y que hasta el momento se desconoce la causa de estos inusuales problemas de salud.

Canadá no ha llegado a ninguna conclusión sobre lo que ha causado síntomas de salud inusuales a parte de su personal y familias en la embajada de ese país en Cuba, dijo el miércoles un funcionario del gobierno canadiense.

La información llega un día después que una audiencia en el Senado en Washington abordó temas relacionados con incidentes similares ocurridos a 24 diplomáticos estadounidenses en la isla, un hecho que incrementó el distanciamiento reciente entre La Habana y Washington.

El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo el martes que los investigadores están analizando una serie de teorías para explicar qué pudo haber enfermado a sus diplomáticos y familiares basados en La Habana.

Aunque las autoridades estadounidenses han investigado desde hace meses las posibles causas de estos incidentes, que han sido atribuidos por algunos medios a algún tipo de aparato sonoro, Washington no ha podido determinar ni el origen ni el causante de los problemas de salud de su personal.

(Reporte de Reuters y EFE)