Cuba ocupa el lugar 171 de 179 represores de la prensa, según la última clasificación
mundial de Reporteros Sin Fronteras.
El informe anual correspondiente a 2013 de la organización Reporteros Sin Fronteras inicia asegurando que la libertad de prensa es la primera de las libertades y que nadie mejor que un dictador para ayudar a comprender el valor de la libertad.
Así, en lo referente a Cuba, el informe asegura que, a lo largo del año, varios periodistas que cumplían diversas penas por ejercer su profesión salieron de la prisión. Sin embargo, apunta, el hostigamiento y las detenciones breves a los informadores también continuaron.
En abril, fue puesto en libertad Calixto Ramón Martínez Arias, periodista independiente y corresponsal de la agencia Hablemos Press, tras permanecer en la cárcel desde septiembre de 2012.
Martínez Arias fue encarcelado por haber difundido información sobre un brote de dengue y cólera, que días más tarde fue confirmado por el Gobierno. Nunca recibió una acusación formal ni se abrió ningún proceso en su contra.
Mario Echevarría Driggs, David Águila Montero y William Cácer Díaz, fueron puestos en libertad una semana después de su detención, en La Habana.
En febrero, Héctor Julio Cedeño, fue detenido en La Habana por haber fotografiado a un grupo de inspectores que hostigaban a vendedores ambulantes.
RSF escribió al general cubano Raúl Castro, en febrero, en relación con la reforma de la Ley Migratoria, que había entrado en vigor el 14 de enero, que eliminaba el permiso de salida, hasta entonces obligatorio para los cubanos que querían viajar al extranjero, y les permite regresar a la isla sin condiciones.
La organización pedía al general cubano, que abriera la puerta a los periodistas y disidentes obligados al exilio que quisieran regresar a su patria y, a la inversa, a todos aquellos que desearan viajar al extranjero.
Asimismo, pedía la libertad para los periodistas injustamente encarcelados por informar. La misiva recordaba que Luis Antonio Torres, empleado del diario gubernamental Granma, fue condenado, en julio de 2012, a 14 años de prisión por el cargo de “espionaje”, nunca probado.
RSF constataba su preocupación por la suerte del laureado escritor Ángel Santiesteban-Prats, condenado a cinco años de prisión, en diciembre de 2012, oficialmente por “violación de domicilio y lesiones”, cuando lo único que había hecho fue criticar al gobierno en su blog.
Así, en lo referente a Cuba, el informe asegura que, a lo largo del año, varios periodistas que cumplían diversas penas por ejercer su profesión salieron de la prisión. Sin embargo, apunta, el hostigamiento y las detenciones breves a los informadores también continuaron.
En abril, fue puesto en libertad Calixto Ramón Martínez Arias, periodista independiente y corresponsal de la agencia Hablemos Press, tras permanecer en la cárcel desde septiembre de 2012.
Martínez Arias fue encarcelado por haber difundido información sobre un brote de dengue y cólera, que días más tarde fue confirmado por el Gobierno. Nunca recibió una acusación formal ni se abrió ningún proceso en su contra.
Mario Echevarría Driggs, David Águila Montero y William Cácer Díaz, fueron puestos en libertad una semana después de su detención, en La Habana.
En febrero, Héctor Julio Cedeño, fue detenido en La Habana por haber fotografiado a un grupo de inspectores que hostigaban a vendedores ambulantes.
RSF escribió al general cubano Raúl Castro, en febrero, en relación con la reforma de la Ley Migratoria, que había entrado en vigor el 14 de enero, que eliminaba el permiso de salida, hasta entonces obligatorio para los cubanos que querían viajar al extranjero, y les permite regresar a la isla sin condiciones.
La organización pedía al general cubano, que abriera la puerta a los periodistas y disidentes obligados al exilio que quisieran regresar a su patria y, a la inversa, a todos aquellos que desearan viajar al extranjero.
Asimismo, pedía la libertad para los periodistas injustamente encarcelados por informar. La misiva recordaba que Luis Antonio Torres, empleado del diario gubernamental Granma, fue condenado, en julio de 2012, a 14 años de prisión por el cargo de “espionaje”, nunca probado.
RSF constataba su preocupación por la suerte del laureado escritor Ángel Santiesteban-Prats, condenado a cinco años de prisión, en diciembre de 2012, oficialmente por “violación de domicilio y lesiones”, cuando lo único que había hecho fue criticar al gobierno en su blog.