Un grupo de 15 opositores protestaron el martes frente a la unidad de la policía de Guantánamo conocida por Parque 24 para exigir la detención de Reinier Grandales Savón, colaborador de la policía que agredió e hirió con un arma blanca en la noche del sábado 18 de abril a Niober García Fournier, activista de la Unión Patriótica de Cuba.
Los opositores exigieron la detención inmediata de Grandales porque, además de asestar una puñalada a García y luego "golpearlo salvajamente", andaba por las calles con un machete y amenazando que cuando se encontrara con algún opositor lo iba a agredir, dijo a Martí Noticias Yoanis Beltrán, también activista de UNPACU.
Luego de varias horas frente a la estación de policía, los opositores se retiraron al presenciar que las fuerzas militares detuvieron al agresor y lo condujeron a la unidad policial.
Beltrán señaló que esas acciones contra los opositores en la región no son aisladas y que siempre los simpatizantes del Gobierno o agentes de la policía "cuentan con total impunidad".
Niober García Fournier continúa ingresado en el hospital provincial Agostinho Neto de Guantánamo y en el día de hoy tuvieron que llevarlo de urgencia al salón "por nuevas complicaciones", dijo Beltrán.
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En Santiago de Cuba, José Daniel Ferrer, coordinador general de UNPACU, expresó su preocupación por los incidentes violentos por parte de las autoridades policiales contra García en Guantánamo y advirtió que la impunidad policial se extiende a todo el territorio.
Citó el caso de "tortura" de un agente de la Seguridad del Estado conocido por Pagán contra al opositor Rubén Torre Saiz, a quien "amarró y amordazó para dejarlo tirado encima de un hormiguero", y señaló que también usan métodos de intimidación y acusaciones falsas contra activistas.
A juicio de Ferrer, el hombre que apuñaló a García fue detenido porque hubo una fuerte presión, pero mañana pueden liberarlo porque goza de la protección policial.
La escalada de violencia va en aumento después de la Cumbre de las Américas en Panamá y donde los mismos agentes de Raúl Castro fueron a comportarse violentamente, según destacó Ferrer.
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