La exportación de consultores y especialistas cubanos en temas de recursos hidráulicos se suma a la larga lista de expertos de la venta de servicios al exterior.
Cada vez son más frecuentes las exportaciones que hace el gobierno cubano de personal especializado en diferentes ramas de la ciencia, la técnica y la economía mientras en todo el país las carencias aumentan y la población se desespera ante problemas acuciantes.
Actualmente, la venta de servicios al exterior representa el 70% de las exportaciones de la isla, un total de 10.000 millones de dólares, según cifras divulgadas el pasado mes de julio por el viceministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera de Cuba, Antonio Carricarte.
El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) anunció que aumentará la venta de servicios de consultoría e ingeniería a países de Africa, Asia y América y la firma de un convenio de cooperación en las esferas de administración de los recursos hídricos y el abastecimiento de agua con la ministra de Asuntos del Agua y Medio Ambiente de Sudáfrica.
El periodista independiente Jorge Corrales Ceballos, residente en la ciudad de Guantánamo, dijo que la exportación de consultores y expertos cubanos es una gran ironía en un país que lo que más necesita son peritos “para solucionar los graves problemas en todas las esferas de la economía y la sociedad”, señaló.
La nota del INRH se suma a otras tantas emitidas por el gobierno cubano que hablan de exportaciones de médicos, personal de laboratorio, informáticos, maestros y constructores a diferentes países.
Frank Abel García joven de 31 años estudiante de Derecho y residente en el reparto capitalino de Alamar criticó esta práctica del gobierno cubano.
Señaló que resulta increíble que el gobierno siga exportando ‘capital humano’ mientras los cubanos quedan cada día ‘más desprotegidos’ de atención médica, de laboratorios, maestros y ‘hasta de agua’ porque las instalaciones están rotas y no hay con qué reponerlas.
A juicio de García eso ocurre porque gobierno no es capaz de generar nada productivo.
También el periodista independiente Calixto Ramón Martínez residente en la capital manifestó su acuerdo con García y Corrales en lo que respecta a las políticas del gobierno de exportar de todo mientras en el país la gente “sufre de tantas carencias”.
La titular surafricana que rubricó el contrato con Cuba explicó que la experiencia técnica de los cubanos y el dominio del tema fueron elementos favorables para ampliar los intercambios.
Sin embargo, el comunicador Calixto Ramón cree que precisamente la falta de expertos en tema de sanidad de las aguas es una de las causas por las que el cólera se ha propagado entre la población de la isla.
Según Calixto hace apenas unos días visitó las instalaciones del embalse del Parque Lenin que abastece a parte de la capital y los trabajadores le dijeron que el agua está en malas condiciones porque "falla el saneamiento y no tienen medios adecuados para la purificación”.
También las tuberías que llevan el agua a la ciudad “están rotas y ahí es donde aumenta la contaminación” señaló Martínez que considera este asunto como uno de los que incide en el aumento del cólera en las ciudades.
Hace apenas un año el sitio digital Cubadebate publicó que solamente en la capital se pierde el 70 por ciento del agua bombeada a los consumidores en el trayecto hasta su destino.
El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) anunció que aumentará la venta de servicios de consultoría e ingeniería a países de Africa, Asia y América y la firma de un convenio de cooperación en las esferas de administración de los recursos hídricos y el abastecimiento de agua con la ministra de Asuntos del Agua y Medio Ambiente de Sudáfrica.
La presidenta del INRH, Inés María Chapman, explicó que la cooperación con Sudáfrica consiste en "un diagnóstico de la situación actual y el diseño de una ley para reglamentar la explotación y uso del agua" y que el instituto cubano ya tiene 47 especialistas en Angola, 10 en Venezuela, 8 en Argelia y ahora colocará 11 en Sudáfrica.
El periodista independiente Jorge Corrales Ceballos, residente en la ciudad de Guantánamo, dijo que la exportación de consultores y expertos cubanos es una gran ironía en un país que lo que más necesita son peritos “para solucionar los graves problemas en todas las esferas de la economía y la sociedad”, señaló.
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La nota del INRH se suma a otras tantas emitidas por el gobierno cubano que hablan de exportaciones de médicos, personal de laboratorio, informáticos, maestros y constructores a diferentes países.
Frank Abel García joven de 31 años estudiante de Derecho y residente en el reparto capitalino de Alamar criticó esta práctica del gobierno cubano.
Señaló que resulta increíble que el gobierno siga exportando ‘capital humano’ mientras los cubanos quedan cada día ‘más desprotegidos’ de atención médica, de laboratorios, maestros y ‘hasta de agua’ porque las instalaciones están rotas y no hay con qué reponerlas.
A juicio de García eso ocurre porque gobierno no es capaz de generar nada productivo.
También el periodista independiente Calixto Ramón Martínez residente en la capital manifestó su acuerdo con García y Corrales en lo que respecta a las políticas del gobierno de exportar de todo mientras en el país la gente “sufre de tantas carencias”.
La titular surafricana que rubricó el contrato con Cuba explicó que la experiencia técnica de los cubanos y el dominio del tema fueron elementos favorables para ampliar los intercambios.
Sin embargo, el comunicador Calixto Ramón cree que precisamente la falta de expertos en tema de sanidad de las aguas es una de las causas por las que el cólera se ha propagado entre la población de la isla.
Según Calixto hace apenas unos días visitó las instalaciones del embalse del Parque Lenin que abastece a parte de la capital y los trabajadores le dijeron que el agua está en malas condiciones porque "falla el saneamiento y no tienen medios adecuados para la purificación”.
También las tuberías que llevan el agua a la ciudad “están rotas y ahí es donde aumenta la contaminación” señaló Martínez que considera este asunto como uno de los que incide en el aumento del cólera en las ciudades.
Hace apenas un año el sitio digital Cubadebate publicó que solamente en la capital se pierde el 70 por ciento del agua bombeada a los consumidores en el trayecto hasta su destino.