En esos sitios escogidos para arrojar desperdicios se pueden ver animales domésticos, roedores e insectos, conviviendo juntos y satisfaciendo sus necesidades alimentarias.
Rodrigo Alberto Rodríguez Verdecia de la Red Cubana de Comunicadores hizo un recorrido por las calles de la capital que evidenció el abandono de las instituciones encargadas de la higiene en la ciudad y las esquinas abarrotadas de basura y escombros.
A juicio del comunicador la ciudad se ha vuelto un caos y los desperdicios se apoderan de los espacios públicos porque las personas tiran en el suelo todo tipo de objetos desechables.
"Tiran almohadillas sanitarias usadas en cualquier lugar y los desechos de alimentos se descomponen a la vista regando fetidez a sus alrededores, que se mezcla con el olor a orina, de quienes usan las vías públicas como baños", destaca Rodríguez.
En esos sitios escogidos para arrojar desperdicios se pueden ver animales domésticos, roedores e insectos, conviviendo juntos y satisfaciendo sus necesidades alimentarias. En muchas ocasiones las personas cuando transitan por el lugar están obligadas a bajarse de la acera para la calle porque las grandes montañas de basuras obstruyen el paso.
El agua putrefacta también se hace presente ya que queda estancada y sirve de asilo para plagas y epidemias.
La Red Cubana de Comunicadores ha denunciado situaciones similares en el municipio capitalino de Guanabacoa.
A juicio del comunicador la ciudad se ha vuelto un caos y los desperdicios se apoderan de los espacios públicos porque las personas tiran en el suelo todo tipo de objetos desechables.
"Tiran almohadillas sanitarias usadas en cualquier lugar y los desechos de alimentos se descomponen a la vista regando fetidez a sus alrededores, que se mezcla con el olor a orina, de quienes usan las vías públicas como baños", destaca Rodríguez.
En esos sitios escogidos para arrojar desperdicios se pueden ver animales domésticos, roedores e insectos, conviviendo juntos y satisfaciendo sus necesidades alimentarias. En muchas ocasiones las personas cuando transitan por el lugar están obligadas a bajarse de la acera para la calle porque las grandes montañas de basuras obstruyen el paso.
El agua putrefacta también se hace presente ya que queda estancada y sirve de asilo para plagas y epidemias.
La Red Cubana de Comunicadores ha denunciado situaciones similares en el municipio capitalino de Guanabacoa.