¿Cómo creen que participe el gobierno cubano en la crisis alrededor de Edward Snowden?
El gobierno de La Habana es un especialista en ofrecerse como mediador en situaciones como esta, recuérdense las diferentes conciliaciones entre los guerrilleros y el gobierno colombiano o las negociaciones con los insurgentes y el gobierno de Perú.
Pero en la crisis de Snowden el gobierno cubano no tiene ni quiere tener ningún tipo de influencia que pueda servir para dirimir entre las naciones interesadas.
La Habana ha cedido astutamente el papel de cabeza del socialismo del siglo 21 a Venezuela, con lo que los sitúa en la primera línea de fuego mientras que la inteligencia cubana maneja los hilos desde la oscuridad.
Es una conducta que además conlleva a la pérdida del protagonismo histórico que siempre tuvo Cuba entre las organizaciones de izquierda.
Cuba criticará de forma general las actitudes asumidas contra el prófugo norteamericano, o los casos contra los gobiernos latinoamericanos, como el sucedido con el avión presidencial de Evo Morales en Europa.
Pero no se debe esperar que el gobierno de Raúl Castro tome una participación directa y manifiesta en el caso de Edward Snowden.
Rusia, Estados Unidos, China e Inglaterra tienen capacidad para discutir directamente los temas referentes a Snowden, por lo que no necesitarán de ningún mediador para enfrentarse.
Ecuador, Bolivia, Venezuela y Nicaragua se han involucrado directamente en esta crisis sin necesidad de mediador o representante, así que es muy difícil que lo necesiten en lo adelante.
En lo adelante no debe aumentar la participación cubana, durante el desarrollo de esta crisis Cuba será una voz más en el coro de la izquierda latinoamericana, pero nunca un actor principal.
El gobierno de La Habana es un especialista en ofrecerse como mediador en situaciones como esta, recuérdense las diferentes conciliaciones entre los guerrilleros y el gobierno colombiano o las negociaciones con los insurgentes y el gobierno de Perú.
Pero en la crisis de Snowden el gobierno cubano no tiene ni quiere tener ningún tipo de influencia que pueda servir para dirimir entre las naciones interesadas.
La Habana ha cedido astutamente el papel de cabeza del socialismo del siglo 21 a Venezuela, con lo que los sitúa en la primera línea de fuego mientras que la inteligencia cubana maneja los hilos desde la oscuridad.
Es una conducta que además conlleva a la pérdida del protagonismo histórico que siempre tuvo Cuba entre las organizaciones de izquierda.
Cuba criticará de forma general las actitudes asumidas contra el prófugo norteamericano, o los casos contra los gobiernos latinoamericanos, como el sucedido con el avión presidencial de Evo Morales en Europa.
Pero no se debe esperar que el gobierno de Raúl Castro tome una participación directa y manifiesta en el caso de Edward Snowden.
Rusia, Estados Unidos, China e Inglaterra tienen capacidad para discutir directamente los temas referentes a Snowden, por lo que no necesitarán de ningún mediador para enfrentarse.
Ecuador, Bolivia, Venezuela y Nicaragua se han involucrado directamente en esta crisis sin necesidad de mediador o representante, así que es muy difícil que lo necesiten en lo adelante.
En lo adelante no debe aumentar la participación cubana, durante el desarrollo de esta crisis Cuba será una voz más en el coro de la izquierda latinoamericana, pero nunca un actor principal.