Organizaciones defensoras de la libertad de prensa tomaron nota de la censura y el hostigamiento contra los comunicadores críticos en Cuba, a lo largo del año.
"En lo que respecta al continente americano, en Cuba, la represión contra blogueros y periodistas disidentes volvió a intensificarse desde el año 2011", indicó la organización Reporteros Sin Fronteras en su balance anual "2012: hecatombe para los actores de la información", dado a conocer este miércoles 19 de diciembre.
El informe pasa revista a la situación mundial de la libertad de prensa y se concentra en los 88 comunicadores asesinados en el mundo en el año que termina, y en los países que considera las mayores cárceles de periodistas del mundo; Turquía, China, Eritrea, Irán y Siria.
Por varios años Cuba fue considerada por la misma entidad defensora de la libertad de prensa la segunda mayor cárcel de periodistas del mundo después de China, desde que en marzo de 2003 el gobierno arrestó a 26 informadores independientes y los condenó a penas de cárcel de entre 15 y 28 años
El último de ellos, Pedro Argüelles Morán, fue liberado en marzo de 2011, pero en septiembre de 2012 el ciclo se reinició cuando el régimen de Raúl Castro encausó por Desacato y envió a prisión en espera de juicio al reportero Calixto Ramón Martínez Arias, de la agencia independiente Hablemos Press.
Durante el año, Reporteros Sin Fronteras tomó nota de las detenciones y deportaciones de que fue objeto a través del año Martínez, a quien se debieron las primicias informativas sobre las epidemias de cólera y dengue que se desataron a mediados de año y que todavía casuan estragos en la isla.
La institución con sede en París también denunció el encarcelamiento del reportero, quien integró asimismo del Censo de Periodistas Encarcelados en 2012 publicado el pasado día 11 de diciembre por el Comité de Protección a los Periodistas, CPJ, con sede en Nueva York.
La institución remarcó que, después de una ausencia de un año en el censo (anual), Cuba volvió a figurar entre las naciones que encarcelan a periodistas."Agentes de seguridad arrestaron a Calixto Ramón Martínez Arias, periodista de la agencia independiente Centro de Información Hablemos Press, en septiembre, por cargos de desacato. Cuando fue detenido, Martínez Arias estaba investigando reportes de que un envío internacional de medicina y equipos médicos se había echado a perder. El encarcelamiento en Cuba fue el único caso documentado por el CPJ en las Américas".
Por su parte RSF también denunció el particular ensañamiento contra los miembros del Centro de información Hablemos Press, cuyos periodistas fueron constantemente objeto de amenazas y de detenciones arbitrarias.
Uno de los informes sobre Cuba de RSF se refiere a un periodista oficialista, José Antonio Torres, corresponsal en Santiago de Cuba del diario oficial Granma, quien --dice-- "fue condenado en julio de 2012 a 14 años de cárcel por 'espionaje' y fue despojado de su título universitario de periodista".
La nota precisa que Torres había sido arrestado en 2011, "después de publicar una serie de informes sobre la mala gestión en la construcción del acueducto de Santiago de Cuba, y sobre la instalación del cable de fibra óptica entre Venezuela y Cuba".
La isla caribeña había quedado en el lugar 167 entre 179 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2011-2012 publicada en enero del corriente año por Reporteros Sin Fronteras.
La entidad tomó nota de la prohibición a la mayor parte de los ciudadanos para acceder a Internet; los esfuerzos del régimen para no dejarles el ciberespacio a los disidentes; así como la campaña propagandística que acusa a los blogueros críticos de “cibermercenarios” y de estar manipulados por Estados Unidos.
En mayo de 2012, el CPJ clasificó a Cuba en el noveno lugar entre los diez países más censurados del mundo.
Explicando cómo funciona la censura en la isla, la organización recordó que "todos los medios de comunicación nacionales autorizados son controlados por el Partido Comunista, que reconoce la libertad de prensa sólo "de acuerdo con los fines de la sociedad socialista".
Agregó que "los proveedores de servicios de Internet están obligados a bloquear contenidos objetables. Los periodistas independientes y blogueros trabajan todos en sitios web que están alojados en el extranjero y son actualizados a través de las embajadas o de costosas conexiones en los hoteles"
.
Señaló el CPJ que "el gobierno continúa persiguiendo a los periodistas críticos mediante arrestos arbitrarios, detenciones a corto plazo, golpizas, vigilancia y campañas de desprestigio en los medios de comunicación estatales y en la Internet.Partidarios del gobierno se congregan a veces frente a los domicilios de los periodistas críticos para intimidarlos".
En ese sentido, en 2012 las citaciones, amenazas y detenciones breves a periodistas y blogueros disidentes continuaron siendo rutinarias en todo el país, en muchos casos para impedirles realizar su trabajo.
Un punto crítico de ese hostigamiento se registró en noviembre pasado cuando el arresto de la abogada, bloguera y periodista independiente Yaremis Flores desencadenó una veintena de detenciones de compañeros suyos que fueron a interesarse por su suerte en estaciones de policía. Estos fueron agredidos verbalmente, y algunos fueron golpeados.
El CPJ puntualizó que entre los detenidos se encontraban los blogueros Yoani Sánchez, Laritza Diversent, Orlando Luís Pardo, Eugenio Leal y Angel Santiesteban --recién sentenciado a cinco años de cárcel en un amañado proceso judicial -- así como los periodistas independientes Julio Aleaga Pesant, Guillermo Fariñas e Iván Hernández Carrillo.
Otro comunicador, Antonio González Rodiles, director del proyecto Estado de Sats, permaneció 19 días detenido y amenazado con un juicio por Resistencia.
El informe pasa revista a la situación mundial de la libertad de prensa y se concentra en los 88 comunicadores asesinados en el mundo en el año que termina, y en los países que considera las mayores cárceles de periodistas del mundo; Turquía, China, Eritrea, Irán y Siria.
Por varios años Cuba fue considerada por la misma entidad defensora de la libertad de prensa la segunda mayor cárcel de periodistas del mundo después de China, desde que en marzo de 2003 el gobierno arrestó a 26 informadores independientes y los condenó a penas de cárcel de entre 15 y 28 años
Durante el año, Reporteros Sin Fronteras tomó nota de las detenciones y deportaciones de que fue objeto a través del año Martínez, a quien se debieron las primicias informativas sobre las epidemias de cólera y dengue que se desataron a mediados de año y que todavía casuan estragos en la isla.
La institución con sede en París también denunció el encarcelamiento del reportero, quien integró asimismo del Censo de Periodistas Encarcelados en 2012 publicado el pasado día 11 de diciembre por el Comité de Protección a los Periodistas, CPJ, con sede en Nueva York.
La institución remarcó que, después de una ausencia de un año en el censo (anual), Cuba volvió a figurar entre las naciones que encarcelan a periodistas."Agentes de seguridad arrestaron a Calixto Ramón Martínez Arias, periodista de la agencia independiente Centro de Información Hablemos Press, en septiembre, por cargos de desacato. Cuando fue detenido, Martínez Arias estaba investigando reportes de que un envío internacional de medicina y equipos médicos se había echado a perder. El encarcelamiento en Cuba fue el único caso documentado por el CPJ en las Américas".
Por su parte RSF también denunció el particular ensañamiento contra los miembros del Centro de información Hablemos Press, cuyos periodistas fueron constantemente objeto de amenazas y de detenciones arbitrarias.
Por ejemplo, Roberto de Jesús Guerra Pérez, director de Hablemos Press, y el periodista Jaime Leygonier, fueron interrogados y amenazados durante varias horas, el 1 y 8 de noviembre de 2012 respectivamente. Mientras que Enyor Díaz Allen, corresponsal de Hablemos Press en Guantánamo, fue detenido desde el martes 6 de noviembre de 2012 durante 77 horas, y todo su equipo de trabajo le fue confiscado, incluyendo una computadora, dos cámaras fotográficas y un teléfono móvil.
Uno de los informes sobre Cuba de RSF se refiere a un periodista oficialista, José Antonio Torres, corresponsal en Santiago de Cuba del diario oficial Granma, quien --dice-- "fue condenado en julio de 2012 a 14 años de cárcel por 'espionaje' y fue despojado de su título universitario de periodista".
La nota precisa que Torres había sido arrestado en 2011, "después de publicar una serie de informes sobre la mala gestión en la construcción del acueducto de Santiago de Cuba, y sobre la instalación del cable de fibra óptica entre Venezuela y Cuba".
La isla caribeña había quedado en el lugar 167 entre 179 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2011-2012 publicada en enero del corriente año por Reporteros Sin Fronteras.
La entidad tomó nota de la prohibición a la mayor parte de los ciudadanos para acceder a Internet; los esfuerzos del régimen para no dejarles el ciberespacio a los disidentes; así como la campaña propagandística que acusa a los blogueros críticos de “cibermercenarios” y de estar manipulados por Estados Unidos.
En mayo de 2012, el CPJ clasificó a Cuba en el noveno lugar entre los diez países más censurados del mundo.
Explicando cómo funciona la censura en la isla, la organización recordó que "todos los medios de comunicación nacionales autorizados son controlados por el Partido Comunista, que reconoce la libertad de prensa sólo "de acuerdo con los fines de la sociedad socialista".
Agregó que "los proveedores de servicios de Internet están obligados a bloquear contenidos objetables. Los periodistas independientes y blogueros trabajan todos en sitios web que están alojados en el extranjero y son actualizados a través de las embajadas o de costosas conexiones en los hoteles"
.
Señaló el CPJ que "el gobierno continúa persiguiendo a los periodistas críticos mediante arrestos arbitrarios, detenciones a corto plazo, golpizas, vigilancia y campañas de desprestigio en los medios de comunicación estatales y en la Internet.Partidarios del gobierno se congregan a veces frente a los domicilios de los periodistas críticos para intimidarlos".
En ese sentido, en 2012 las citaciones, amenazas y detenciones breves a periodistas y blogueros disidentes continuaron siendo rutinarias en todo el país, en muchos casos para impedirles realizar su trabajo.
Un punto crítico de ese hostigamiento se registró en noviembre pasado cuando el arresto de la abogada, bloguera y periodista independiente Yaremis Flores desencadenó una veintena de detenciones de compañeros suyos que fueron a interesarse por su suerte en estaciones de policía. Estos fueron agredidos verbalmente, y algunos fueron golpeados.
El CPJ puntualizó que entre los detenidos se encontraban los blogueros Yoani Sánchez, Laritza Diversent, Orlando Luís Pardo, Eugenio Leal y Angel Santiesteban --recién sentenciado a cinco años de cárcel en un amañado proceso judicial -- así como los periodistas independientes Julio Aleaga Pesant, Guillermo Fariñas e Iván Hernández Carrillo.
Otro comunicador, Antonio González Rodiles, director del proyecto Estado de Sats, permaneció 19 días detenido y amenazado con un juicio por Resistencia.