Vea las imágenes de la colección de fotografías de Mariette Pathy Allen enfocada en la imagen transgénero: TransCuba. Unas 30 fotografías de tres personas que han sido sometidas a cirugías de cambio de género en Cuba.
En 2014, la venezolana transgénero Isabella Santiago se coronó "Miss International Queen". Cientos de fotos suyas pueden encontrarse en internet. Las palabras que se repiten: "lució glamorosa y deslumbrante". Imágenes que hablan de elegancia, sofisticación y progreso.
(Este no es un texto defendiendo ni criticando una opción sexual o de género; tampoco tiene pretensiones en cuanto al discurso de la identidad. Ese puede ser otro texto).
Ángela Ponce es una española para quien la experiencia de cambio de género es reciente. Ella parece tener lo que llamamos una "vida normal" y también apuesta por el mundo de la moda y la imagen. ¿Por qué? Con seguridad, se siente segura y orgullosa de su imagen; es lo que proyecta. No le debe nada a nadie.
Andreja Pejic ha sido la primera modelo transgénero en tener su propio perfil oficial en la revista Vogue. Es una mujer de origen serbio, nacida masculino; alguien que ha tenido éxito en el mundo de la moda, a fuer de empeño.
Estas personas, y todas las que se arriesgan a lo que tiene que ser cirugías y tratamientos médicos, no sólo padecen dolores físicos. Además, llevan una enorme carga emocional y económica.
¿Por qué la imagen del fenómeno transgénero cubano remite a las ideas de dolor, pobreza… y dependencia? ¿Por qué va vinculado a la marginalidad? ¿Por qué resulta todo tan sórdido?
Las imágenes de TransCuba no son las del conflicto humano universal que va unido a la realidad transgénero; ni muestran la cara de satisfacción de quienes han logrado un sueño o la salida a un profundo dolor existencial.
Los ambientes, llenos de paredes descascaradas o en el cemento puro, azoteas, mobiliario, vestimenta y toda la suerte de utilería (doméstica); y la expresión de los rostros y los cuerpos dicen una cosa clara: La cirugía de cambio de género no ha quitado la carga a sus existencias. El género no es la causa de sus conflictos.
No son los ambientes. Las fotos de Rihanna en La Habana, hechas por la fotógrafa de las celebridades Annie Leibowitz, que publicó recientemente la revista Vanity Fair, han sido ambientadas en espacios ruinosos y más de una de sus poses raya en la vulgaridad y el mal gusto. La belleza exultante de Rihanna contrasta, sin embargo, y es más notoria en ese contexto.
Una selección de las fotografías de la colección TransCuba se encuentra expuesta (hasta el 28 de noviembre) en una galería de Miami, en un suburbio conocido como Little Haití. La introducción del catálogo que acompaña la exposición, una impresión impecable y costosa, lleva la firma de Mariela Castro.