La cosecha azucarera en Cuba cayó en enero debido a las lluvias fuera de temporada y el calor, según informó Reuters.
El resultado frustra las esperanzas de igualar la producción del pasado año, cuando la industria alcanzó 1.9 millones de toneladas de azúcar sin refinar en la temporada de 2014-2015.
El monopolio estatal del azúcar, AZCUBA, había reducido ya los planes de crecimiento a causa de una grave sequía en 2015.
Reportes desde todas las provincias cubanas refieren que las plantaciones están inundadas, los molinos detenidos y los rendimientos de azúcar son menores de lo esperado a partir del procesamiento de la caña de azúcar.
"Las lluvias de enero y su humedad en las siembras cañeras obligaron a una paralización parcial de las operaciones fabriles en cinco de los ingenios villaclareños", reportó el semanario Vanguardia, medio del Partido Comunista en la central provincia de Villa Clara.
"Otros tres (molinos) que debían incorporarse en el período retrasaron sus respectivas arrancadas", añadió.
El Niño contra la zafra
El fenómeno climático conocido como El Niño causó una grave sequía durante la temporada de lluvias del verano.
La sequía hizo disminuir en un 10% las estimaciones de disponibilidad de caña, en comparación con la cosecha anterior, y en hasta un 25% en zonas orientales de Cuba.
Los meteorólogos pronosticaron que El Niño podría causar lluvias torrenciales inusuales desde diciembre hasta marzo, una previsión que ha demostrado ser cierta hasta la fecha.
La cosecha azucarera se extiende desde fines de noviembre hasta abril, con un máximo de producción de azúcar a partir de enero y hasta marzo.
"Empezaron con la esperanza de llegar a 1.9 millones de toneladas de azúcar sin refinar. Y ahora, si las previsiones se confirman y el mal tiempo continúa, van a tener la suerte de superar los 1.6 millones producidos en 2013-2014", dijo un experto vinculado a la industria que pidió el anonimato.
Como "muy mala" describió la cosecha la pasada semana José Ramón Machado Ventura, número dos del gobernante Partido Comunista.
"Las fábricas cerraron debido a que la caña no podía ser cortada,
se inundaron las plantaciones (...) La caña es menor de lo normal para esta época", dijo Ventura en declaraciones a la televisión local.
Cuba consume entre 600.000 y 700.000 toneladas de azúcar al año y tiene un acuerdo para exportar a China unas 400.000 toneladas. El resto, se vende a otros mercados.