Los cubanos hijos y nietos de españoles podrán hacerse ciudadanos de España si el Congreso de ese país aprueba el programa Coalición Progresista-Un Nuevo Acuerdo Para España, presentado por el grupo parlamentario que encabeza el presidente de gobierno en funciones, Pedro Sánchez.
“Se reconocerá la nacionalidad española a las personas descendientes de progenitores españoles nacidos en el extranjero en cualquier momento”, reza el punto 5.10 del documento. “Estas personas podrán optar por la nacionalidad española en caso de que sus madres, padres, abuelas o abuelos adquirieran la nacionalidad del país de acogida”.
El reconocimiento de padres y abuelos comprenderá incluso a quienes perdieron la nacionalidad española “en el exilio causado por la Guerra Civil y la dictadura”, indica el texto del programa, presentado en el Congreso por Sánchez y el líder del partido izquierdista Unidas Podemos, Pablo Iglesias.
El presidente en funciones del gobierno español, Pedro Sánchez (izquierda) y el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, al presentar el programa en Madrid.
Para el diario espanol La Vanguardia, no hay total certeza de que el programa se convierta en ley.
"Las diferencias en el pasado entre Sánchez e Iglesias (por ejemplo, con la investidura fallida de la última legislatura), así como la falta de una mayoría parlamentaria sólida, podrían arrojar dudas sobre si el programa de gobierno se acabará cumpliendo o no", dijo el periódico este martes.
A juicio de Ferrán Núñez, un cubano-español cuyo grupo Autonomía Concertada para Cuba promueve la reunificación de Cuba con España, el nuevo proyecto de ley es más amplio que los anteriores, partiendo de la propuesta inicial de 2016, reiterada en 2017 y 2018.
Con él, socialistas y comunistas buscan ampliar su base electoral fuera de España, le dijo Núñez al corresponsal de Radio Televisión Martí en ese país, Michel Suárez.
“Cada año, en cada elección, a pesar de todas las complicaciones administrativas, [ese voto] siempre es favorable al Partido Socialista”, declaró Núñez. “Esto les conviene, porque tendrían una fuerza enorme que apoyaría desde el exterior las medidas que ellos impondrían en España”.
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Ciudadanía para hijos y nietos de españoles
Ese es el secreto y la razón ser del proyecto, subraya el director de Autonomía Concertada para Cuba y del sitio de internet espanolesdecuba.info.
La investidura de Pedro Sánchez como presidente de gobierno debe producirse el martes 7 de enero, pues su Partido Socialista Obrero Español (PSOE) parece tener asegurado el apoyo o la abstención de los grupos parlamentarios nacionalistas y separatistas, indica el reportero.
“Este acuerdo obedece a una nueva normalidad institucional presente en muchas democracias de nuestro entorno", declaró Sánchez al presentarlo el lunes. "Los gobiernos de coalición son parte de esa nueva normalidad que tenemos que asumir con inteligencia y con generosidad y, sobre todo y ante todo, con vocación de compartir el poder para fortalecer nuestras instituciones”.
La oposición calificó de “letal” el acuerdo.
“Para este viaje no hacían falta alforjas”, escribió en Twitter Pablo Casado, el líder del Partido Popular. “Sánchez ha elegido y radicaliza su propuesta con un acuerdo letal para España. Podía haber ahorrado 200M y seis meses de inestabilidad económica y territorial que no han acabado con el sueño de Sánchez, pero sí de millones de españoles”.
Para este viaje no hacían falta alforjas. Sánchez ha elegido y radicaliza su propuesta con un acuerdo letal para España. Podía haber ahorrado 200M y seis meses de inestabilidad económica y territorial que no han acabado con el sueño de Sánchez, pero sí de millones de españoles. pic.twitter.com/0ePbTZ6Okg
— Pablo Casado Blanco (@pablocasado_) November 12, 2019
Los extranjeros pueden solicitar la nacionalidad española si han residido 10 años en ese país, cinco para quienes hayan legalizado su estatus como refugiados, y dos años si el extranjero procede de alguna nación iberoamericana, dice el sitio especializado legalteam.es.
Según el diario El País, el nuevo acuerdo propone una “derogación parcial de los aspectos más lesivos de la reforma laboral, una reforma fiscal ambiciosa con subidas de impuestos a los ricos y a las grandes empresas, punto final a la llamada ley seguridad ciudadana (la denominada ley mordaza), fuerte subida del salario mínimo y, en fin, un claro acento social y feminista”.
“Una de las muchas injusticias del desastre de 1898 fue que cubanos y puertorriqueños quedaron en un limbo jurídico-político intolerable”, apunta el sitio espanolesdecuba.info. “Y ya es hora no de hacer «caridad», sino de justicia, y reiteramos, para con nuestra sangre y nuestra cultura. Y es una pena que la oposición en España no parezca interesarse por estos temas”.