Las autoridades españolas detuvieron a 48 personas involucradas en una red que facilitaba la regularización masiva de inmigrantes cubanos a través de matrimonios de conveniencia
La policía española detuvo a 48 personas tras desarticular una red que facilitaba la regularización masiva de inmigrantes cubanos a través de matrimonios de conveniencia, con los que obtenían la nacionalidad española o el permiso para llevar a cabo una reagrupación familiar.
La agencia de noticias EFE señala que al parecer el grupo estaba dirigido por una abogada y su pareja, ambos naturales de Cuba y residentes de Gran Canaria.
Los detenidos proporcionaban un paquete de servicios por 6 mil euros, equivalente a 7.500 dólares, lo que incluía el matrimonio en España, una agrupación familiar, la adquisición de la nacionalidad española y un divorcio de mutuo acuerdo.
El Cuerpo Nacional de Policía informó este miércoles que la mayoría de los usuarios de estos servicios tenían como última finalidad llegar a Estados Unidos a través de México gracias a sus documentos españoles.
En el curso de la investigación, que comenzó en 2010, la Policía detectó más de un centenar de expedientes fraudulentos en los que podría haber intervenido esta red de regularización de inmigrantes.
Los investigadores pudieron comprobar que la abogada, especializada en reagrupaciones familiares y expedientes de nacionalización, estaba mediando en una serie de matrimonios que tenían irregularidades.
La Policía aseguró que la letrada y su pareja, también de origen cubano y nacionalizado español, ofrecían a compatriotas que residan en España de forma irregular la posibilidad de legalizar su situación y también contactaban en Cuba con personas interesadas en viajar a Europa en calidad de reagrupados.
Después de revisar los expedientes de reagrupación tramitados por la abogada, los investigadores encontraron que familias enteras de Cuba habían llegado al país a través de matrimonios encadenados.
Notaron además que todas esas bodas se concertaban con ciudadanos residentes en Vecindario, Gran Canaria, y que los propios reagrupados participaban después, una vez divorciados de mutuo acuerdo, en nuevas bodas para regularizar a otros compatriotas.
Tras el hallazgo la Policía investigó a unas 150 personas, de las que fueron detenidas 48, la mayoría de nacionalidad cubana.
La Jefatura Superior de Policía de Canarias resaltó que las irregularidades cometidas en estos expedientes de extranjería han provocado, en algunos casos, que menores nacidos en España de ciudadanos reagrupados de forma fraudulenta tuvieran legalmente reconocido como padre o madre a un falso contrayente.
La agencia de noticias EFE señala que al parecer el grupo estaba dirigido por una abogada y su pareja, ambos naturales de Cuba y residentes de Gran Canaria.
Los detenidos proporcionaban un paquete de servicios por 6 mil euros, equivalente a 7.500 dólares, lo que incluía el matrimonio en España, una agrupación familiar, la adquisición de la nacionalidad española y un divorcio de mutuo acuerdo.
El Cuerpo Nacional de Policía informó este miércoles que la mayoría de los usuarios de estos servicios tenían como última finalidad llegar a Estados Unidos a través de México gracias a sus documentos españoles.
En el curso de la investigación, que comenzó en 2010, la Policía detectó más de un centenar de expedientes fraudulentos en los que podría haber intervenido esta red de regularización de inmigrantes.
Los investigadores pudieron comprobar que la abogada, especializada en reagrupaciones familiares y expedientes de nacionalización, estaba mediando en una serie de matrimonios que tenían irregularidades.
La Policía aseguró que la letrada y su pareja, también de origen cubano y nacionalizado español, ofrecían a compatriotas que residan en España de forma irregular la posibilidad de legalizar su situación y también contactaban en Cuba con personas interesadas en viajar a Europa en calidad de reagrupados.
Después de revisar los expedientes de reagrupación tramitados por la abogada, los investigadores encontraron que familias enteras de Cuba habían llegado al país a través de matrimonios encadenados.
Notaron además que todas esas bodas se concertaban con ciudadanos residentes en Vecindario, Gran Canaria, y que los propios reagrupados participaban después, una vez divorciados de mutuo acuerdo, en nuevas bodas para regularizar a otros compatriotas.
Tras el hallazgo la Policía investigó a unas 150 personas, de las que fueron detenidas 48, la mayoría de nacionalidad cubana.
La Jefatura Superior de Policía de Canarias resaltó que las irregularidades cometidas en estos expedientes de extranjería han provocado, en algunos casos, que menores nacidos en España de ciudadanos reagrupados de forma fraudulenta tuvieran legalmente reconocido como padre o madre a un falso contrayente.