Un grupo de activistas cubanos se concentró este miércoles a las puertas del periódico “El País”, en España, en protesta por un artículo que invita a los turistas de ese país a visitar Cuba e ignora la situación represiva en la isla.
“Nos sentimos ofendidos ante un artículo que tiene una visión sesgada del problema cubano y que supone que las respuestas son solamente de tipo económico”, dijo la historiadora Carolina Barrero, una de las manifestantes, en declaraciones a Radio Martí.
El artículo, publicado el 21 de abril por el columnista de viajes Paco Nadal, se pregunta si es “buen momento” para viajar a Cuba, a pesar de la inflación. No esconde algunos de los problemas de la economía cubana, pero concluye: “¿Afecta esto al turista? Pues por suerte (para el turista) o por desgracia (para el cubano), no. Apenas afecta, al menos a quien viaja en circuitos y hotelería tradicional”.
Menciona los “numerosos cortes de suministro eléctrico en zonas turísticas” y asegura que “quienes pernoctaban en hoteles lo sufrieron menos, porque casi todos tienen grupo electrógeno”.
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Michel Suárez reportó desde Madrid para Radio Martí
“…Pero los viajeros que se alojaban en casas de huéspedes (…) sufrían esos cortes igual que los cubanos”, apunta.
El texto, según los activistas, promueve los hoteles de la alianza entre los militares de GAESA y las empresas españolas.
“Tiene una mirada colonialista, que reproduce la narrativa del régimen y la economía extractivista, que empresas españolas como Meliá e Iberostar encarnan en sus alianzas con el régimen cubano y con la empresa militar GAESA”, opina Barrero.
Para el también historiador Leonardo Fernández Otaño, el texto del periódico “minimiza la pobreza, desconoce los efectos de la represión y ensalza la construcción de hoteles, en detrimento de la inversión pública en salud y educación, en un contexto donde nuestra gente está sufriendo”.
“En lugar de dar visibilidad a lo que está sucediendo en Cuba, se opta por sugerir al turista que vaya y consuma en los hoteles de GAESA, en vez de en los pequeños negocios familiares que intentan salir adelante”, añade.
La carta entregada en las instalaciones del periódico se pregunta: “¿Qué pensarían los lectores españoles si durante los años del franquismo, en Cuba hubiéramos promovido el turismo en España?”.
Fernández Otaño dijo estar “indignado” porque “un medio como El País, que nació en un contexto democratizador como el español, se calle ante la represión contra las comunidades empobrecidas en Cuba, ante la realidad de los familiares de los presos políticos”.
Acerca de la línea editorial del diario, Barrero lamentó que no se mencionen las “legítimas aspiraciones de los cubanos de terminar con la dictadura y entrar en un proceso democrático, lo que sería la verdadera solución”.
Una transmisión en redes sociales de la periodista Iliana Hernández mostró al grupo a las puertas de Prisa Noticias, la empresa editora del periódico.
El artículo de Paco Nadal contiene afirmaciones polémicas —y sin datos—, entre ellas que “en 2023 la situación de abastecimiento parece mejorar muy lentamente” y que “el sistema de doble moneda ya desapareció” y “ahora solo existe el peso cubano”.
En su viaje de 11 días a Cuba, dijo haber entrevistado a “muchos directores de hoteles, a guía locales y gente del sector”, lo que le permite asegurar que “el turista apenas se entera de esa escasez” y “la sensación era de normalidad”.
“Un duro contraste con la realidad del cubano”, dice al final del texto.