"Las personas tienen que pagar impuestos muy altos al gobierno y eso les impide invertir en la estrucutura de su negocio" destacó el periodista independiente Luis Felipe Rojas.
Los cuentapropistas en Cuba enfrentan serias limitaciones para realizar su trabajo a pesar de que las últimas leyes aprobadas por el gobierno indicaban que abrirían facilidades para que la ciudadanía pudiera desarrollar la “iniciativa privada”.
En la provincia Holguín las restricciones estatales y la falta de insumos para que los ciudadanos puedan abrirse paso en el trabajo por cuenta propia son a juicio del bloguero cubano Luis Felipe Rojas Rosabal los obstáculos fundamentales que enfrentan los ciudadanos en su gestión diaria.
“No existe un mercado mayorista que venda los utensilios y por otra parte tienen muchos problemas para crear su propia estructura, como son los lugares para realizar las ventas,” apuntó Rojas Rosabal.
El periodista independiente que recorrió algunas zonas de la ciudad de Holguín destacó las condiciones en que trabajan muchos de ellos “las personas tiene que vivir de alguna manera y lo que hacen es crear puntos improvisados, venden refrescos, jugos de frutas, frituras pero en la mayoría de los casos sin condiciones higiénicas,” apuntó.
Los controles estatales sobre los cuentapropistas y los impuestos tan altos que les ha situado el gobierno también han sido a juicio del comunicador lo que ha contribuido a que muchos vendedores se arriesguen a realizar sus ventas de manera furtiva.
