Cuestionan reunión de Díaz-Canel con Alto Comisionado de Derechos Humanos

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el abogado austriaco Volker Türk, se reunió el martes en Bruselas con Miguel Díaz-Canel.

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El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el abogado austriaco Volker Türk, se reunió el martes en Bruselas con el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel, en el contexto de la III Cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC).

“Buena oportunidad para reunirme en Bruselas con el presidente de Cuba Miguel Díaz-Canel para un amplio y franco intercambio sobre temas de derechos humanos”, expresó Türk en Twitter, en una publicación acompañada de una fotografía suya con el mandatario cubano.

Casi de inmediato, periodistas, académicos y activistas reaccionaron en la red social expresando su rechazo a la reunión y el reconocimiento de Díaz-Canel como representante de Cuba. Además, exigieron conocer los temas de los cuales habían hablado.

“Él no fue un presidente elegido democráticamente, ese hombre es un delincuente que dio la orden de atacar a su pueblo desarmado, tiene más de mil presos políticos solo por pedir libertad”, dijo la activista Glenda Rancaño, residente en Florida.

Los periodistas cubanos Mario Pentón, José Raúl Gallego y Cynthia de la Cantera, todos ellos exiliados, también dejaron cuestionamientos al funcionario de Naciones Unidas. “Él no es el presidente cubano”, comentó Pentón, en referencia a la falta de respaldo democrático de su cargo.

“¿Ustedes hablaron sobre el acoso a periodistas y activistas? ¿Sobre los mil prisioneros políticos? (...) ¿Sobre los cortes de Internet? ¿Sobre las penalizaciones por postear en redes sociales? ¿Sobre qué derechos humanos hablaron?”, preguntó de la Cantera.

Mientras, José Raúl Gallego, también investigador y profesor universitario, dijo que quedaba en espera de lo que habló Volker Türk con “el administrador de un país con más de mil presos políticos y que llamó a una guerra en televisión nacional”.

A más de dos años del estallido social de julio de 2021, que fue fuertemente reprimido por órdenes de Díaz-Canel, y que causó incluso la muerte de un manifestante por un disparo de arma de fuego de un policía, en las cárceles cubanas hay más de mil personas presas por motivos políticos. La mayoría de ellas, por participar en las protestas de ese entonces, pero unas 150 estaban desde antes privadas de libertad, y otras han sido encarceladas en protestas posteriores o por su activismo.

En declaraciones a Martí Noticias, Gallego destacó que la información ofrecida por el Alto Comisionado es escueta y que la que ofrece la parte cubana no es completamente fiable. “Entonces hay pocos elementos como para valorar de qué se habló”.

“Yo creo que sea cual sea el tono y el contenido de esa reunión, lo que les corresponde a los cubanos es presionar a la Oficina del Alto Comisionado para que haga su trabajo. Aunque sabemos que el resultado práctico de este tipo de gestiones es bastante limitado, al menos puede servir para poner en evidencia no solamente las violaciones que se cometen en Cuba sino la falta de voluntad del gobierno cubano para colaborar con este tipo de organismos internacionales”, afirmó.

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La presencia de Díaz-Canel en la capital belga ha estado acompañada de intensas protestas de activistas cubanos residentes en Europa, que han manifestado su rechazo al líder autoritario y exigido la liberación de los presos políticos en la isla y respeto a los derechos humanos.

Asimismo, la cumbre, que se extendió del 13 al 16 de julio, concluyó con una declaración que ha provocado indignación en buena parte de la comunidad cubana, pues condena el embargo de Estados Unidos al régimen de La Habana, pero no menciona en ningún momento la represión que sufre el pueblo en la isla.

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En declaraciones a Martí Noticias para una nota previa sobre el tema, el dramaturgo cubano Yunior García calificó la declaración como “ambigua y contradictoria”, sobre todo en el tema de los derechos humanos.

“Convierte el tema de los derechos humanos en una especie de nudo gordiano donde sí declaran que estarían dispuestos a velar por ellos y a respetarlos, pero no se sabe específicamente o exactamente cómo. Y tampoco se es específico a la hora de mencionar lo que está ocurriendo en materia de derechos humanos y de ausencia de democracia en países como Nicaragua, Cuba y Venezuela", expresó.