En Cuba ya es posible conectarse a través del teléfono móvil a Internet, así como enviar correos electrónicos. Estos consejos pueden ayudarte a que te sientas más seguro al enviar un mensaje.
El envío de un correo electrónico no es tan seguro como parece. La información que se manda tampoco se traslada desde el emisor hasta el destinatario de un modo directo, sino que pasa obligatoriamente por un servidor, que es el que gestiona la conexión que se está usando para navegar por Internet.
En casos de monopolio en las telecomunicaciones, como ocurre en Cuba con la compañía estatal ETECSA, toda la información pasa por sus servidores y puede ser revisada.
Este control de la información y los mensajes que se envían a través de las cuentas de @nauta.cu (las únicas habilitadas por el gobierno cubano para conectarse a la red en los teléfonos móviles) puede ser bien manual –abriendo el propio correo- o mecanizada, usando robots que escanean los mensajes en busca de determinadas palabras. Esto es lo más común dado el volumen que se envían cada día, por lo que existen métodos para burlar el espionaje de correos electrónicos y minimizar el coste de las tarifas muy sencillos:
Oculta palabras clave para no ser detectado
Si quieres insertar en el mensaje palabras o términos que no deseas que se lean o sean detectados por el escaneo informático de un robot, nada mejor que enmascararlas. Para ello lo más básico es modificar esa palabras, pero que quien las lea sepa identificarlas también.
Tomemos como ejemplo la palabra “censura”; en vez de colocarla literalmente, se pueden insertar espacios, repeticiones de letras o signos entre medias. De ese modo quedarían cosas como estas: ceensuraaaaa, c -e?nXura o sencur-¿a. Aparentemente ilógicas e irreconocibles para los rastreadores.
Más complejo aún es usar sistemas de encriptación basados en alfabetos, como los que empleaban en la Antigüedad. En ese caso cada letra equivale a otra, que puede ser una aleatoria, la siguiente en orden, la anterior…
Usa expresiones coloquiales o sin aparente sentido
La creatividad en el lenguaje cubano puede dar mucho de sí. También para que no necesites escribir literalmente aquellas palabras o conceptos que quieres transmitir. Empleando retórica e ideas apartemente poco concretas probablemente no van a detectar un mensaje, pero sí existe la afinidad con el receptor éste seguro que lo entenderá.
Borra los mensajes sospechosos
El teléfono móvil también puede ser víctima de un virus, software que se instala en los sistemas operativos de smartphones y perjudican la funcionalidad del dispositivo
o son capaces de extraer información de él. Bórralos en cuanto lleguen y así evitarás problemas.
Además, si recibes emails no deseados con imágenes o vídeos y los descargas estarás consumiendo una gran cantidad de kilobytes, y por tanto pagando de más sin necesidad.
Comprime tus archivos para ahorrar espacio
De este modo se consiguen dos cosas: por un lado reducir el tamaño de los archivos y por otro que estén codificados, pues será necesario un programa para volver a abrirlo. Existen aplicaciones gratuitas que permiten comprimir no sólo documentos de texto sino imágenes o canciones. Algunas de las más populares que puedes descargar son iZip para iPhone o RAR para Android.
Con ellas puedes crear archivos RAR y ZIP, pero también descomprimir los que te llegan en otros formatos como TAR, GZ, BZ2, X7, 7z, ISO o ARJ. La principal ventaja es que reducirás el tamaño de los archivos y por tanto el coste del mensaje: un texto de un par de hojas se puede quedar en 1 o 2 kb y costar tan sólo 0.0009 CUC. Si quieres aumentar el nivel de seguridad, algunas apps te permiten también crear claves para abrir los documentos.
Elimina el historial de mensajes
A no ser que necesites mantenerlos por algún motivo, resulta una buena práctica vaciar la bandeja de entrada habitualmente. Esto no te garantiza que tus mensajes no hayan sido leídos previamente por otros, pero sí que ya que no puedan acceder a ellos desde tu cuenta.
Bloquea las imágenes para que no se abran
Una medida muy útil para evitar el consumo de datos es bloquear la visualización de imágenes en el cuerpo de los mensajes de los correos. Algunos servicios de webmail dan esa opción para ahorrar espacio y consumo de datos. Si tu proveedor de email no tiene habilitada esa opción, simplemente no descargues las fotografías si no estás seguro de su utilidad.
Ten en cuenta que bajar una fotografía de 500 kb, con las tarifas actuales de Cuba, supone un coste de 0,50 CUC. Si deseas recibir imágenes, pide a quien te vaya a enviar el mensaje que las reduzca de tamaño (para ello puede usar aplicaciones gratuitas para smartphone como Reduce Photo Size o usar el propio software del celular).
Usa apps offline o software gratuito
Existen muchas aplicaciones o programas que no necesitan estar conectadas a Internet para funcionar, caso de los mapas, documentos, juegos, etc., aunque sí necesitarás acceso a la red para descargarlas: úsalas para encontrar alguna utilidad de cara al envío de mensajes. Puedes buscarlas en las plataformas de Apple, Android mediante el teléfono así como desde el ordenador y pasarlas después al celular.
Para la computadora te recomendamos la página web Softonic, donde encontrarás miles de programas de distinto tipo, la mayoría gratuitos, relacionados con seguridad, encriptación y trucos sencillos para enmascarar mensajes.
En casos de monopolio en las telecomunicaciones, como ocurre en Cuba con la compañía estatal ETECSA, toda la información pasa por sus servidores y puede ser revisada.
Este control de la información y los mensajes que se envían a través de las cuentas de @nauta.cu (las únicas habilitadas por el gobierno cubano para conectarse a la red en los teléfonos móviles) puede ser bien manual –abriendo el propio correo- o mecanizada, usando robots que escanean los mensajes en busca de determinadas palabras. Esto es lo más común dado el volumen que se envían cada día, por lo que existen métodos para burlar el espionaje de correos electrónicos y minimizar el coste de las tarifas muy sencillos:
Oculta palabras clave para no ser detectado
Si quieres insertar en el mensaje palabras o términos que no deseas que se lean o sean detectados por el escaneo informático de un robot, nada mejor que enmascararlas. Para ello lo más básico es modificar esa palabras, pero que quien las lea sepa identificarlas también.
Más complejo aún es usar sistemas de encriptación basados en alfabetos, como los que empleaban en la Antigüedad. En ese caso cada letra equivale a otra, que puede ser una aleatoria, la siguiente en orden, la anterior…
Usa expresiones coloquiales o sin aparente sentido
La creatividad en el lenguaje cubano puede dar mucho de sí. También para que no necesites escribir literalmente aquellas palabras o conceptos que quieres transmitir. Empleando retórica e ideas apartemente poco concretas probablemente no van a detectar un mensaje, pero sí existe la afinidad con el receptor éste seguro que lo entenderá.
Borra los mensajes sospechosos
El teléfono móvil también puede ser víctima de un virus, software que se instala en los sistemas operativos de smartphones y perjudican la funcionalidad del dispositivo
Además, si recibes emails no deseados con imágenes o vídeos y los descargas estarás consumiendo una gran cantidad de kilobytes, y por tanto pagando de más sin necesidad.
Comprime tus archivos para ahorrar espacio
De este modo se consiguen dos cosas: por un lado reducir el tamaño de los archivos y por otro que estén codificados, pues será necesario un programa para volver a abrirlo. Existen aplicaciones gratuitas que permiten comprimir no sólo documentos de texto sino imágenes o canciones. Algunas de las más populares que puedes descargar son iZip para iPhone o RAR para Android.
Con ellas puedes crear archivos RAR y ZIP, pero también descomprimir los que te llegan en otros formatos como TAR, GZ, BZ2, X7, 7z, ISO o ARJ. La principal ventaja es que reducirás el tamaño de los archivos y por tanto el coste del mensaje: un texto de un par de hojas se puede quedar en 1 o 2 kb y costar tan sólo 0.0009 CUC. Si quieres aumentar el nivel de seguridad, algunas apps te permiten también crear claves para abrir los documentos.
Elimina el historial de mensajes
A no ser que necesites mantenerlos por algún motivo, resulta una buena práctica vaciar la bandeja de entrada habitualmente. Esto no te garantiza que tus mensajes no hayan sido leídos previamente por otros, pero sí que ya que no puedan acceder a ellos desde tu cuenta.
Bloquea las imágenes para que no se abran
Una medida muy útil para evitar el consumo de datos es bloquear la visualización de imágenes en el cuerpo de los mensajes de los correos. Algunos servicios de webmail dan esa opción para ahorrar espacio y consumo de datos. Si tu proveedor de email no tiene habilitada esa opción, simplemente no descargues las fotografías si no estás seguro de su utilidad.
Ten en cuenta que bajar una fotografía de 500 kb, con las tarifas actuales de Cuba, supone un coste de 0,50 CUC. Si deseas recibir imágenes, pide a quien te vaya a enviar el mensaje que las reduzca de tamaño (para ello puede usar aplicaciones gratuitas para smartphone como Reduce Photo Size o usar el propio software del celular).
Usa apps offline o software gratuito
Existen muchas aplicaciones o programas que no necesitan estar conectadas a Internet para funcionar, caso de los mapas, documentos, juegos, etc., aunque sí necesitarás acceso a la red para descargarlas: úsalas para encontrar alguna utilidad de cara al envío de mensajes. Puedes buscarlas en las plataformas de Apple, Android mediante el teléfono así como desde el ordenador y pasarlas después al celular.
Para la computadora te recomendamos la página web Softonic, donde encontrarás miles de programas de distinto tipo, la mayoría gratuitos, relacionados con seguridad, encriptación y trucos sencillos para enmascarar mensajes.